Allawi anuncia la apertura de negociaciones para alcanzar un Gobierno "fuerte" en Irak

• "Nuestra intención es abrirnos a todos los grupos", ha dicho
• Los  resultados provisionales dan a su formación una victoria muy estrecha

El principal dirigente de la oposición iraquí, Iyad Allawi, ha anunciado este sábado el comienzo de negociaciones políticas para buscar un Gobierno "fuerte" que permita al país superar la crisis que atraviesa desde hace varios años.

Así lo ha señalado en una rueda de prensa que ha ofrecido un día después de que la Comisión Electoral otorgara a su alianza política el mayor número de escaños en el Parlamento,  de acuerdo con los resultados finales de las elecciones del 7 de marzo,  aún provisionales.

"Nosotros deseamos que haya un Ejecutivo fuerte, que pueda poner en práctica sus decisiones y devolver a Irak a su entorno árabe e internacional", ha subrayado Allawi, máximo dirigente de la alianza política "Al Iraqiya" (La Iraquí).

El ex primer ministro ha dicho que, aunque antes de que se conocieran los resultados ha habido conversaciones previas con distintas fuerzas políticas, sólo a partir de ahora "comienzan las negociaciones" para formar gobierno.

Y para ello ha anunciado que había designado al viceprimer ministro saliente, Rafea al Isaui, para dialogar con las otras formaciones políticas y llevar a cabo una negociación que, según ha dicho Allawi, no fijará límites.

Abiertos a todos los grupos

"Nuestra decisión -ha agregado- es abrirnos a todos los grupos, empezando por el Estado de Derecho", la coalición encabezada por el primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, que quedó en segundo lugar en cuanto en los comicios del 7 de marzo.

La Comisión Electoral informó la noche del viernes que la alianza dirigida por Allawi obtuvo 91 de los 325 diputados del Parlamento unicameral, mientras que la coalición de Al Maliki sacó 89 legisladores.

Ha derrotado a la coalición liderada por el actual primer ministro Nuri al Maliki.

Clave en estas negociaciones es la Alianza Nacional Iraquí,  dominada por partidos y religiosos chiíes, que obtuvo 70 legisladores.

Y al margen queda la coalición gobernante en el Kurdistán iraquí, que consiguió 42 legisladores y que en el pasado ha prestado su apoyo a cualquier alianza que satisfaga sus exigencias de autonomía en esa zona del norte del país.

Un proceso largo

El presidente de la Comisión Electoral, Faraj al Haidari, ha anunciado que, a partir de este sábado y una vez publicados los resultados finales, los grupos políticos tienen tres días para presentar sus impugnaciones.

Puede pasar varias semanas antes de que el nuevo Parlamento quede instalado,  y la formación del nuevo gobierno no se espera para fines de junio o comienzos de julio, siempre y cuando se agoten todos los plazos legales, algo que suele ser habitual en la política iraquí.

Primero tiene que ratificar los resultados la Corte Suprema, después de resolver todas las impugnaciones. Una vez constituido el Parlamento, tiene que designar un presidente, quien a su vez dispondrá de dos semanas para designar un primer ministro.

Ese jefe de Gobierno surgirá de la alianza que haya reunido mayor números de escaños en el Parlamento, una cantidad que puede cambiar respecto a los resultados anunciados anoche teniendo en cuenta las negociaciones o componendas políticas.

El jefe de Gobierno designado tiene treinta días para presentar su gabinete al Parlamento, que debe aprobarlo por mayoría absoluta. Si no lo consigue, lo intentará otra persona, que dispondrá de quince días para cumplir esa misión.

En las últimas elecciones parlamentarias, en diciembre del 2005, Nuri al Maliki sólo logró formar su gobierno seis meses después de los comicios, un plazo que los analistas esperan que esta vez sea menor.

"Hago un llamamiento a los bloques políticos que consiguieron escaños en el nuevo Parlamento que aceleren la formación del nuevo gobierno", ha afirmado el actual presidente de la asamblea legislativa, Iyad al Samarraie.