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El rey ha abandonado antes de mediodía el Hospital USP San José, de Madrid, doce horas después de ser intervenido para reducir una luxación en la cadera derecha, y esta misma tarde ha reanudado su actividad oficial en la Zarzuela, donde se ha reunido con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.

Don Juan Carlos ha recibido el alta hospitalaria a las 11:00 horas y, con la ayuda de muletas, se ha dirigido al aparcamiento del centro sanitario para subir a un automóvil, con los cristales tintados, en el que ha abandonado poco después el hospital con destino al Palacio de la Zarzuela, donde continuará su recuperación.

Apenas siete horas y media después de abandonar el hospital, el rey ha recibido a Rajoy en la Zarzuela para mantener su habitual despacho semanal con el jefe del Ejecutivo, que ha durado mas de una hora y hoy, de forma excepcional, ha contado con cobertura gráfica.

El rey ha salido esta mañana del hospital San José, de Madrid, donde anoche lo intervinieron de urgencia de la cadera por segunda vez en 13 días. Don Juan Carlos sufrió ayer una luxación.

El doctor Gutierrez ha explicado en "La Mañana de la 1" en qué consiste una luxación de cadera como la que ha sufrido el rey Juan Carlos y de la que ha sido de nuevo operado.

El ministro de Asuntos Exteriores explica en Radio Nacional que se encontraba con el rey momentos antes de que este fuese intervenido por una luxación en la cadera. García Margallo ha relatado que durante una recepción con el ministro emiratí de Asuntos Exteriores, el monarca hizo un movimiento con la pierna izquierda y percibió "en la cara que estaba teniendo un dolor intenso".

El Rey ha sido operado de nuevo esta noche. Un mal movimiento le ha provocado una luxación de la cadera derecha que le implantaron en el Hospital San José de Madrid hace 12 días tras su accidente en Botsuana. Don Juan Carlos retomaba ayer parte de su agenda pública.

El Rey ha vuelto a ser operado esta noche. Esta vez, ha sido por una luxación de cadera por un mal movimiento. Don Juan Carlos está ingresado en la Clínica San José de Madrid y este viernes conoceremos un primer parte médico.

El Rey se recupera satisfactoriamente de su operación de cadera. Reanudó su agenda con el habitual despacho semanal con el presidente del Gobierno. Era su primera actividad tras la crisis desatada por su viaje privado de caza a Botsuana y su posterior disculpa pública. El accidente que fracturó su cadera, durante su estancia en el país africano, no ha sido un episodio más en el historial clínico del rey. Las circunstancias en las que se produjo, con el país sumido en una grave crisis económica, han desatado la polémica sobre la transparencia de las actuaciones de la Jefatura del Estado. Informe Semanal analiza la dimensión del suceso, qué implicaciones ha tenido para la credibilidad de la corona, cuáles son los limites de la vida privada del rey o la falta de un Estatuto que regule sus actividades. Este "tropiezo real" podría ser el inicio de un cambio de rumbo en el modo de actuar de la monarquía española.

El expresidente de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, ha defendido en RNE la figura del rey y ha señalado que estaba en África cazando elefantes "con la gente a la que de vez en cuando le pedimos que se dirija para pedir inversiones para España", en alusión a un representante de Arabia Saudí que supuestamente estuvo en Bostuana y con el que Don Juan Carlos habría conseguido la inversión del AVE a La Meca. Ibarra, tertuliano del programa de RNE 'Asuntos Propios', ha justificado que si se quiere que el monarca tenga influencia en las personas poderosas, "no le podemos decir que se vaya a cazar perdiz con reclamo con los pensionistas de Extremadura". Además, el expresidente socialista ha señalado que, en todo caso, ha sido el Gobierno el que "no ha cumplido con su responsabilidad" de decir al monarca que ese viaje no era oportuno en estos momentos y ha advertido de que "cada vez que gobierna la derecha, la Monarquía se erosiona" (19/04/12).

Las disculpas ayer del Rey a la salida del hospital donde fue operado de la cadera siguen hoy centrando parte del debate político, mientras, desde el palacio de La Zarzuela se apunta a seguir dando más transparencia a las actividades de la familia real.