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Fútbol

Osasuna regresa a Primera División, tras dos años, con el sello de Arrasate

  • El club navarro asciende a falta de tres jornadas para el final de la temporada

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El técnico de Osasuna Jagoba Arrasate (5i) celebra con sus jugadores en la Plaza del Castillo, en Pamplona, el ascenso del equipo a la Primera División del fútbol español
Afición rojilla, jugadores y cuerpo técnico (incluido el entrenador Arrasate, quien mira a la cámara), en la fiesta del ascenso de Osasuna en la plaza del Castillo.

Osasuna ha logrado este lunes, tras imponerse el Granada al Albacete (0-1), el ascenso a Primera División con el sello de equipo sólido y atrevido propuesto por el técnico Jagoba Arrasate.

El cuadro navarro, con 78 puntos, ha conseguido así el billete a la élite del fútbol nacional cuando restan todavía tres jornadas para la conclusión de la liga en Segunda División, tras dos años en esta categoría.

Osasuna había decendido en la temporada 2016-2017 tras una única campaña en Primera marcada por la inestabilidad deportiva tras el paso de tres entrenadores, pero que sirvió para saldar la deuda con la Hacienda foral a través de los derechos televisivos.

En el curso 2017-2018, Osasuna afrontó una nueva etapa con la llegada de Braulio Vázquez como director deportivo y contó con una de las inversiones más importantes de la categoría a la hora de incorporar futbolistas experimentados.

Diego Martínez, procedente del Sevilla Atlético, en su debut como entrenador en Segunda División, asumió las riendas de un equipo que partió como uno de los favoritos para lograr el ascenso.

No obstante, los malos resultados en El Sadar y la falta de conexión con la grada rojilla sembraron dudas en el proyecto deportivo.

Tras no lograr la clasificación para la promoción de ascenso al perder en la última jornada frente al Valladolid, el club decidió su destitución y apostó por el técnico vasco Jagoba Arrasate.

15 victorias seguidas en casa

El de Berriatua superó un mal inicio de liga --logró un triunfo en las primeras cinco jornadas-- y consiguió que el cuadro navarro recuperase la ambición por pelear en campo contrario.

Un estilo de juego valiente que en lo que va de campaña se ha traducido en hitos como sumar 15 victorias consecutivas en El Sadar, incluido el partido suspendido ante el Reus.

Osasuna sella de esta manera su octavo ascenso a Primera División en 99 años y aspira a igualar sus mejores rachas en esta categoría --14 años consecutivos en la elite del fútbol español-- de 1980 a 1994, y de 2000 a 2014, año en el que descendió con Javi Gracia como entrenador.

El club navarro, tras unos años convulsos, fundamentalmente a raíz del denominado 'caso Osasuna', afronta una nueva etapa con la vista puesta en su centenario, que se celebrará en otoño de 2020.

Una celebración histórica para la que el club pretende que la reforma de estadio, elegida por los socios, ya esté completada.