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Desalojan cuatro urbanizaciones y cortan la A-7 por un incendio en Estepona

  • 78 especialistas y cuatro helicópteros participan en las labores de extinción
  • Los bomberos, pendientes del viento en el fuego de Madremanya

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Un incendio agrícola declarado esta tarde en Estepona (Málaga) ha obligado a desalojar de forma preventiva cuatro urbanizaciones y un apartahotel de la localidad, así como a cortar temporalmente la autovía A-7, ha informado a Efe un portavoz del servicio de emergencias 112.

Un total de 78 especialistas y cuatro helicópteros participan en las labores de extinción de este incendio, que ha ocasionado una gran humareda y ha motivado numerosas llamadas al 112, las primeras sobre las 13.20 horas.

La cercanía de las llamas ha obligado al desalojo de viviendas cercanas, así como a cortar la circulación en ambos sentidos en la A-7,  a la altura del kilómetro 152 durante más de una hora.

El tráfico ha quedado restablecido a las 19:00 horas en sentido Barcelona, y se espera que próximamente se permita el paso de vehículos en sentido Cádiz, ha dicho a Efe un portavoz del Centro de Gestión de Tráfico de Málaga.

El número de personas que han tenido que ser desalojadas a causa del incendio aún no ha sido precisado.

El dispositivo del Infoca está compuesto por seis retenes, dos brigadas de refuerzo, dos agentes de Medio Ambiente, cuatro técnicos de operaciones y cuatro vehículos autobomba, además de tres helicópteros de extinción y uno de gran capacidad, según fuentes del plan contra incendios.

Pendientes del viento en Girona

Los Bomberos de la Generalitat continúan trabajando para controlar el incendio declarado este viernes en Madremanya (Girona) y se muestran prudentes respecto a la evolución del fuego, ante el riesgo de que el viento de tramontana pueda reavivar las llamas en las próximas horas.

De momento, el director de los Servicios Territoriales de Interior en Girona, Albert Ballesta, ha asegurado que el incendio no se puede dar todavía por controlado y que se esperará a saber cómo afecta la tramontana, que está empezando a soplar en la zona, antes de dar por seguro el control.

El fuego está estabilizado desde poco después de las diez de la mañana, tras arrasar más de 210 hectáreas de bosque y cultivos.

El incendio comenzó en una masía del término municipal de La Pera con un pequeño fuego que los habitantes de una casa rural consiguieron apagar en un primer momento, pero que después se reavivó con fuerza por el fuerte viento.

La prioridad para los bomberos es impedir que el fuego alcance al macizo de Les Gavarres, donde las llamas podrían ganar terreno rápidamente por la elevada masa forestal de esa zona.

El incendio se propagó con gran rapidez por el fuerte viento, hasta el punto de que en apenas tres cuartos de hora las llamas avanzaron entre cinco y seis kilómetros.