Filipinas presenta como sospechoso de la matanza a un hombre afín a la presidenta

• Ampatuan será detenido cuando "existan suficientes evidencias"
• Es el presunto asesino de 46 personas en el sur del país
• Se ha decretado el estado de emergencia para evitar venganzas

Las autoridades de Filipinas permitirán que el principal sospechoso del asesinato de 46 personas en el sur del país, Andal Ampatuan, del clan próximo al Gobierno, continúe en libertad mientras está siendo investigado, indican fuentes oficiales.

"Tenemos un proceso abierto y que debemos seguir, hay que dejar a los agentes que realicen las pesquisas", ha dicho Cerge Remonde, secretario de prensa de la Presidencia.

El portavoz precisó que solo se ordenará la detención de Andan Ampatuan cuando "existan suficientes evidencias" de su implicación en la matanza cometida el pasado lunes en la provincia de Maguidanao, al sur de la isla de Mindanao.

Andal Ampatuan, miembro del partido de la presidenta Arroyo, es el alcalde de Datu Unsay y jefe del clan rival de Mangudadatu. Su padre es un político regional muy poderoso que ha apoyado a la presidenta en las últimas elecciones.

Hasta el momento, ningún sospechoso ha sido detenido por su relación con lo asesinatos.

Estado de emergencia

Varios cientos de policías y soldados se han desplegado para detener a los asesinos y evitar una ola de venganzas en Maguindanao y la provincia vecina de Sultan Kudarat, feudos de los dos clanes cuya rivalidad desató la matanza, y en respuesta, la decisión del Gobierno de declarar medidas militares excepcionales.

La presidenta Glora Macapagal Arroyo ha declarado la emergencia indefinida en ambas provincias y en la ciudad de Cotabato para "prevenir y eliminar que se produzcan otros incidentes de violencia sin control".

Masacre contra políticos y periodistas

Unos cien hombres armados secuestraron a casi 50 civiles de una caravana electoral que iba a presentar la candidatura a gobernador provincial de Ismail Mangudadatu, quien le quiere disputar el puesto al poderoso Andal Ampatuan, un "datu" o jefe tribal musulmán temido en todo el sur de la isla de Mindanao.

Tanto en Maguindanao, controlada por el clan de los Ampatuans, aliado del gobierno de la presidenta Gloria Macapagal Arroyo, como en Sultan Kudarat, plaza fuerte del clan de los Mangudadatu, considerado cercano al rebelde Frente Moro de Liberación Islámica (FMLI), y también en la ciudad de Cotabato, el Ejército ha sido autorizado a imponer el toque de queda y registrar viviendas sin mandamiento judicial.

Mangudadatu ha explicado a la prensa que uno de los supervivientes le indicó que los secuestradores hablaban en nombre de Zaldy Ampatuan, considerado el favorito de su padre y jefe de la Región Autónoma del Mindanao Musulmán, a la que pertenece Maguindanao.

La matanza ocurrida a seis meses de las elecciones generales, inquieta al partido que gobierna Filipinas, Lakas-Kampi, para el que el apoyo del clan de los Amputuan ha sido esencial para conseguir los escaños correspondientes a esa provincia.

La violencia entre clanes es un elemento esencial de la política filipina, sobre todo en la conflictiva región sur, donde muchos caciques gobiernan como señores feudales protegidos por matones, sin que las fuerzas de seguridad o los tribunales interfieran en sus dominios.