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  • Debido a su encarecimiento que alcanza 10 euros el litro, su consumo en España ha caído un 51% desde enero
  • En Italia, Francia y Portugal, el litro de aceite de oliva virgen extra de marca blanca cuesta entre 6 y 8 euros
  • Los corresponsales de RTVE cuentan a qué precio encuentran ellos el aceite en sus respectivos países

La economía sigue creciendo pero a un ritmo más lento, avanza una décima más de lo previsto, un 0,5% en el segundo trimestre. El consumo impulsó el PIB y también el gasto de las administraciones públicas. El parón de la eurozona se ha notado en las exportaciones y también la subida de tipos de interés del BCE contribuye a enfriar la economía.

La vicepresidenta primera en funciones, Nadia Calviño, acaba de decir que espera que esta nueva subida de tipos de interés de un cuarto de punto, hasta el 4,5%, sea la última. La inflación está detrás de esa decisión porque no consiguen que baje lo suficiente. Y hay varias razones: entre ellas, el aumento de los márgenes empresariales y que, a pesar de la subida de precios, el gasto sigue alto. Foto: Kirill KUDRYAVTSEV / AFP

Carlos Felipe Jaramillo, vicepresidente del Banco Mundial para América Latina y el Caribe, ha visitado Las Mañanas de RNE para analizar la situación económica actual, justo el día en que conoceremos si el BCE anuncia una nueva subida de tipos: “Preocupa la situación de la Unión Europea y preocupa la situación de China, que ha sido el motor de la economía global en los últimos 10 o 20 años”, ha señalado Jaramillo, quien considera, además, que nos enfrentamos a un problema a largo plazo: “Hemos vuelto al crecimiento que había antes de la pandemia, que no es un crecimiento muy dinámico en la mayor parte de los países de la región y necesitamos más inversión”.

El aceite de oliva subió en agosto otro 8,7% y ya es el producto de la cesta de la compra que más ha aumentado de precio en los últimos doce meses: comparado con el año pasado, cuesta un 52,5% más. Primitivo Fernández, director de la Asociación Nacional de Industriales Envasadores y Refinadores de Aceites Comestibles (ANIERAC), lo achaca a una considerable subida de los gastos energéticos en 2022, sumado a una reducción de la producción a causa de la metereología: "En una cosecha normal en España se producen en torno a 1.400.000 toneladas. Esta campaña pasada solo se han producido 670.000 toneladas". Aunque el aceite se encuentre en stock, los precios siguen subiendo mes a mes, algo que Fernández Achaca a las expectativas de futuro: "La oferta se ha reducido de una manera notable y la demanda no se ha reducido tanto". De hecho, asegura que la mayoría de los hogares se han mantenido fieles al aceite de oliva pese a su encarecimiento.