Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

Un tiroteo en la sede de YouTube en San Bruno, 20 kilómetros al sur de San Francisco (California), ha dejado este martes al menos una persona muerta y cuatro heridas, tres de ellas de bala. La Policía cree que la persona fallecida, una mujer, es la autora del tiroteo y que se suicidó.

Los agentes han identificado a la sospechosa como Nasim Aghdam, de 39 años y residente en San Diego. Aghdam tenía una página web en la que se quejó en varias ocasiones de que YouTube presuntamente bloqueaba y censuraba sus vídeos. "¡YouTube filtró mis canales para evitar que consigan visionados!", dijo en una ocasión.

La sede de YouTube en Silicon Valley, el corazón de la industria tecnológica en Estados Unidos, es un gran complejo formado por tres edificios en Cherry Avenue de San Bruno, muy cerca de la autopista Interestatal 380.

La Policía recibió un aviso del tiroteo a las 12.46 horas locales (21.46 hora española) y ordenó evacuar a cientos de personas que se encontraban en el área. El personal abandonó las instalaciones brazos en alto.

Tras cierta confusión a lo largo de la tarde sobre el número víctimas, la Policía de San Bruno ha aclarado finalmente que fueron tres las personas heridas por arma de fuego mientras que una cuarta resultó herida en el tobillo mientras trataba de huir. Los responsables del Hospital General Zuckerberg San Francisco han informado de que en este centro recibieron a tres víctimas: un hombre, en condición crítica; y dos mujeres, una de las cuales está grave.

La Justicia mexicana investiga la muerte del empresario español José González, que murió a tiros a la salida de uno de los establecimientos que regentaba en Ciudad de México el pasado sábado. Su nombre se suma a los de Segismundo Díaz, asesinado en Puebla en enero y Manuel Teixeira, muerto en Guanajuato en diciembre. Son tres españoles muertos en México en tres meses, todos ellos empresarios y dos de ellos con vínculos con Beariz, en Orense. La violencia en México batió el récord de homicidios en 2017 con el asesinato de más de 25.000 personas, en un país en que sufre un alarmante incremento de la incidencia delictiva, según advierten los expertos. 

Decenas de miles de estudiantes han protestado por todo el país para pedir más control de armas, coincidiendo con el primer mes después de la matanza en el instituto de Parkland, en Florida. Allí, los cerca de 3.000 alumnos han guardado 17 minutos de silencio, uno por cada víctima que murió a manos de Nikolas Cruz, para quien la Fiscalía solicitará pena de muerte y que este miércoles ha comparecido ante el tribunal sin declararse culpable. Llevan ya un mes manifestándose, pero de momento no han conseguido ningún avance. Las protestas se han sucedido por todo el país, en denuncia a la inacción de los legisladores y para concienciar al Congreso de que debe tomar medidas para que masacres como la de Parkland no vuelvan a ocurrir. 

Miles de alumnos estadounidenses han parado este miércoles por todo el país para exigir un mayor control en la venta de armas de fuego un mes después de la tragedia en el instituto de Parkland, en Florida. Allí, en el Marjory Stoneman Douglas, los estudiantes han parado a las 10:00 de la mañana durante 17 minutos en recuerdo a las 17 personas asesinadas por Nikolas Cruz, y la escena se ha repetido por todo el país. Exigen al Congreso que endurezca la legislación, claman contra la violencia por armas de fuego en los colegios en un momento en que el debate está especialmente abierto por la sugerencia de Trump de dotar a los profesores de armas para defenderse.

Este pequeño de 15 años salvó la vida a 20 de sus compañeros durante el tiroteo de Florida, en el que murieron 17 personas. Anthony Borges bloqueó la puerta de su clase con su cuerpo y recibió cinco disparos, de los que se está recuperando, una vez esté bien, viajará a Barcelona para presenciar un partido del equipo azulgrana, del que es un gran aficionado.

Los alumnos del instituto Marjory Stoneman Douglas en Parkland, Florida, han vuelto a las clases este miércoles dos semanas después del tiroteo en el que murireron 17 personas a manos de un exalumno. Las clases han sido más cortas y los estudiantes no han llevado libros ni mochilas: el objetivo del día era que retomaran poco a poco la normalidad, conversar y que se apoyasen los unos en los otros. Decenas de voluntarios han repartido además flores blancas para los que han llorado la ausencia de las víctimas. Entretanto, el debate sobre el control de las armas no avanza, pero los afectados seguirán haciendo campaña por un control más estricto. 

El 15 de febrero, el exalumno Nikolas Cruz irrumpió en el instituto Stoneman Douglas en Parkland, Florida, y armado con un fusil AR-15 mató a 17 personas. Peter Wang, de 15 años, murió bajo las balas mientras mantenía abierta una puerta para que sus condiscípulos pudieran escapar. El adolescente era Cadete del cuerpo de oficiales de reserva y su mayor deseo era ingresar en West Point al acabar el instituto. Tras su fallecimiento en ese acto heróico, la Academia Militar, a título póstumo, le ha admitido como alumno en la promoción de 2025. La institución subraya que una de sus prioridades es "desarrollar líderes con carácter entregados a los valores de Deber, Honor y País". Para West Point, su actitud el día del tiroteo es "un ejemplo de esos principios". No es la primera admisión póstuma pero es una distinción tan rara que no se recuerda la última concedida. Wang y otros dos cadetes fallecidos, Alaine Petty y Martin Duque, ambos de 14 años, han recibido también la Medalla al Heroísmo.