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Muere el director estadounidense Sidney Lumet a los 86 años

  • Fue nominado cinco veces al Oscar, pero no ganó ninguno
  • Su último filme lo rodó con 83 años

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Muere Sidney Lumet

El director estadounidense Sidney Lumet ha fallecido a los 86 años de edad en su casa de Manhattan, según informa el diario The New York Times.

Su hijastra, Leslie Gimbel, indicó que el director no pudo superar el linfoma que le afectaba.

Entre su larga filmografía destacan títulos como: Serpico o Doce hombres sin Piedad.

Lumet escribió una vez: "Si bien el objetivo de todas las películas es estretener, yo voy un paso más allá. En mis películas se obliga al espectador a examinar un aspecto u otro de su propia conciencia".

Al igual que ocurre con Woody Allen o Martin Scorsese, la filmografía de Lumet estuvo muy condicionada por la ciudad de Nueva York, y raramente dirigió en Hollywood.

Lumet es uno de los directores más destacados de la segunda mitad de la centuria pasada. Su obra es prolífica e irregular, superando las cuarenta películas en las que se mueve por distintos géneros.

El cineasta trabajó estrechamente con varias leyendas de Hollywood, entre éstas los actores Henry Fonda, Al Pacino, Katharine Hepburn, Ingrid Bergman, Sean Connery, Robert Duvall y Faye Dunaway.

En 2005 recibió un Oscar Honorífico de la Academia por su carrera. Previamente había sido cinco veces candidato a los premios, sin tener éxito en ninguna de las ocasiones.

Aspiró al premio al mejor director en cuatro ocasiones por Doce hombres sin Piedad (1957), Tarde de Perros (1975), Network (1976) y El veredicto (1982); y en una por el mejor guión por El rey de la ciudad (1981).

Su cine es caracteristicamente distante y detallista, profundamente elaborado, en las que explora asuntos complejos.

Su última cinta fue Antes de que el diablo sepa que hayas muerto, que rodó en 2007 cuando ya había cumplido los 83 años.

Sus orígenes estuvieron vinculados al teatro y la televisión

Sidney Lumet nació el 25 de junio de 1924 en Filadelfia y era hijo de los actores Eugenia Wermus y Baruch Lumet.

Estudió en la Professional Children School de Manhattan, a la vez que tambien participaba en diversos folletines radiofónicos.

En 1935 interpretó en Broadway a uno de los muchachos de la obra de Sidney Kingsley "Atajo al infierno", llevada al cine por Willian Wyler dos años después. Y en 1939 realizó su único trabajo como actor para el cine en "Third of a nation".

Durante la II Guerra Mundial prestó servicios (1942-1946) en el mantenimiento de radares en la India y Burma.

En 1947 sustituyó a Marlon Brando como protagonista en "A flag is born", un espectáculo de Ben Hetch con música de Kurt Weil y puesta en escena de Luther Adler. Ese mismo año fundó en Nueva York una de las primeras escuelas-estudio, la Off Broadway, en abierto desafío al método de Strasberg-Kazan en el Actor's Estudio.

En 1950 dejó el teatro como actor y entró en TV como realizador, contratado por la cadena CBS, donde hizo obras de Tenessee Williams, Arthur Miller, etc.

De 1953 a 1957 fue la edad de oro de la televisión en directo, y Lumet aprovechó el medio para reflejar de modo realista los problemas cotidianos. No en vano, es considerado uno de los miembros de la "generación de la TV".

Durante su época televisiva realizó más de 250 telefilmes dramáticos, como "You are there", "Omnibus", "Best of Broadway", "Alcoa Theater", "Goodyear playhouse", "Sacco-Vanzetti story", "This property is condemned", "The iceman cometh" y "All the King's men".

Una extensa filmografía

Debutó como cineasta con el largomentraje Doce hombres sin piedad (1957), protagonizado y producido por Henry Fonda, y que le valió el Director Guild Award.

En pantalla grande se especializó en adaptaciones de obras teatrales, como Piel de serpiente (1959).

Su primer gran éxito de taquilla le llegó con El prestamista (1964), cinta que protagonizó Rod Steiger y a la que sucedieron Llamada para un muerto (1966); Sérpico (1973); Asesinato en el Orient Express (1974); Tarde de perros (1975); Network, un mundo implacable (1976), cinta con la que ganó el Globo de Oro al mejor director; y Equus (1977).

Posteriormente estrenó El príncipe de la ciudad (1981), Un lugar en ninguna parte (1988) y Negocios de familia (1989), y en la década de los 90 llegaron Una extraña entre nosotros (1992), El abogado del diablo (1993), En estado crítico (1997), Cae la noche sobre Manhattan (1997) y Gloria (1999).

Reconocido en 1993 con el Premio Griffith de los Directores de América, en 2007 retomó el cine con la que es su última película, Antes de que el diablo sepa que has muerto (2007).