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El avión de Zelaya aterrizará en El Salvador por falta de permiso para hacerlo en Honduras

  • El director de Aeronáutica Civil de Honduras dice que el vuelo no tiene autorización
  • Asegura que el avión, procedente de Washington, ha sido desviado a El Salvador
  • Ningún jefe de Estado acompaña a Zelaya en su regreso
  • Zelaya ha ordenado a los militares que abran el aeropuerto
  • Micheletti denuncia movimientos de tropas nicaragüenses hacia la frontera común

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ZELAYA, QUE VIAJA HACIA HONDURAS, INVITA A LA POBLACIÓN A "CAMINAR HACIA EL AEROPUERTO"
Una movilización de decenas de miles de personas favorables al depuesto presidente Manuel Zelaya ha hecho retroceder el dispositivo de seguridad establecido ante el aeropuerto de Tegucigalpa para contener la marcha.

El director de Aeronáutica Civil de Honduras, Alfredo San Martín, ha asegurado que el avión que transporta desde Washington al depuesto presidente de Honduras Manuel Zelaya aterrizará en El Salvador porque no tiene autorización para hacerlo en territorio hondureño. Por su parte, Zelaya ha ordenado a los militares que abran el aeropuerto, mientras que el nuevo presidente hondureño, Roberto Micheletti, ha denunciado movimientos de "algunas tropas" nicaragüenses hacia la frontera común.

San Martín ha indicado a la prensa que, ante la negativa de las autoridades hondureñas, la aeronave "fue desviada a El Salvador; no va a aterrizar en Tegucigalpa".

El avión ha partido de la capital norteamericana a las 19:10 GMT (21.10 hora peninsular española), según ha señalado el canciller venezolano, Nicolás Maduro.

El canciller hondureño, Enrique Ortez, había anunciado que su Gobierno no permitiría el aterrizaje del avión de Zelaya, entre otras razones, por "prudencia, porque no podemos correr el riesgo de que empiece a correr sangre" si las autoridades intentan detener al depuesto gobernante, sobre quien pesa orden de captura.

Además, según Ortez, se desconocen los datos de identificación del avión y su plan de vuelo, indispensables para autorizar su aterrizaje.

El director de Aeronáutica Civil ha ratificado que "ningún aeropuerto del país va a permitir que aterrice ninguna aeronave que no haga el tramite correspondiente con la anticipación debida".

Zelaya ordena abrir el aeropuerto

Zelaya, ya en vuelo, ha intentado llevar a cabo el aterrizaje en Tegucigalpa y ha ordenado a los militares abrir el aeropuerto de la capital.

"El presidente constitucional está viajando en este avión", les ha dicho Manuel Zelaya, según la cadena Telesur, realizando de este modo un llamamiento a la reconciliación y al diálogo entre los hondureños.

"En unas dos horas estaremos llegando a Honduras", manifestó Zelaya, quien ha llamado "al diálogo a todos los hondureños (...), que depongan todo acto de violencia".

Preguntado sobre la prohibición formulada por las nuevas autoridades hondureñas respecto al aterrizaje de su avión en Tegucigalpa, Zelaya ha dicho que se trata de "un gobierno de facto y todas las acciones de ese gobierno de facto son nulas".

Respecto a la posibilidad de aterrizar en algún otro aeropuerto, incluida una base militar de EEUU en Honduras, el presidente, depuesto hace una semana, ha indicado que, en caso necesario, el avión en el que viaja tiene "otras opciones".

Zelaya, derrocado hace una semana por los militares y enviado a Costa Rica, pretende regresar desde Washington a Honduras después de que la Organización de Estados Americanos (OEA) suspendiera a este país por no reinstalarlo en el poder.

El depuesto presidente hondureño está acompañado por el presidente de la Asamblea General de las Naciones Unidas, el ex canciller nicaragüense Miguel D'Escoto.

En otro vuelo, cuyo destino original es El Salvador, viajan el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, y los presidentes de Argentina, Paraguay y Ecuador, Cristina Fernández, Fernando Lugo y Rafael Correa, respectivamente.

Los manifestantes hacen retroceder el dispositivo de seguridad

Una movilización de decenas de miles de personas favorables al depuesto presidente ha hecho retroceder el dispositivo de seguridad establecido ante el aeropuerto de Tegucigalpa para contener la marcha.

 Sin embargo, hasta ahora los manifestantes no han entrado al aeropuerto, que sigue bajo el control de las fuerzas de seguridad, y tampoco se han producido incidentes de gravedad, según constató Efe.

La multitud cubre el amplio tramo de un bulevar frente al aeropuerto internacional Toncontín, donde espera recibir al depuesto presidente.

Tras pasar los retenes, los seguidores de Zelaya cantaron el himno nacional con el puño izquierdo levantado y, al transcurrir la marcha, los policías y militares prácticamente pasaron "de guardianes a espectadores", desde una orilla del bulevar y partes altas del sector.

Los manifestantes portan banderas de Honduras, del gobernante Partido Liberal y del minoritario partido Unificación Democrática (UD, izquierda), entre otras, así como fotografías de Zelaya y pancartas con consignas a favor del presidente depuesto.

Micheletti denuncia movimientos de tropas de Nicaragua en la frontera

Por su parte, el nuevo presidente de Honduras, Roberto Micheletti, ha asegurado que hay movimientos de "algunas tropas" nicaragüenses hacia la frontera común y ha pedido a los mandatarios de Nicaragua, Daniel Ortega, y Venezuela, Hugo Chávez, que respeten la soberanía del país.

Además de pedir a Ortega que "por favor respete nuestra soberanía", también se lo ha reclamado a Chávez, "que deje ya de estar agrediendo a nuestro país como lo está haciendo a través de los medios de comunicación que ellos tienen".

Sin embargo, y tras denunciar una situación de "agresión psicológica", el nuevo presidente ha dicho que podría tratarse de "pequeños grupos de tropas, posiblemente sin autorización misma de sus comandantes" y agregó que "ni siquiera han cruzado la frontera".

Por su parte, el Gobierno de Nicaragua ha negado tajantemente las acusaciones, que ha calificado de "totalmente falsas".

 

El Gobierno de Honduras propone diálogo a los países de la OEA

Por otra parte, el Gobierno de Honduras ha propuesto a los países de la Organización de Estados Americanos (OEA) un "diálogo de buena fe" para resolver la grave crisis política que vive este país a causa del derrocamiento de Zelaya.

"Juro ante Dios que Nicaragua no está desplazando tropas hacia Honduras", ha dicho Ortega por teléfono a Radio Ya, afín al Gobierno.