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China registra ya 722 muertos y 34 mil quinientos contagiados por coronavirus. 6000 están graves, y las autoridades mantienen seguimiento a 345 mil pacientes. La sociedad china ha mantenido su colaboración desde el principio de esta crísis, aunque esa paciencia empieza a agotarse. Científicos de la Universidad de Wuhan han publicado una carta abierta. Un acto de valentía. Aseguran que si se hubiera escuchado al doctor Li, que murió tras ser acusado por el gobierno chino de propagar rumores, la crísis se habría evitado. 08/02/20

  • Un estudio científico chino apunta al pangolín como posible transmisor del coronavirus de los murciélagos a los humanos
  • Más de un millón de pangolines han sido asesinados y comercializados entre 2000 y el 2013, según World Animal Protection

El yueqin es un instrumento de cuerda pulsada tradicional chino. Es parecido a un laúd con un cuerpo redondo y hueco de madera que recibe también el nombre de guitarra de luna.

Se ha desatado en China una ola de indignación tras la muerte por coronavirus del médico que alertó sobre la epidemia. La presión ha hecho que el gobierno chino anuncie una investigación para saber por qué no se le hizo caso. Por otro lado, el pangolín ha sido señalado como el posible animal transmisor del coronavirus entre murciélagos y humanos. En China, su carne se considera un manjar.

La población china rinde homenaje a Li Wenliang, el médico que alertó del coronavirus y ha muerto por dicha enfermedad. En las redes sociales del país se extienden también mensajes de ira hacia las autoridades, que reprendieron al joven doctor y le acusaron de falso testimonio por señalar la existencia de casos de una enfermedad similar al síndrome agudo respiratorio y grave (SARS) que, finalmente, resultó ser la conocida como neumonía de Wuhan.

La muerte del doctor Li Wenliang, una de las primeras personas que alertó del brote del coronavirus y que fue apercibido por ello por las autoridades de Wuhan, ha causado una ola de elogios a su persona y de críticas a la actuación oficial en redes sociales. El Gobierno chino ha respondido doblemente: ha censurado algunas conversaciones en redes pero, a la vez, ha anunciado el inicio de una investigación oficial sobre lo sucedido.

Li murió este jueves en el hospital de Wuhan, en el que trabajaba como oftalmólogo, tras haberse contagiado de la enfermedad que ya se ha cobrado 636 muertes. A finales de diciembre, Li alerto en sus redes sociales de lo que suponía era un rebrote del SARS, otro coronavirus que en 2003 causó más de 900 muertes. El 3 de enero, Li y otras ocho personas que habían alertado igualmente de los contagios fueron conminados por la Policía a firmar una declaración en la que se declaraban culpables de "diseminar información falsa en internet" y prometían no volver a hacerlo.

Tras hacerse pública su muerte de manera oficial, tras horas de confusión y rumores, las redes sociales chinas, como Weibo (el Twitter chino), se han llenado de mensajes de elogio a Li y duelo por su muerte. Y también de críticas a la actuación de las autoridades.

El Gobierno chino ha respondido en primer lugar censurando algunas de las conversaciones. No obstante, el gobierno ha decidido también hacer frente a las críticas con la apertura de una investigación oficial. La Comisión Central para la Inspección Disciplinaria, el más alto organismo contra la corrupción, ha enviado investigadores a Wuhan para investigar "problemas denunciados por la gente en conexión con el doctor Li Wenliang".

La doctora María Neira, directora del Departamento de Salud Pública y Medio Ambiente de la OMS, ha explicado en Las Mañanas de RNE con Íñigo Tobes, que se están poniendo en marcha todas las medidas para frenar la expansión del virus, pero en ningún caso se podría decir que la situación "está controlada". Neira ha indicado que el 98% de los casos se siguen reproduciendo en la pronvincia china en la que se detectó el virus y ha indicado que la respuesta del país asiático "no tiene precedentes en la historia de la salud pública". La doctora ha querido recordar algunas de las recomedaciones, medidas básicas de higiene, para evitar la transmisión, como lavarse las manos con frecuencia o mantener la denominada "distancia social", y ha querido mandar un mensaje de tranqilidad porque "estamos tratando con una epidemia de virus y una infodemia de noticias poco razonables".

