Un clamor contra el racismo recorre Estados Unidos. 57 años después del histórico discurso de Martin Luther King, la muerte en mayo del afroamericano George Floyd, asfixiado por un policía blanco, devolvía a la primera línea de la política la lucha por la justicia racial y la igualdad.
A menos de dos meses para las elecciones presidenciales, nuevos casos de violencia policial contra afroamericanos han disparado la tensión. Las protestas y los disturbios se expanden por el país. Los manifestantes, herederos de un sueño que nunca llega, no solo reclaman reformas en la policía y mayor seguridad para los afroamericanos. Piden también una revisión del pasado.
La corresponsal de TVE en Washington, Cristina Olea, ha repasado la historia racial de los Estados Unidos con Daniel Smith, de 88 años, probablemente el último hijo vivo de un esclavo. Él participó en la marcha del doctor King en 1963, “una época de caos” para los afroamericanos, recuerda. “Nos quemaban los autobuses y mataban a gente. Las cosas mejoraron con las leyes de derechos civiles”, cuenta Daniel, “pero ahora parece que vamos hacia atrás”.
Los diversos sucesos de violencia policial contra afroamericanos en los últimos meses en Estados Unidos han desencadenado multitud de protestas por todo el país. La polémica reavivada sobre el racismo sistémico e histórico en el país ha llevado al debate y la revisión de símbolos y monumentos que recuerdan a episodios como el de la esclavitud.
El suceso que provocó la muerte del afroamericano George Floyd durante su detención a manos de un policía de raza blanca no solo encendió las protestas, también abrió el debate sobre la necesidad de revisar la historia, empezando por la esclavitud. Millones de afroamericanos buscan sus raíces en bancos de datos o con puebas de ADN. Un equipo de TVE ha estado en lugar donde llegaron los primeros esclavos hace cuatro siglos.
En Rochester, Nueva York, agentes de la Policía detuvieron y encapucharon a un afroamericano de 41 años, presionando su cara contra el suelo durante dos minutos. El hombre falleció en el hospital una semana después de sufrir la violencia policial.
En su viaje a la última localidad con movilizaciones contra racismo, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha insistido en su mensaje de ley y orden y en señalar a la izquierda radical como responsable de los disturbios en los que murieron dos personas por los disparos de uno de sus seguidores. El mandatario ha visitado las zonas con destrozos y a la policía, pero no a la familia del afroamericano al que disparó un agente.
La Policía de Portland está investigando el suceso y no ha precisado si el suceso está directamente relacionado con los enfrentamientos que estallaron este sábado por la noche en el centro de Portland, ciudad que ha vivido constantes protestas desde la muerte en mayo del afroamericano George Floyd, asfixiado por un policía blanco.
Este sábado se reanuda la NBA, después de varios días en los que la cancelación definitiva ha estado muy cerca, con varios jugadores dispuestos a no ceder como Lebron James o Chris Paul, que habrían sido convencidos por referentes como Michael Jordan o Barack Obama para seguir jugando.
El partido que retoma estos días de parón es precisamente el primero que se suspendió, el Milwaukee-Orlando de primera ronda con 3 a 1 a favor de los Bucks, a una sola victoria de eliminar a los Magic. También podrían mandar a casa a su rival esta noche los Lakers si derrotan a Portland.
Los sentimientos continúan a flor de piel en el deporte americano, también en el béisbol y en el equipo más famoso del mundo, los New York Yankees.
El entrenador de la franquicia neoyorkina, Aaron Boone, llevaba una camiseta del 'Black Lives Matters'. Frente a los periodistas, se emocionó y abandonó la rueda de prensa, después de asegurar que todo este movimiento les está haciendo mejores.