El Gobierno aprueba la ley que castiga el contenido sexual de menores creado con IA y el 'grooming'
- El Consejo de Ministros da luz verde al proyecto de ley para la protección de menores en entornos digitales
- Los dispositivos electrónicos deberán incluir un control parental efectivo y etiquetado informativo sobre sus riesgos
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El Gobierno ha aprobado este martes la ley de protección de menores en entornos digitales que incorpora medidas como la modificación del Código Penal para castigar la difusión de imágenes o audios falsos de contenido sexual o vejatorio generadas con inteligencia artificial, conocidas como deepfakes o ultrafalsificaciones. Esta ley pionera creará también una orden de alejamiento virtual para los que cometan delitos contra los menores e incluirá formación para que alumnos y profesores hagan un uso responsable de internet. Además, estimará la imposición obligatoria y gratuita de controles parentales en todos los dispositivos digitales y etiquetado informativo.
El ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes ha insistido en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros en que para el diseño de la normativa se han tenido en cuenta numerosos informes y ha destacado la colaboración entre ministerios, así como la participación del sector privado y de la Unión Europea.
La ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, ha asegurado en la rueda de prensa que la ley "pone en el centro a la infancia y la adolescencia como sujeto de derecho". Rego ha señalado que la normativa supone un "avance notable en la democratización del ámbito digital", una esfera de la vida que "requiere un marco de seguridad y certezas para la infancia". En el diseño de la ley, ha colaborado también el Consejo Estatal de Participación Infantil, con aportaciones "absolutamente relevantes y sensatas".
Modificaciones legislativas
Con el objetivo de blindar la protección a los menores, la norma contempla varias reformas legales, como regular los delitos de "grooming", en los que un adulto engaña a menores en internet, mediante el uso de una identidad falsa para ganar su confianza y cometer violencia sexual. El ministro Bolaños ha indicado también la modificación de la ley orgánica del poder judicial y la ley de jurisdicción contencioso-administrativo para permitir "la intervención judicial a la hora de ejecutar una interrupción temporal" de un servicio digital que ofrezca un contenido inapropiado para menores. La ley de protección de menores en entornos digitales también incorporará como delito en el Código Penal poner a disposición de los niños y adolescentes material pornográfico.
Mediante la reforma de la ley general de comunicación audiovisual, los operadores de medios de comunicación y los grandes influencers deberán informar del contenido que emiten, utilizar sistemas de verificación de edad efectivos y separar de los además aquellos elementos que puedan ser inadecuados para los menores.
Protección frente a la violencia sexual online
La ley viene motivada por el anteproyecto del 4 de junio de 2024, tras el caso de Almendralejo, en el que las autoridades identificaron a unos adolescentes como presuntos autores de los falsos desnudos de compañeras realizados con IA. La norma reconoce el derecho de los menores a recibir protección eficaz frente a contenidos digitales que perjudiquen su desarrollo, así como a la información veraz y al acceso equitativo y efectivo a dispositivos, conexión y formación para el uso de herramientas digitales. Se les deberá educar, además, de forma suficiente y apropiada para su edad en el uso de las tecnologías.
La modificación del Código Penal que reconoce a los menores como víctimas de los delitos que se puedan cometer contra ellos en el ámbito digital, les garantiza, según ha explicado el ministro Bolaños, "acceso pleno a los servicios a los que tengan derecho" por sufrir violencia de género o sexual en internet.
Colaboración de los ámbitos educativo y sanitario
En el ámbito educativo, la norma plantea un plan de alfabetización digital, con mecanismos concretos que ofrezcan a los menores herramientas y autonomía para combatir la desinformación y otros riesgos de los dispositivos electrónicos. Se realizará en asignaturas de primaria y secundaria. Serán los propios centros los que regularán el uso de pantallas, de acuerdo con lo que establezcan las administraciones educativas. Como estrategia de prevención, el Gobierno incorporará a los pediatras, que jugarán un papel en la detección precoz de adicciones y situaciones de riesgo de los menores en internet.
Entre las medidas para mejorar el conocimiento sobre el ámbito digital de los menores y de sus familias se plantean campañas de sensibilización sobre los riesgos y los derechos de los menores. La normativa establece que los móviles y otros dispositivos estarán obligados a incorporar de fábrica un control parental gratuito, fácil de usar, que se active en la configuración inicial del terminal. Félix Bolaños, ha incidido en que de no cumplir con esta obligación habrá "sanciones" y ha recalcado que "se acabaron los sistemas de control parental que no controlan nada, deben ser efectivos".
Con el objetivo de que las empresas fabricantes asuman sus responsabilidades, la norma incluye el etiquetado de los contenidos digitales, con lenguaje accesible, que advierta sobre los riesgos potenciales de la utilización inadecuada y sus efectos para el desarrollo físico, mental y moral de los menores. Se modificará también la ley de protección de datos para elevar de 14 a 16 años la edad de acceso a redes sociales.
Estrategia nacional para la protección de la infancia y la adolescencia en los entornos digitales
Para fortalecer el impacto de la ley, la iniciativa contempla el desarrollo de una Estrategia Nacional para la Protección de la Infancia y la Adolescencia en los Entornos Digitales, liderada por la cartera de Sira Rego, con el apoyo de expertos. Según ha explicado la ministra, "servirá para dar continuidad" a este proyecto legislativo.
Rego ha señalado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que la protección de los menores en entornos digitales llega "más allá" del marco legislativo, por lo que se hace necesario un avance social que vaya de la mano de un "acompañamiento de los entornos socioafectivos". La estrategia contribuirá a este enfoque, asegura, a través de cuatro ejes principales: el diseño del plan de alfabetización mediática que eduque sobre derechos, libertades y competencias digitales, una escuela de madres y padres con la colaboración de los ayuntamientos y la Federación Española de Municipios y Provincias, la creación de laboratorios de cultura digital para niños y adolescentes y un plan de investigación sobre los efectos de la tecnología en los menores.
