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La fiscalía de Madrid ha abierto una investigación por la muerte de 20 ancianos en una residencia, a raíz de una denuncia del Defensor del paciente, que señala las deficiencias de seguridad, limpieza y personal.

Los familiares se quejan de que el centro estaba desbordado y se ha actuado con opacidad. Aseguran que les dieron la opción de llevarse a los familiares a casa. La Comunidad de Madrid dice que no les habían comunicado la situación, y que llevan tiempo reclamando más material.

Además de los fallecidos hay 75 contagiados entre internos, familiares y trabajadores.

El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha anunciado que a partir del miércoles se llevarán a cabo "campañas de inspección de las obras en la ciudad", ante las quejas de vecinos por las obras en inmuebles de la capital, incluidos domicilios, para comprobar que se cumplen los protocolos sanitarios por el coronavirus y sancionar a las que no los respeten. El alcalde ha subrayado que el Ayuntamiento no puede suspender las obras si cumplen la normativa, pero ha advertido de que puede sancionar o suspender a aquellas que no siguen los criterios sanitarios.

El regidor municipal se ha mostrado duro en una entrevista en La Noche en 24 horas con los incumplimientos a las restricciones de movimiento impuestas. En esta jornada se han puesto 234 multas en la capital, y Martínez-Almeida ha destacado el ejemplo de un bar que ha sido clausurado con clientes dentro.

"Es una gravísima irresponsabilidad", ha condenado. "Vamos a ser tajantes. "No puede haber nadie en la calle sin causa justificada. Todos los que están luchando de forma heroica en hospitales y centros sanitarios nos piden que nos quedemos en casa”, ha manifestado, criticando otras conductas picarescas como salir con bolsas de la compra a la calle para disimular.

También, con el fin de controlar a las personas que no tienen que estar en la calle, ha pedido a las empresas que elaborenmodelos o declaraciones responsables que acrediten que sus empleados tienen la obligación de ir a trabajar. “Nos permitiría enfocar mejor los recursos”, ha señalado.

“Ojalá no se tenga que cerrar Madrid, pero no se puede descartar esa decisión”. Lo ha afirmado el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, en Las mañanas de RNE con Íñigo Alfonso, quien ha insistido en que las autoridades deben estar preparadas “para adoptar cualquier decisión en cualquier momento”. El alcalde de Madrid considera “razonable” prorrogar el estado de emergencia, tal y como ha anunciado el ministro de Transportes, José Luis Ábalos, en RNE, si llegado el momento hay que tomar esa decisión. Martínez-Almeida ha destacado la coordinación y cooperación con el Gobierno, “está siendo francamente buena en Madrid”, y ha incidido en que el mejor homenaje que podemos hacer en este momento a los profesionales sanitarios “es quedarnos en casa".

La Unidad Milita de Emergencia (UME) ha comenzado a recorrer las calles de las ciudades que tienen mayor riesgo de contagio. En Madrid, los militares han hecho reconocimientos previos este domingo en la Estación de Atocha para controlar la afluencia de personas que circulan por las calles de la ciudad. En Valencia, Sevilla y Zaragoza también se ha recurrido a la UME en un esfuerzo de Defensa por controlar la epidemia. También se ha activado en otras ciudades como León, Las Palmas, Santa Cruz de Tenerife, donde puede dispararse el riesgo por la epidemia.

A pesar de las recomendaciones de las autoridades sanitarias de permanecer en casa y reducir las salidas salvo si son estrictamente necesarias, muchos madrileños han seguido acercándose a los parques de la capital aprovechando el buen tiempo. Ante eso, el Ayuntamiento de Madrid ha ordenado el cierre de todos los parques y jardines de Madrid para evitar las aglomeraciones de gente. La policía local ha recordado que deben permanecer en sus viviendas. En La Pedriza los agentes forestales han denunciado que el aparacamiento estaba lleno de coches.

El coronavirus ha parado el trasiego y la actividad madrileña. La Plaza Mayor, uno de los sitios más concurridos de la ciudad, está completamente vacía. Algunos hosteleros reconocen que aprovecharon al máximo las últimas horas en las que todavía no había entrado en vigor la prohibición de abrir los establecimientos por el estado de alarma. Cerca de 31.000 bares y restaurantes que se encuentran en la Comunidad de Madrid tendrán que permanecer cerrados, de momento, hasta el próximo 26 de marzo, aunque algunos podrán hacer pedidos de comida a domicilio.