Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

Rusia recrudece su ofensiva contra Ucrania. El país liderado por Volodímir Zelenski ha sufrido una nueva oleada de bombardeos en Kiev, en donde han fallecido al menos diez personas y han resultado heridas más de sesenta. En el parte de heridos hay al menos cinco niños, tal y como lo han explicado las autoridades ucranianas.

El alcalde de Kiev, Vitalii Klitschko, ha asegurado que "los rusos hablan de paz, de paz rusa, pero nosotros vemos cómo es su paz".

El presidente ucraniano ha condenado el ataque masivo y lo ha calificado como "brutal". Por ello, ha decidido interrumpir su viaje a Sudáfrica y volver a Kiev. De hecho, ha insistido en un "alto el fuego inmediato, completo e incondicional".

Desde Estados Unidos, el presidente Donald Trump ha asegurado que tiene un "acuerdo" con Rusia para alcanzar el plan. Se trata de una propuesta que plantearía entregar los territorios ucranianos invadidos a su homólogo ruso, Vladímir Putin. Mientras tanto, Trump ha acusado a Zelenski de boicotear las negociaciones.

El presidente ucraniano no acepta el plan de Trump para acabar con la guerra, que pasa por cesiones territoriales como la de Crimea y el Donbás. Mientras, Rusia mantiene la ofensiva, con un ataque esta noche en Kiev que ha causado doce muertos. El bombardeo de Kiev ha llegado de madrugada, con decenas de drones, misiles de crucero y balísticos. Al menos uno ha caído en una fábrica. Otros han impactado en edificios residenciales. Los vecinos apenas han tenido tiempo para refugiarse. "Sonó la alarma, y después la explosión", dice una residente. El Gobierno de Ucrania reconoce que le faltan defensas antiaéreas y constata que los drones rusos son cada vez más rápidos.

En Ucrania, los esfuerzos diplomáticos languidecen y la guerra no se detiene. Este miércoles han muerto al menos nueve personas en un ataque ruso a un autobús. Mientras, en Londres, se esperaba un encuentro entre Estados Unidos y sus aliados europeos, en busca de un alto el fuego. Pero a última hora, el secretario de Estado estadounidense ha cancelado el viaje. La abrupta retirada de Marco Rubio llega con Washington en plena presión sobre Ucrania y a Rusia.

El papa Francisco habló muchas veces a favor de la paz en Ucrania, pero también hizo declaraciones que generaron malestar en el país. Recuperamos algunas de sus palabras.

El sacerdote Mykhailo Kvasiuk, jefe de prensa de la archidiócesis de Leópolis de la Iglesia greco católica ucraniana, nos ha explicado los sentimientos encontrados de los ucranianos respecto a esas declaraciones que el papa Francisco hizo sobre la guerra. Dice que ahora hay miedo a lo que pueda venir, y que esperan que haya un buen sucesor que contribuya a terminar la guerra.

Además recuperamos una conversación con Jordi Barcia, corresponsal de RNE en Roma. Hace un año, por estas fechas, después del mensaje del papa Francisco en Pascua, nos explicó la posición del pontífice frente a la guerra, por qué en ocasiones se le acusó de prorruso, el papel de la diplomacia vaticana y el intento de acercamiento del papa a la iglesia ortodoxa.

El papa Francisco llevó consigo el mensaje de la paz, el diálogo y la negociación allá donde fue. Un año después de haber sido nombrado pontífice, logró un hito histórico: juntar al entonces presidente israelí Shimon Peres y al palestino Mahmud Abás en una oración por la paz en Tierra Santa en los Jardines Vaticanos. Habló sin tapujos sobre la guerra en Ucrania y en Gaza, medió entre Estados Unidos y Cuba y trató de acercar posturas con China. Siempre defendió eliminar el comercio de armas: "Dinero manchado de sangre", llegó a decir ante el Congreso de EEUU. Los detalles de la geopolítica de Francisco con la compañera de Internacional, Cristina Sánchez.

La invasión rusa de Ucrania no solo ha transformado el mapa geopolítico de Europa, también ha reactivado un debate que parecía superado en muchas democracias del continente: el servicio militar obligatorio. Mientras algunos países lo mantienen desde hace décadas, otros lo están reintroduciendo o reformulando como respuesta directa al nuevo clima de inseguridad.

En países como Suecia, donde el reclutamiento obligatorio volvió en 2017 tras una caída drástica de los alistamientos voluntarios, se forma a 12.000 soldados al año. En Noruega, el sistema es igualitario entre hombres y mujeres, y hasta la princesa Ingrid Alexandra ha cumplido con el servicio. Dinamarca se ha sumado este verano con la inclusión de mujeres en su modelo de reclutamiento. En países como Finlandia o Grecia, el servicio sigue siendo obligatorio para todos, aunque con variaciones: en algunos casos por sorteo, en otros según perfiles específicos.

La tendencia es clara: más de diez países europeos —especialmente del norte y este— mantienen o han reactivado el servicio militar desde 2022. Todos los que comparten frontera con Rusia lo han recuperado. En la parte occidental de Europa, sin embargo, el tema genera un fuerte debate político. En Alemania, aunque suprimido hace más de una década, el nuevo canciller, Friedrich Merz se muestra a favor de estudiarlo.

En Francia, el presidente Emmanuel Macron ha descartado su vuelta, pero impulsa una versión civil llamada Servicio Nacional Universal, centrada en inculcar valores cívicos y preparación ante desafíos de seguridad. De momento, en España el Gobierno ha negado que exista algún plan en curso para recuperar el servicio militar obligatorio.

Rusia y Ucrania se han acusado mutuamente de romper la breve tregua de Pascua anunciada por el presidente ruso, Vladímir Putin, y aceptada por su homólogo ucraniano, Volodímir Zelenski. Estas 30 horas de alto el fuego han sido recibidas con escepticismo en ambos países.

Zelenski ha felicitado la Pascua ortodoxa con referencias veladas a Putin: "El mal tendrá su hora, pero Dios tendrá su día. Llegará el día de Ucrania y de la paz". El presidente ruso acudió a la vigilia pascual en Moscú junto al patriarca Kíril. El máximo representante de la iglesia ortodoxa es un gran apoyo para Putin en su guerra. Hoy le ha agradecido su labor en un mensaje escrito.

El Ministerio de Defensa ruso difunde la celebración de Pascua en primera línea del frente solo unas horas después del inicio de una tregua que genera dudas. En Kiev han sonado las alarmas antiaéreas esta noche. Ambos bandos se acusan de violar el alto el fuego que anunció la víspera Putin de forma unilateral para 30 horas. Zelenski se sumó a la tregua, pero dejando claro que no se fía e instó a Putin a que la prorrogue por 30 días, algo que ya propuso Washington y que Moscú rechazó.

Foto: Catedral ortodoxa de San Miguel Dorado en Kiev (Sergei SUPINSKY/AFP)