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Esta inundación dificulta la conquista de Kiev, pero no está probado que sea intencionada

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Zona al norte de Kiev donde el frente de guerra y una gran inundación coinciden Sello Verifica RTVE
Zona al norte de Kiev donde el frente de guerra y una gran inundación coinciden

El avance de las tropas rusas ha quedado interrumpido al norte de la capital, donde hay una franja de terreno en forma de cuña en el margen derecho del río Dnieper, junto al pueblo de Demidov. Esta franja coincide con una zona inundada de manera repentina a principios de marzo. Las inundaciones intencionadas y el barro son un elemento estratégico utilizado en otros conflictos en el pasado, pero, por el momento, no hay pruebas concluyentes de que en este caso haya habido intencionalidad.

El periódico The Washington Post informó el 9 de marzo sobre la posible utilización de la “guerra hidráulica” en el conflicto de Ucrania. Este diario se hacía eco del oscurecimiento repentino que un usuario de Twitter había notado en las imágenes de satélite relativas a una extensa zona de terreno al norte de Kiev a partir del 28 de febrero.

En VerificaRTVE analizamos esta misma franja de terreno a través de un canal especial (NDWI) del satélite Sentinel-2 que está diseñado para identificar zonas con agua y comprobamos que la inundación es cierta. En la fotografía correspondiente al día 11 de marzo aparece una superficie llena de agua que antes no estaba. La imagen anterior de la serie en la que la zona es visible es la del 26 de febrero y en ella vemos que esa zona estaba completamente seca. Por la superficie ahora inundada transcurren varios canales en paralelo y el río Irpin, afluente del Dnieper (50.737962263547914, 30.35362476236743)

¿Es un hecho natural o fruto de la acción humana?

Retrocediendo al histórico de fotografías anteriores de Sentinel-2, hemos comprobado que esta situación no se dio en ningún momento de los últimos dos años (por ejemplo: 10/2/20, 19/10/20, 11/03/21). No es por tanto una inundación estacional. Tras el día en que el satélite detectó la nueva zona anegada hemos seguido su evolución y hemos comprobado que, lejos de disminuir, incrementa su extensión.

Gracias a la herramienta de medición de Google Earth, comprobamos que el día 11 de marzo su área era de 9,3 Km2 y el día 23 de marzo alcanzó los 18,9 Km2. La marca del fin de la inundación se desplazó 8 km más al sur.

Evolución de la inundación al norte de Kiev en marzo
Evolución de la inundación al norte de Kiev en marzo

Evolución de la inundación al norte de Kiev en marzo de 2022 vista mediante la tecnica de detección de agua del satélite Sentinel-2 Sentinel-2

La enorme extensión ahora anegada también es visible mediante las imágenes satelitales en alta resolución que facilita la empresa Maxar.

Imagen de satélite en alta resolución de la inuncación facilitada por la empresa Maxar

Imagen de satélite en alta resolución de la inuncación facilitada por la empresa Maxar Maxar

¿Ha incidido esta inundación en el avance ruso?

Rusia invadió Ucrania entrando en su territorio por distintos puntos de manera simultánea. Uno de ellos fue el sur de Bielorrusia que está apenas a 100 km de Kiev en línea recta. Los distintos mapas de la evolución de los frentes de guerra que hemos consultado dibujan una cuña al norte de Kiev junto a Demidov por debajo de la cual las tropas rusas no han podido consolidar su presencia. Esta cuña coincide con la zona inundada.

El avance ruso se detuvo en este punto el día 3 de marzo y, si bien en el resto de frentes las tropas de Moscú han avanzado con dificultades, en la zona inundada no se han movido. Así lo reflejan los mapas de la guerra al cumplirse el mes de la invasión del Institute for the study of war, RTVE.es, BBC, LiveuaMap o SOAR.

Rusos al norte de la inundación

La veracidad de la línea marcada por los mapas se puede comprobar gracias a un hecho que ha obtenido gran relevancia. En el límite norte de la inundación, junto a la localidad de Demidov, se encuentra el zoo “XII meses”. Ha sido noticia porque su dueño se ha dirigido a la comunidad internacional pidiendo un “corredor verde” que permitiera salvar a sus 300 animales (entre los que hay jirafas, hipopótamos y rinocerontes) que se mueren de hambre.

