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El presidente de EE.UU., Donald Trump, ha negado que sea racista al ser preguntado en Florida después de la polémica originada por sus declaraciones en las que, supuestamente, llamó "países de mierda" a Estados como El Salvador, Haití o varios africanos. "Soy la persona menos racista que has entrevistado. Qué te puedo decir", ha asegurado el presidente estadounidense a la prensa. Trump ha asegurado también que está "listo, dispuesto y capacitado" para llegar a un acuerdo sobre el programa que protege de la deportación a casi 700.000 personas que llegaron al país de forma ilegal cuando eran niños, aunque, según ha señalado, los demócratas no querrían alcanzarlo. (15/01/2018)

El artista estadounidense Robin Bell ha proyectado un espectáculo de luz sobre la fachada del Trump International Hotel en Washington en el que se podía leer "agujero de mierda", en alusión a la expresión que, supuestamente, utilizó Donald Trump durante una reunión en la Casa Blanca para referirse a países como El Salvador o Haití, de donde proceden parte de los inmigrantes a los que el presidente de EE.UU. quiere retirar los permisos de residencia. En otras frases de la proyección, Bell aseguraba que "el presidente Trump es un racista y un simpatizante nazi" o "Pague sobornos a Trump aquí". (13/01/2018)

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha culpado a los demócratas de haberse "inventado" la expresión "agujeros de mierda" al referirse a Haití y rechazó haber dicho "nada despectivo" más allá de que es "un país muy pobre". "Nunca dije nada despectivo de los haitianos más allá de que Haití es, obviamente, un país muy pobre y con problemas. Nunca dije 'Sáquenlos de aquí'. Inventado por los demócratas", afirmó Trump en su cuenta de Twitter, después de la ola de indignación generada tras informarse de que se había referido a Haití, El Salvador y otros países africanos con este término insultante.

Un juez de Estados Unidos ha ordenado a la administración de Donald Trump que reactive parcialmente el plan migratorio puesto en marcha por Barack Obama para proteger de la expulsión a los inmigrantes sin papeles que llegaron al país siendo niños.

El juez William Alsup, del juzgado del distrito norte de California, ha ordenado que se mantenga la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, en sus siglas en inglés) y se sigan tramitando las renovaciones de permisos de trabajo de quienes ya se habían beneficiado del programa, hasta que se hayan resuelto todos los litigios legales pendientes en diferentes tribunales del país.

El magistrado califica de "arbitraria y caprichosa" la decisión tomada por Trump el pasado septiembre para acabar con DACA y dar al Congreso hasta el 5 de marzo de este año para solucionar la situación de sus beneficiarios.

Obama promugló el DACA en 2012 con el objetivo de proteger de la deportación a los niños que a los que sus padres llevaron de forma ilegal a EE.UU. Este plan ha concedido permisos de trabajo temporal a unos 690.000 jóvenes que estaban en esa situación y que son conocidos como dreamers ("soñadores").