Tiroteos en las escuelas: ¿un fenómeno endémico de Estados Unidos?
- Parkland (Florida) vela a los muertos en el tiroteo del instituto Stoneman Douglas
- El suceso trae a la memoria los asesinatos de Columbine en 1999
- La polémica sobre el control de armas se aviva y Trump no se pronuncia
- Desde 2013 ha habido 291 tiroteos en colegios estadounidenses
Una vez más en Estados Unidos, en otra vigilia, familiares y allegados lloran las víctimas de una matanza a tiros. Miles de personas se reunieron en Parkland para honrar el recuerdo de las 17 víctimas mortales de la matanza perpetrada este miércoles por Nikolas Cruz en la escuela secundaria Marjory Stoneman Douglas de esa localidad.
El suceso ha traído a la memoria otra masacre en otra escuela, la de Columbine en 1999, también a manos de alumnos. Desde entonces se han producido unos 50 asesinatos masivos en colegios de EE.UU, según el FBI. Y el jueves, en la atmósfera de dolor flotaban, una vez más, preguntas: ¿Qué pasa para que en la nación con las mejores universidades del mundo se produzcan asesinatos masivos a tiros en sus escuelas?.
Los jóvenes, perpetradores y víctimas, han proyectado su protagonismo en las redes sociales. Enviaron in situ las primeras fotos del suceso, pero inmediatamente después lanzaron el interrogante a los adultos que, teóricamente, son responsables de su seguridad.
¿Por qué se produjo esta masacre? El FBI ya fue alertado de las amenazas expresadas por Nikolas Cruz, pero el joven pudo adquirir legalmente un AR-15, fusil mortífero y, al parecer, preferido por los autores de estos tiroteos masivos. Donald Trump ha reclamado mayor control de las enfermedades mentales pero ha evitado hablar del descontrol sobre el arsenal que manejan miles de civiles en EE.UU..
Un asesino profesional ¿de escuelas?
Sus antiguos condiscípulos señalaban a Cruz como taciturno y marginal. "Es un ser humano roto", ha dicho Melissa McNeill, su abogada de oficio asignada. "Está triste, compungido, tiene remordimientos", ha añadido. Pero Cruz, según fuentes policiales mencionadas por Reuters, confesó su autoría en el momento de su detención.
El joven de ascendencia hispana llegó al lugar de los hechos en un coche de Uber, vestido con los colores de la institución para no levantar sospechas, y bien pertrechado. Botes de humo, máscara antigás, el fusil AR-15 y varios cargadores repletos que vació fuera y dentro del instituto. No se sabe si eligió las aulas aleatoriamente o bajo algún criterio. Luego se confundió con la multitud de alumnos que evacuaban el centro y le dió tiempo a pasar por un restaurante de la cadena Subway y por un McDonalds, tras lo cual fue detenido.
Es el comportamiento de un muchacho que se autodefinió en su perfil de redes sociales como "un tirador escolar profesional" y se fotografió portando armas de fuego y cuchillos, por los que sentía predilección según sus excompañeros. Huérfano de padre y madre, Nikolas Cruz fue expulsado por una incorregible indisciplina y violencia.
EE.UU.: demasiadas armas o escasa salud mental
En la vigilia de Parkland la tristeza ha convivido con la indignación. Se han escuchado mensajes de tono político, como "Ya basta" o "NRA deja de matar a nuestros hijos", en referencia a la Asociación Nacional del Rifle, el poderoso grupo de presión a favor de las armas y contrario a una mayor regulación de las mismas en Estados Unidos.
Trump ha apuntado a la necesidad de controlar las enfermedades mentales para prevenir estos actos. Sin embargo, el Congreso, bajo mayoría republicana, revocó el año pasado la legislación aprobada durante el gobierno de Obama que endurecía la obtención del permiso para aquellos que no acreditaran salud mental.
Según la fundación 'Everytown', desde 2013 se han producido 291 tiroteos en colegios estadounidenses, y en lo que llevamos de este año son 17 los incidentes de este tipo registrados.
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