Una avería en el tendido eléctrico podría estar detrás del incendio de Cebreros, en Ávila

• Por el momento, ha carbonizado más de mil hectáreas de superficie
• Continúan trabajando medios terrestres y aéreos de tres comunidades

Un miembro de una cuadrilla trabaja en las labores de extinción del incendio declarado en Cebreros., en Ávila.

La investigación de las causas del incendio forestal declarado el pasado sábado en Cebreros (Ávila), aún activo aunque controlado, apunta a la rotura de una pieza de un tendido eléctrico, provocada por el fuerte viento, como origen más probable del fuego.

El director general de Medio Natural de la Junta de Castilla y León, José Ángel Arranz, ha explicado este lunes en una rueda de prensa que la investigación no ha concluido pero que "la causa más probable" es la relacionada con la avería en la instalación eléctrica y que los fuertes vientos que soplaban en el momento de este accidente fueron los causantes de la rápida propagación.

Arranz ha detallado también que la perimetración provisional del incendio contabiliza unas 1.050 hectáreas carbonizadas, en su mayoría de pino piñonero, aunque con afección también sobre otra superficie de pasto. De esta superficie, unas 150 hectáreas corresponden a montes de uso público y el resto a fincas particulares.

Ya está controlado

Tras quedar controlado a las nueve menos cuarto de este domingo y después de haber alcanzado el nivel 2 de alerta, en una escala de 0 a 3, según ha indicado este lunes la Junta en una nota,  medio centenar de efectivos han estado trabajando en las labores de vigilancia y refresco durante la noche.

En la zona continúan trabajando medios aéreos y terrestres de las comunidades de Castilla y León, Castilla-La Mancha y Madrid, entre los que hay tres helicópteros, una veintena de motobombas, diecisiete cuadrillas y quince agentes medioambientales.

A media tarde de este domingo se replegaron los 250 efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) que habían llegado de León y Madrid e igualmente se han retirado ya los efectivos del 112 de la Comunidad de Madrid, al considerar que el incendio, que alcanzó un perímetro de quince kilómetros, no iba a pasar a este territorio.