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Los investigadores dicen que el "mayor" atentado jamás cometido en Pakistán "lleva la marca de Al Qaeda"

  • Difunden las imágenes del ataque que al principio sólo incendió la cabina del camión-bomba
  • Entre las al menos 53 víctimas hay dos estadounidenses, un vietnamita y el embajador checo
  • Nadie ha reivindicado el atentado, pero los expertos e investigadores apuntan a Al Qaeda
  • Los islamistas se refugian al noroeste del país, donde los combate EE.UU. desde Afganistán
  • Pakistán es el principal aliado de Washington en su lucha contra el terrorismo en la región
  • La comunidad internacional estudia reforzar la seguridad de sus funcionarios en el país

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Vídeo de las cámaras del hotel Marriott

El Gobierno de Pakistán ha calificado el atentado contra el hotel Marriott de Islamabad como el "mayor" de la historia en el país y han dicho que "lleva la marca de Al Qaeda". Con al menos 53 muertos, marca un hito en la feroz oleada de ataques perpetrados por los islamistas, que acusan a las a autoridades de colaboracionismo con Estados Unidos.

El ministro paquistaní del Interior, Rehman Malik, ha cifrado en 53 muertos y 266 heridos el balance de víctimas, a pesar de que fuentes policiales habían contabilizado más de 60 fallecidos.

Y a pesar de que en el pasado Pakistán había sufrido atentados más sangrientos, el ministro lo ha calificado como el "mayor" que ha sufrido el país por la potencia y el objetivo de la explosión. Según los investigadores, los terroristas utilizaron al menos 600 kilos de explosivos.

"Teníamos información sobre un posible atentado en Islamabad. Esta acción estaba muy bien planeada", ha dicho Malik, quien ha negado fallos de seguridad.

Aunque por el momento nadie ha reivindicado la acción, según el dirigente el atentado fue obra de alguno de los grupos que opera en las áreas tribales del noroeste paquistaní fronterizas con Afganistán. Una fuente de la investigación citada por la agencia France Presse ha señalado que la acción "lleva la marca de Al Qaeda".

El editorial del periódico local Daily Times ha calificado el atentado como el "11-S de Pakistán"

El camión pasó el control como si llevara mercancías

En su rueda de prensa, Malik ha presentado un vídeo con imágenes de las cámaras de seguridad. El vídeo recoge la llegada del camión al control de seguridad del hotel, donde el conductor se suicida haciendo estallar una pequeña carga explosiva y causa un incendio en la cabina del vehículo.

Los guardas huyen ante lo sucedido, aunque más tarde se recomponen y uno de ellos intenta incluso apagar el fuego con un extintor, sin evitar que el fuego llegue a la parte trasera del camión y provoque el estallido final.

La explosión dejó un cráter de 17 metros de diámetro y se vio además acompañada del estallido de una tubería de gas, lo que generó un incendio que atrapó a varios huéspedes del Marriott, muy frecuentado por extranjeros y hombres de negocios.

Los terroristas lograron evitar los controles de seguridad porque hicieron pasar el camión bomba por un vehículo de transporte de materiales de la construcción.

Preocupación en la comunidad internacional

Malik dijo no querer "ayuda exterior" para la investigación del atentado, en el que confirmó la muerte de cuatro extranjeros, entre los cuales hay dos estadounidenses, un vietnamita y el embajador checo en Pakistán, Ivo Szdarek.

Entre los heridos hay además 11 extranjeros que fueron rescatados por los equipos de ayuda en el interior del hotel, donde esta mañana los bomberos se afanaban todavía por controlar el fuego.

Aparte de suscitar la condena de medio mundo, el atentado ha generado una honda preocupación en la comunidad expatriada de Islamabad, y de hecho las embajadas de la Unión Europea debatirán mañana la toma de medidas de seguridad en la capital paquistaní.

Asimismo, la ONU también está considerando elevar el nivel de la seguridad de su personal en Islamabad.

Los islamistas ponen en jaque al Estado

El ataque contra el Marriott es el último en la brutal serie de atentados que en los dos últimos años ha sufrido Pakistán, donde continúa activo un potente movimiento integrista que tiene en jaque al Ejército en el noroeste del país.

Los especialistas reconocen que esa zona se ha convertido en el nuevo frente de la "guerra global contra el terrorismo islamista".

Estados Unidos está convencido de que los talibanes y Al Qaeda se han reforzado en esas zonas tribales. De hecho, en las últimas semanas, las fuerzas estadounidenses han multiplicado sus ataques con misiles en esa zona. 

Según informaba el jueves el New York Times, George W. Bush autorizó en secreto esas acciones sin el consentimiento de las autoridades de Pakistán, el principal aliado de Estados Unidos en la región. Esta República Islámica es la única potencia nuclear del mundo musulmán. 

El nuevo presidente de Pakistán, Asif Alí Zardari, había dicho precisamente horas antes del atentado que no iba a tolerar esa violación de su soberanía. Y después del atentado ha dicho que luchará para erradicar del país el "cáncer" del terrorismo "a toda costa".

A pesar de todo, no ha modificado su agenda y ha anunciado su partida hacia Estados Unidos para asistir a la asamblea general de Naciones Unidas, donde tiene previsto reunirse con el presidente. A Zardari se le percibe, igual que a su predecesor Pervez Musharraf, como aliado de la Casa Blanca.

La República Islámica de Pakistán, única potencia nuclear del mundo musulmán, ha sufrido más de mil bajas militares en la lucha contra los milicianos islamistas, cuyos atentados en todo el país en los últimos meses han causado cientos de muertos.