En sus mensajes de Facebook y en las entrevistas que ha concedido, Mykhailo Pinchuk, director del zoo, dice claramente que está en una “zona ocupada”. La página web ucraniana TCH ha mostrado fotografías de Demidov anegado diciendo que el desborde del río pone en peligro “un pueblo ocupado por los rusos”.

Ucranianos al sur de la inundación

El hecho de que la invasión se haya detenido en la zona inundada la comprobamos identificando noticias que provienen de los pueblos que están en el límite sur. La corresponsal de la cadena británica Sky News, Alex Crawford, emitió el 22 de marzo una noticia grabada en Lyutizh, muy cerca de la zona inundada, en la que una familia ucraniana se lamenta de estar siendo bombardeada por los rusos.

Un video publicado en Telegram el 22 de marzo con metadatos del mismo día muestra a soldados ucranianos caminando por las calles bombardeadas de Moschun, que también se encuentra justo al sur de la inundación (50.60345268274753, 30.319478099354825). Una noticia de la cadena CNN fechada el 22 de marzo confirma el vídeo de Moschun y la presencia de zonas inundadas en el norte. Estas referencias sobre el terreno permiten validar la línea del frente dibujada justo en la franja anegada.

¿Existe la “guerra hidráulica”?

Los tratados bélicos incluyen referencias a inundaciones intencionadas desde hace varios siglos. El Investigador holandés Adriaan de Kraker publicó en 2015 un estudio en que explicaba las consecuencias en el medio ambiente de la destrucción de los diques holandeses como arma de guerra contra el “dominio español” en 1584.

Según relata Rogelio Galván Plaza, de la Oficina de Planificación Hidrológica de la Confederación Hidrográfica del Ebro, durante la Guerra Civil española la contraofensiva republicana en la Batalla del Ebro quedó desbaratada cuando el ejército franquista abrió las compuertas de los embalses río arriba. La avenida destruyó la infraestructura del ejército republicano. El académico estadounidense C.E. Wood ha publicado un ensayo con un título revelador: “Barro, una historia militar”

El semanario The Economist se preguntaba antes de la guerra, el 7 de febrero, si Rusia tenía opciones de invadir Ucrania con éxito. El artículo recuerda que tanto los ejércitos Napoleón en 1812 como de Hitler en 1941 quedaron encallados en el sentido literal de la palabra cuando la primavera descongeló el terreno abriendo bajo las ruedas de los carros o los tanques un lodazal. Este semanario entrevista al especialista en guerra terrestre de la empresa de defensa Janes, quien dice: “Europa del Este es un montículo de cieno y lodo si hay que atravesarlo” y añade que esto “es horrible para los vehículos pesados”.

En el mes que llevamos de conflicto en Ucrania han circulado por las redes sociales imágenes de blindados en serias dificultades o abandonados por culpa del lodo (1, 2, 3, 4). La BBC se preguntaba el 20 de marzo “Cuáles han sido los errores militares de Rusia” y señalaba que: “Algunos blindados pesados se han salido de las carreteras para quedar encallados en el barro

¿Quién ha provocado la inundación?

La zona inundada está separada del río Dnieper por un conjunto de compuertas situadas por debajo de una carretera. El 19 de marzo el vicealcalde de Kiev, Konstantin Usov, publicó en su canal de Telegram que la inundación se debía a que los rusos habían dinamitado las compuertas de la presa. El propio Usov subraya que esta inundación beneficia a la defensa de Kiev porque “estrecha el terreno por el que el invasor puede maniobrar”.

La ONG especializada en las consecuencias ambientales de las guerras CEOBS publicó un análisis de la situación donde se abre a la posibilidad de que la inundación “se deba a un accidente”, pues para mantener la zona seca se requiere del bombeo constante de agua y el flujo eléctrico podría haberse interrumpido debido a la guerra. Nadie se ha responsabilizado públicamente de haber realizado una inundación intencionada de la zona ahora bajo el agua.