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Coronavirus

Los españoles creen que el teletrabajo es más positivo para las empresas que para los empleados, según el CIS

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El uso de las nuevas tecnologías para comunicarse se ha reforzado con la pandemia de COVID-19.
El uso de las nuevas tecnologías para comunicarse se ha reforzado con la pandemia de COVID-19.

En general, los españoles valoran positivamente el teletrabajo, que ha crecido de forma muy importante durante la crisis sanitaria provocada por la pandemia, pero creen que es más positivo para las empresas que para los propios empleados, según la encuesta Tendencias en la sociedad digital durante la pandemia de la COVID-19, realizada por el CIS y que se ha dado a conocer este viernes. [Aquí puedes descargarte en .pdf el estudio completo].

Entre los aspectos más positivos para la sociedad, creen que reduce los atascos y la contaminación al disminuir los desplazamientos, que facilita la conciliación familiar y la movilidad de los que tienen que trabajar de forma presencial, o que ofrece flexibilidad para vivir en un lugar diferente al del trabajo.

Entre los negativos, los españoles apuntan que fomenta el aislamiento de las personas, perjudica a algunos sectores (el comercio, el ocio, la hostelería o los transportes), dificulta la promoción laboral, supone nuevos gastos, se pierden contactos humanos o sociales o que no se consigue desconectar, se trabajan más horas y se pierden derechos laborales.

Encuesta sobre tendencias en la sociedad digital durante la pandemia

Los datos se desprenden de la encuesta que ha elaborado el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) sobre las Tendencias en la sociedad digital durante la pandemia de la COVID-19, que se realizó entre los días 8 y 17 de marzo en 1.068 municipios de 50 provincias.

Los encuestados consideran que el teletrabajo es más positivo para las empresas (un 62,2%) que para los empleados (un 49,9%), aunque más de la mitad (el 52,2%) consideran que es bueno para la sociedad en general, mientras que los sólo el 8,6% aprecian que es negativo para las empresas y el 19,2% para los trabajadores.

Las empresas reducen costes (dice el 65,9%), evitan desplazamientos (el 61,2%) y aumentan la productividad (el 48,7%); los empleados evitan desplazamientos (valora el 76,8%), mejoran la conciliación laboral (el 75,5%) y son dueños de su tiempo para organizar sus agendas (el 63,5%).

Nueve de cada diez tienen conexión a internet

Casi el 90% de los encuestados tiene conexión a internet, y quienes no disponen de la red es "porque no entienden de esas cosas" (el 38,3%), porque no son usuarios (el 16,2%), porque no dispone de conectividad (el 9,6%) o por motivos económicos (el 13,7%). El estudio sociológico revela que el 13,5% de los españoles ha contratado desde el inicio de la pandemia un aumento de la capacidad de conexión a internet; que el 23% ha adquirido un ordenador o algún otro equipamiento informático, y que el 11,6% ha comprado una televisión con mejores prestaciones.

El 81% de los encuestados ya era usuario habitual de internet antes de que empezada la pandemia, pero más de la mitad de ellos (el 53,4%) ha aumentado el tiempo que dedica a navegar, y una amplia mayoría (el 56,4%) opina que cuando acabe la pandemia y se recupere la normalidad, internet y las tecnologías de la información van a ser más importantes que antes en la vida de las personas.

Una mayoría ya compraba billetes de tren o avión por internet antes del inicio del estado de alarma (el 67%), entradas para espectáculos (el 64,2%) y ropa y calzado (el 51,5%), pero ahora ha aumentado el porcentaje de quienes compran también alimentos frescos por internet, alimentos cocinados o elaborados, libros, y hasta electrodomésticos.

El 80% de los encuestados paga la conexión a internet; al 35,7% el empleador ya les había equipado con ordenador portátil antes de la pandemia, pero a un 30,6% la empresa les pidió que usaran sus equipos personales mientras duraba el confinamiento, y sólo un 2,3% de los que tuvieron que contratar mejor capacidad de conexión fueron compensados económicamente.

Entre los estudiantes, el 60% de los encuestados estaban en centros en los que no se hacían actividades online,  pero el 90% asegura que durante la pandemia sus centros establecieron procedimientos de apoyo a distancia para mantener en marcha el proceso educativo, y el 59% de los padres manifiestan que se han implicado más en la educación de sus hijos.