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El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, afronta su quinto mandato al frente del país centroamericano. Este lunes tomará posesión en un contexto marcado por el encarcelamiento de críticos con el régimen y la deriva antidemocrática. Siete meses después, muchos líderes opositores, periodistas y empresarios siguen presas. Los activistas culpan al régimen de Ortega y al de su esposa de la situación. Con este quinto mandato el mandatario nicaragüense cumple 20 años en el poder.

FOTO: REUTERS/Maynor Valenzuela

Oscar Parra, María Teresa Montaño y una periodista nicaragüense que no quiere desvelar su identidad por seguridad nos cuentan, de la mano de Reporteros Sin Fronteras, cómo es trabajar en países en los que se persigue y se amenaza a quien destapa abusos y corrupción.

En el informativo 24 horas hemos hablado con Óscar René Vargas, politólogo y economista nicaragüense, sobre la situación que atraviesa Nicaragua. Vargas participó en la revolución sandinista y cuenta que le salvó la vida al ahora dictador Daniel Ortega —"Ha sufrido una mutación, solo quiere mantenerse en el poder"—, aunque asegura no arrepentirse de haberle salvado la vida al hombre que se convirtió en tirano tras derrocar al anterior cacique. "Casi el 80% de la población no asistió a los centros de votación, es el doble de lo que está señalando el régimen de Ortega", cuenta Vargas, quien afirma que, de seguir por esta senda,  solo se empobrecerá y se aumentarán las desigualdades sociales en la sociedad nicaragüense.

Se multiplican las acusaciones de farsa al proceso electoral en Nicaragua. Los resultados conceden la victoria con un 75% de los votos a Daniel Ortega, el único candidato -con opciones- en libertad. Los demás están en prisión o exiliados. Pero la cuarta reelección de Ortega se enfrenta a un gran rechazo de la comunidad internacional. El gobierno español no reconocerá al presidente de Nicaragua, tampoco Chile y Colombia. Sin embargo, Rusia, Cuba, Venezuela y Bolivia sí han felicitado a Ortega, que se encamina, junto a su vicepresidenta y esposa Rosario Murillo, a 19 años consecutivos de poder. Por su parte, el mensaje es unánime entre los huidos a la vecina Costa Rica: denuncian la detención de siete precandidatos, la ausencia de observadores internacionales y el veto a la prensa extranjera.

FOTO: EFE / JORGE TORRES

Comenzamos atentos a los resultados definitivos de las elecciones presidenciales en Nicaragua, con una anunciada victoria de Daniel Ortega y denuncias de fraude por parte de la oposición y de la comunidad internacional. Lo analizamos con Salvador Martí y Puig, Catedrático de Ciencias Políticas de la Universidad de Girona e investigador asociado del CIDOB-Barcelona y del Instituto de Iberoamérica de la Universidad de Salamanca. También Hablamos con el periodista Javier Otazu sobre su libro más reciente sobre Marruecos, las relaciones con sus vecinos y las tensiones en esa zona del Magreb.

Hablamos del resultado electoral en Nicaragua con Salvador Martí y Puig, Catedrático de Ciencias Políticas de la Universidad de Girona e investigador asociado del CIDOB-Barcelona y del Instituto de Iberoamérica de la Universidad de Salamanca.

Se confirma la victoria de Daniel Ortega en las elecciones en Nicaragua. Unos comicios en los que no se ha podido presentar la oposición, encarcelada o en el exilio, y que la comunidad internacional no reconoce. EEUU y la UE las han calificado de “pantomima” o "farsa". Los datos de participación son inciertos, aunque se da por hecho que acudió muy poca gente a votar. Informa Santiago Barnuevo.

El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, ha sido reelegido para un quinto mandato de cinco años, el cuarto consecutivo, con el 74,99 % de los votos en las elecciones generales celebradas este domingo, según datos preliminares facilitados por el Consejo Supremo Electoral (CSE) con menos de la mitad del escrutinio.

