Los reyes han rendido homenaje a las víctimas de los atentados de Barcelona y Cambrils (Tarragona) con una ofrenda floral en La Rambla de la capital catalana y prevén asistir a la misa por la paz y la concordia convocada en la Basílica de la Sagrada Familia este domingo.
Los Mossos d'Esquadra han registrado el domicilio del imán de Ripoll (Girona), en el marco de su investigación sobre los atentados de Barcelona y Cambrils (Tarragona) para hallar pistas sobre los ataques y determinar si tiene alguna vinculación con la célula terrorista. Según han informado a Efe fuentes de la lucha antiterrorista, los Mossos registraron anoche la vivienda en Ripoll del imán, Abdelbaki Es Satty, que todavía no ha podido ser localizado, por lo que se investiga también si es el segundo fallecido hallado entre los escombros de la casa de Alcanar (Tarragona) que estalló el miércoles por la noche, cuando la célula preparaba explosivos para un atentado con furgonetas-bomba.
Los reyes han rendido homenaje a las víctimas de los atentados de Barcelona y Cambrils (Tarragona) con una ofrenda floral en La Rambla de la capital catalana y prevén asistir a la misa por la paz y la concordia convocada en la Basílica de la Sagrada Familia este domingo.
El doble atentado en Cataluña ha dejado hasta el momento 14 muertos -13 en Barcelona y uno en Cambrils-, y más de 120 heridos -54 siguen hospitalizados, 12 en estado crítico- de hasta 34 nacionalidades diferentes. Entre las víctimas mortales ya han sido identificadas 13 personas: cinco son de nacionalidad española, dos son ciudadanos italianos, dos portuguesas, uno estadounidense, una mujer belga, un ciudadano canadiense y otra ciudadana italoargentina, según han confirmado sus respectivos países de origen.
Una de las incógnitas de la investigación del doble atentado en Cataluña es el papel que habría jugado en los ataques el coche que se saltó un control policial en la Diagonal, y en cuyo interior hallaron el cadáver de un joven de 34 años originario de Vilafranca del Penedès.
Allí han sido recibidos por la ministra de sanidad y el consejero de salud de la Generalitat.
Una de las hipótesis que barajan los agentes es que hubiera fallecido en la vivienda de Alcanar. La Policía catalana ha registrado su vivienda e investiga su relación con la célula de terroristas que atentó en Barcelona y Cambrils este jueves.
Julia Mónaco, una joven de Melbourne, Australia, fue testigo del atentado en Las Ramblas. Pero no es el primero para ella, porque con éste ha vivido de cerca tres recientes atentados, en tres países diferentes: Francia, Reino Unido y España.
Como en otros atentados terroristas, las muestras de solidaridad se repitieron en Barcelona. Las redes sociales sirvieron de altavoz para que aquellos que no tenían donde pasar la noche encontraran un techo. Esta familia francesa fue acogida por este joven. También psicólogos y traductores usaron la red para ofrecer su ayuda.
El doble atentado en Cataluña ha dejado por el momento 14 víctimas mortales -13 en Barcelona y una en Cambrils (Tarragona) y más de 120 heridos de al menos 34 nacionalidades, según un balance provisional facilitado por Protección Civil. Entre los fallecidos en Barcelona habría al menos tres españoles: Francisco López Rodríguez, un vecino de Rubí (Barcelona) y natural de Lanteira (Granada), de 57 años; su sobrino nieto, un menor de tres años; y Pepita, de 75 años y vecina de la localidad barcelonesa de Sant Hipòlit de Voltregà. En cuanto a la víctima mortal del atentado de Cambrils, es una mujer de Zaragoza. Aunque todavía no hay lista oficial de la identidad de todos los fallecidos, además de los cuatro españoles hay dos italianos, una belga, una portuguesa y un estadounidense. Según varios medios germanos -entre ellos la ZDF- hay también tres muertos alemanes. Además, hay al menos dos desaparecidos: una joven portuguesa de 20 años y un niño australiano de 7 años.
Se trata de una imagen grabada por una cámara de seguridad de un establecimiento de Las Ramblas, que capta el momento en el que la furgoneta utilizada por los terroristas para cometer el atentado recorre a gran velocidad la céntrica calle barcelonesa. En las imágenes se aprecia cómo los viandantes se apartan como pueden. Entre ellos vemos a una persona, que arrastra un carrito con un niño, que logra apartarse a tiempo y salva así su vida y la del pequeño.