La directora del Departamento de Salud Pública y Medio Ambiente de la OMS ha confirmado que se está trabajando para conseguir una vacuna contra el coronavirus, pero aún no puede fijarse cuándo estará lista.

La muerte del doctor Li Wenliang, una de las primeras personas que alertó del brote del coronavirus y que fue apercibido por ello por las autoridades de Wuhan, ha causado una ola de elogios a su persona y de críticas a la actuación oficial en redes sociales. El Gobierno chino ha respondido doblemente: ha censurado algunas conversaciones en redes pero, a la vez, ha anunciado el inicio de una investigación oficial sobre lo sucedido.

Li murió este jueves en el hospital de Wuhan, en el que trabajaba como oftalmólogo, tras haberse contagiado de la enfermedad que ya se ha cobrado 636 muertes. A finales de diciembre, Li alerto en sus redes sociales de lo que suponía era un rebrote del SARS, otro coronavirus que en 2003 causó más de 900 muertes. El 3 de enero, Li y otras ocho personas que habían alertado igualmente de los contagios fueron conminados por la Policía a firmar una declaración en la que se declaraban culpables de "diseminar información falsa en internet" y prometían no volver a hacerlo.

Tras hacerse pública su muerte de manera oficial, tras horas de confusión y rumores, las redes sociales chinas, como Weibo (el Twitter chino), se llenaron de mensajes de elogio a Li y duelo por su muerte. Y también de críticas a la actuación de las autoridades. Algunos de los mensajes han llegado a ser visionados millones de veces.

Las autoridades chinas intentan tranquilizar a la población por el coronavirus. A pesar de que ya hay 564 personas fallecidas y miles de infectados. Desde el Gobierno insisten en que la tasa de mortalidad es del 2 %. Según los datos que da la Comisión Nacional de Salud hay más número de curados que de muertos.

El brote de coronavirus está provocando situaciones de discriminación por parte de la sociedad hacia la comunidad china. En España, algunos de los que recientemente han viajado a su país han optado por hacer cuarentenas de forma voluntaria para evitar la propagación del virus en caso de contagio. Es el caso de Yin, que ha llegado hace pocos días y espera pasar los próximos 14 en su casa de Usera para cerciorarse de que no se ha contagiado y evitar un posible contagio hacia los demás.

El presidente chino Xi Jin Ping asegura que el Gobierno trabaja duro para desinfectar trenes y autobuses con el objetivo de que el virus no se siga propagando. En Wuhan, foco de la enfermedad ya se ha comenzado a trasladar a los afectados al hospital construido en diez días y se espera que en los próximos días se traslade a muchos más de 24.000 enfermos.

Las muestras de discriminación hacia las personas procedentes de China por el coronavirus se suceden cada vez de manera más frecuente. La abogada Kangyun Xiao ha lanzado una campaña para acabar con este tipo de comportamientos en la sociedad ofreciendo asesoría legal gratuita para los que sufran este tipo de discriminación. Aunque el miedo al contagio ha llegado también a afectar al sector económico. Numerosos restaurantes y establecimientos chinos han visto un descenso en sus reservas, en algunos casos, hasta en un 50 %.

Médicos chinos han anunciado este miércoles que el coronavirus puede transmitirse durante el embarazo al feto. Lo han dicho tras nacer en un hospital de Wuhan un bebé contagiado por su madre. Pekín está habilitando centros deportivos, culturales e incluso hoteles, donde tratarán a pacientes con síntomas leves, al margen del segundo hospital que se espera terminar hoy mismo en Wuhan, epicentro del coronavirus y capital de Hubei, que ha registrado el récord de 65 muertos el mismo día.