Los comicios se han celebrado con siete aspirantes a candidatos presidenciales de la oposición en prisión acusados de "traición a la patria". Otros dos aspirantes disidentes se marcharon al exilio alegando razones de seguridad.

La jornada se ha centrado en el nivel de participación, ante la ausencia de una competición electoral real que pudiera arrebatar al victoria a Ortega. Más de 4,4 millones de nicaragüenses podían votar por la presidencia y la vicepresidencia, así como 90 diputados ante la Asamblea Nacional y 20 ante el Parlamento Centroamericano (Parlacen).

Según el órgano electoral, ha votado el 65,34 % de los electores. No obstante, el observatorio multidisciplinario independiente Urnas Abiertas ha cifrado la abstención en un 81,5 %.

El presidente estadounidense, Joe Biden, ha calificado los comicios de "pantomima", y el gobierno español de "farsa".

Foto: CESAR PEREZ /Presidencia de Nicaragua/ AFP

Anna Ayuso, investigadora senior para América Latina del CIDOB, el Centro de relaciones internacionales de Barcelona, dice que ahora será clave ver hasta dónde llega la reacción de EEUU a la crisis política de Nicaragua. Ella no apuesta por romper relaciones, pero si cree que las medidas que se tomen para responder a Ortega son importantes. Igual con la UE: “Hay que ser contundente en señalar la situación política y en apoyo y defensa de los DDHH, pero estando siempre abiertos a un diálogo que permita acercar posiciones. Romper no es una buena solución, porque te limitas en la capacidad de diálogo”. Sobre la oposición, dice que ahora el problema es que está desdibujada y apuesta por abrir un proceso en la que se recomponga: “Deben construir una alternativa real a Ortega. Estas elecciones han desenmascarado un régimen que ha perdido un apoyo popular. Los países se han ido distanciando y ahora la oposición debe ver cómo va a rehacerse”.

Nicaragua ha celebrado unas elecciones no reconocidas por la comunidad internacional ni la oposición. El presidente Daniel Ortega busca su quinto mandato presidencial tras haber perseguido y encerrado a buena parte de los candidatos rivales. El gobierno de Managua ha prohibido la entrada al país a muchos medios internacionales, entre ellos TVE. 

Foto: REUTERS/Stringe

Nicaragua celebra elecciones con la oposición en la cárcel o en el exilio, por lo que el tándem formado por Daniel Ortega y su esposa, Rosario Murillo, tiene asegurada la reelección. La Unión Europea considera los comicios una farsa. Costa Rica es uno de los países con más exiliados nicaragüenses. En la capital, San José, está un equipo de TVE al que no le han permitido entrar en Nicaragua.

Foto: Manifestación de nicaragüenses en San José, Costa Rica (REUTERS/Mayela Lopez)

La comunidad internacional ha calificado de farsa las elecciones presidenciales y legislativas en Nicaragua. El actual presidente, Daniel Ortega, tiene asegurada la reelección para su cuarto mandato consecutivo, con sus principales rivales políticos detenidos o en el exilio. Además, el gobierno nicaragüense ha prohibido la entrada en el país de observadores independientes y de numerosos medios internacionales.

Foto: Un colegio electoral en Managua (REUTERS/Stringer)

Más de 4,4 millones de nicaragüenses están convocados para acudir a las urnas este domingo, con el objetivo de elegir al presidente y vicepresidente de Nicaragua, 90 diputados ante la Asamblea Nacional y 20 representantes ante el Parlamento Centroamericano.

Sin embargo, en las elecciones no podrán participar tres partidos opositores por decisión del Consejo Supremo Electoral (CSE), mientras que siete aspirantes a la Presidencia por la oposición fueron encarcelados en los últimos meses y dos optaron por el exilio tras conocer órdenes de captura en su contra.

FOTO: REUTERS/Mayela Lopez