Los niños chilenos dejan atrás la tragedia del terremoto y vuelven a las clases

• El 80% de los colegios han iniciado sus clases en la Región Metropolitana
• Han preparado un programa especial para ayudarles a superar el seísmo

En Chile, tres nuevos temblores de poca intensidad se han notado en el centro y el sur del país

Chile necesita recuperar la normalidad y la rutina. Por ello, el 80% de los colegios de la Región Metropolitana han iniciado sus clases después de que se retrasara su comienzo, previsto para el 3 de marzo, debido a los daños ocasionados por el terremoto en los centros educativos.

¿Hoy día estamos prácticamente con el 80% de los niños entrando al sistema escolar. Eso es una muy buena noticia para los papás, para las mamás, para los propios niños", ha afirmado la ministra de Educación chilena, Mónica Jiménez

Los profesores han recibido a sus alumnos con un programa especial de técnicas de acogida para ayudar a los menores a expresar las emociones provocadas por el terremoto como una forma de superar en el contexto de las aulas la traumática experiencia, tal y como sugirieron psicólogos especializados.

"Se maneja con mucho amor, mucha disposición a escuchar y dando muchas oportunidades para expresar todos los sentimientos, todas las experiencias que los niños vivieron" ha señalado Jiménez.

Planes de evacuación por si hay nuevas réplicas

La titular de la cartera de Educación ha aclarado que en los centros educativos se han diseñando planes de evacuación "rápida y ordenada" de los niños, por si se produce una nueva réplica.

Asímismo, la ministra ha asegurado que en aquellos centros que ya se encuentran en funcionamiento no hay problemas de escasez de alimentos ni de distribución por lo que la alimentación de los menores se llevará a cabo con normalidad.

"Donde funcione la cocina y haya personal ahí va a haber alimentación para los niños raciones de alimento hay para todos, estamos dando casi un millón de raciones para los damnificados", ha sostenido.

Una de las comunas más perjudicadas por la sacudida es la de Santiago cuyo alcalde, Pablo Zalaquett, ha señalado que de momento casi un tercio de las escuelas no podrán abrir sus puertas debido a los daños en sus infraestructuras.

Más allá de la capital, la ministra de Educación anunció que el próximo 15 de marzo iniciarán el curso escolar la mayoría de los colegios de las regiones de Maule y Biobío, dos de las zonas más perjudicadas por el seísmo.

Más sacudidas en el centro de Chile

En la madrugada del lunes al menos otras seis réplicas han sacudido de nuevo el centro de Chile aunque sin provocar mayores daños ni víctimas mortales, según indican los datos del Servicio de Geología de Estados Unidos.

El primer seísmo fue a las 1.40 de la madrugada (5.40 hora peninsular española) en la Región de Valparaíso con una intensidad de 5,0 en la escala de Richter cuyo epicentro se localizó a una profundidad de 35 kilómetros.

A esta primera sacudida le siguió otro temblor de magnitud 4,8 en la escala de Richter en la región de O'Higgins a las 4.06 (8.06 hora peninsular española).

En la Región de Maule un seísmo de magnitud 4,9 sacudió a sus habitantes a las 05.00 (09.00 hora peninsular española) y le siguió otro de 5,1 a unos 75 kilómetros al suroeste de la Región de Valparaíso.

Las dos últimas réplicas se sintieron a las 06.27 (10.27 hora peninsular española) y a las 07.38 (11.38 hora peninsular española) en Valparaíso con una intensidad de 4,9 y 4,8 grados, respectivamente.

El último balance es de 497 cadáveres identificados

Tras el baile de cifras de víctimas mortales de la pasada semana, las autoridades chilenas ofrecen nuevos balances cada 24 horas y sólo indican el número de fallecidos que han podido ser identificados.

El último informe proporcionado establece que hay un total de 497 cadáveres identificados.

"Vamos a nombrar, como un homenaje, a cada una de las personas que han fallecido en esta catástrofe, nos parece que ese es el homenaje que corresponde hacer a esos chilenos", ha indicado el subsecretario del ministerio del Interior, Patricio Rosende.

Esta decisión se tomó después de que, durante una visita a la región del Maule, una de las más afectadas por la tragedia, la presidenta Michelle Bachelet fue informada de que podía haber diferencias entre el número de víctimas que manejaba el Ejército y las cifras de la Onemi.