El secretario de Estado de Seguridad y número 'dos' de Marlaska presenta su dimisión "por motivos personales"
- El que fue también jefe de Gabinete, integra el equipo de Marlaska desde su llegada al Ministerio, en julio de 2018
- Rafael Pérez admitió contactos con Koldo García durante la época de la pandemia, aunque negó su vinculación a la trama
El secretario de Estado de Seguridad, Rafael Pérez Sánchez, ha comunicado al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, su voluntad de dejar su cargo "por motivos personales", según ha podido saber RTVE.es.
Pérez forma parte del equipo de Grande-Marlaska desde su llegada al Ministerio, en julio de 2018. Primero asumió las funciones de jefe de Gabinete y, posteriormente, el 17 de enero de 2020, el ministro le nombró secretario de Estado de Seguridad, responsabilidad que ha ocupado hasta la actualidad.
Fuentes de Interior aseguran a RTVE.es que Pérez trasladó a Marlaska su decisión antes de que saltara la noticia sobre la exdirectora de Filatelia y Relaciones Institucionales de Correos Leire Díez Castro a raíz de las grabaciones que reflejan una supuesta operación vinculada al PSOE para conseguir información comprometedora sobre la UCO.
Su "idea", aseguran, era hacerlo público el próximo martes, cuando el Consejo de Ministros aprobase su cese. Sin embargo, la información se ha "filtrado", motivo por el cual Interior ha resuelto compartirla ante los medios.
Vínculos con Koldo García
La defensa del exministro de Transportes José Luis Ábalos solicitó en abril de 2024 la comparecencia del número 'dos' de Interior ante el juez como testigo para que declarase sobre la compra de mascarillas del Ministerio a la empresa Soluciones de Gestión, investigada como entidad epicentro de la trama Koldo.
El pasado 25 de octubre de 2024, Pérez declaró en la comisión de investigación sobre dicha trama en el Senado, a petición del PP, que cuenta con mayoría absoluta en la Mesa de la Comisión. En dicha comparecencia, el secretario de Estado de Seguridad admitió contactos con Koldo García, con quien mantuvo una "relación profesional" durante su etapa anterior como jefe de Gabinete cuando el presunto cabecilla de la trama era asesor del Ministerio de Transportes.
Sin embargo, aseguró que "nunca trató con él directamente" la cuestión de la compra de mascarillas. "Nunca he estado sentado con Koldo hablando de contratos ni señalando a una empresa específica", aseveró en dicha comisión al ser interrogado por el diputado de Vox, Ángel Pelayo Gordillo.
Su vinculación con Koldo sale a la palestra a raíz de unas conversaciones de Whatsapp que habría mantenido con él en enero de 2020 y a las que tuvo acceso en octubre de 2024 el programa de TVE La Hora de la 1. A través de ellas, el presunto cabecilla en la trama de las comisiones ilegales en la venta de mascarillas durante la pandemia, ofrecía al número 'dos' de Interior todos los detalles del viaje a España de la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, en 2020.
Entre ambos hablaron y se pasaron los detalles del viaje de la venezolana a Madrid, que finalmente no pasó del aeropuerto de Barajas debido a que Exteriores no autorizó la operación cuando se comprobó que existía una orden Europea que le impedía entrar en territorio de la UE. Koldo se encargó de todos los detalles, una vez hubiese llegado a España, y Rafael Pérez de su llegada a Barajas, según los referidos mensajes.
Interior destaca su trayectoria
En un escueto comunicado, el Ministerio del Interior ha resaltado algunas de las actuaciones desarrolladas con Rafael Pérez a la cabeza de la Secretaría de Estado. En concreto, durante sus cinco años y cuatro meses al frente de este departamento, se han coordinado, entre otras, actuaciones como el crecimiento de las plantillas de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado o la ejecución del Plan de Infraestructuras de la seguridad del Estado, "el mayor esfuerzo inversor en infraestructuras de la historia del Ministerio del Interior".
Asimismo, se destaca la aplicación del Plan Especial de Seguridad para el Campo de Gibraltar, con un incremento del 12% de las plantillas y una inversión de más de 156 millones de euros; la implantación del Sistema VioGén 2, la nueva plataforma digital de lucha contra la violencia de género; el desarrollo del Plan Estratégico contra la Cibercriminalidad; la elaboración del Plan Estratégico de Personas Desaparecidas y de tres planes de acción de lucha contra los delitos de odio; y la creación de la Oficina Nacional contra las Violencias Sexuales.
