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Argentina y Uruguay ponen punto final a siete años de controversia por la papelera

  • Acuerdan establecer un control ambiental conjunto al río que  marca su frontera
  • Un comité científico con miembros de ambos países lo vigilará

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Vista eérea de la papelera uruguaya de la discordia.
Vista aérea de la papelera uruguaya de la discordia.

Cronología

20032003

 -9 de octubre: Uruguay autoriza la instalación de la planta de ENCE en la localidad uruguaya de Fray Bentos, frente a la argentina de Gualeguaychú.

- 27 de octubre: Argentina presenta una queja por la autorización unilateral del proyecto.

20052005

-15 de abril: La empresa finlandesa Botnia inicia la construcción de su planta, con una inversión de 1.800 millones de dólares.

20062006

-3 de enero: La Asamblea Ambientalista de Gualeguaychú comienza los bloqueos del puente hacia Fray Bentos.

-4 de mayo: Argentina demanda a Uruguay ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) por violación del Estatuto del Río Uruguay.

20072007

-9 de marzo: La provincia argentina de Entre Ríos prohíbe la exportación de madera a Uruguay.

-9 de noviembre: Se pone en marcha la planta de celulosa.

20092009

-6 de septiembre: Multitudinaria marcha sobre el puente que enlaza Gualeguaychú con la uruguaya de Fray Bentos, bloqueado desde 2006.

20102010

-14 de enero: La presidenta argentina, Cristina Fernández, y el mandatario electo de Uruguay, José Mujica, acuerdan una comisión negociadora.

- 20 de abril: La CIJ reconoce que Uruguay violó el tratado pero deja en funcionamiento la planta.

-20 de mayo: Un grupo de vecinos de Gualeguaychú presenta una demanda contra los ambientalistas por el bloqueo del paso fronterizo. El 9 de junio, el Gobierno hace lo mismo.

-19 de junio: La Asamblea de Gualeguaychú levanta el corte por 60 días a la espera de un acuerdo definitivo para controlar el río.

Argentina y Uruguay han sellado un pacto que pone fin a la polémica que les ha enfrentado durante siete años. Ambos países han firmado un acuerdo para el control ambiental conjunto al río que marca su frontera común, el Uruguay

El origen de este conflicto diplomático se encuentra en la instalación de manera unilateral de unas fábricas de celulosa por parte de Uruguay en la ribera del río Uruguay, y cuya administración es compartida con Argentina.

El acuerdo lo han alcanzado los presidentes de los dos países, Cristina Fernández y José Mujica, en una reunión en Buenos Aires, y los encargados de anunciarlo han sido sus respectivos cancilleres, el argentino Héctor Timerman y el uruguayo Luis Almagro.

Según han comunicado los ministros, el pacto establece la realización de controles científicos en el río Uruguay. "Con esto se cierra un capítulo de nuestra historia y comienza otro, que es el de la cooperación, con el control medioambiental del río Uruguay y sus zonas de influencia", ha destacado Timerman.

Comité científico

Los controles serán realizados por un comité científico, integrado por dos expertos argentinos y otros dos uruguayos, que se creará en un plazo de 30 días en el seno la Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU), organismo integrado por los dos países.

El acuerdo prevé la "utilización de sensores y todas las otras innovaciones científicas y tecnológicas que las partes acuerden necesarias para la monotorización de las emisiones líquidos y gaseosas que puedan acceder al río Uruguay".

Según el texto, la monotorización "comenzará con la planta de UPM y la desembocadura del río Gualeguaychú en el río Uruguay", seguirá en Argentina con un establecimiento a elección de Uruguay y a partir de entonces continuará alternativamente en uno y otro país.

Cuando se realicen en el margen derecho (el lado de Argentina), los controles correrán por cuenta de Argentina, y cuando sean en el margen izquierdo correrán por cuenta de Uruguay, según lo acordado por los mandatarios.

En los establecimientos industriales y agropecuarios los expertos podrán ingresar hasta doce veces al año.

Los resultados del comité científico "serán elevados por la CARU al Estado parte correspondiente a los fines de que implementen las acciones que resulten pertinentes", indica el acuerdo, que añade que "la información que se obtenga de estos controles será pública, respetando los tiempos científicos".

Siete años de pugnas diplomáticas

El conflicto se inició en octubre de 2003 cuando Montevideo autorizó, sin consultar a Argentina, la instalación en la localidad ribereña de Fray Bentos de una planta de celulosa de la empresa española ENCE. Finalmente esta empresa desistió de concretar el proyecto industrial debido a la tensión diplomática alcanzada.

Pese a ello, Uruguay autorizó la radicación de una planta de la finlandesa Botnia, que actualmente ha sido adquirida por la empresa UPM, y que comenzó a producir pasta de celulosa a finales de 2007.

En esos momentos, la actividad de Botnia fue fuertemente contestada por los vecinos y ecologistas de la ciudad argentina de Gualeguaychú, quienes convocaron grandes jornadas de protestas.

En noviembre de 2006 se inició un bloqueo al puente que une a Fray Bentos, en Uruguay con Gualeguachú, y que no se ha levantado hasta el pasado 19 de junio para permitir que los Gobiernos de los dos países pudieran negociaran un acuerdo de control ambiental.

La decisión de La Haya

La controversia bilateral alcanzó sus límites más álgidos en 2006 cuando Argentina denunció a Uruguay ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya.

El pasado abril, el tribunal determinó que Uruguay violó el tratado bilateral de administración compartida del río al permitir, de forma unilateral, la instalación de la papelera pero consideró que no está demostrado que la planta contamine, aunque recomendó a ambos países a hacer controles conjuntos.

Finalmente, esta recomendación de la Corte Internacional de Justicia parece haber sido la que ha puesto punto y final a siete años de conflicto vecinal.