El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, ha cifrado este domingo en 254 las personas, que por el momento, han muerto por la avalancha de tres ríos que destruyó varios barrios de Mocoa, al sur del país. Entre los fallecidos, según el mandatario, hay 43 niños, y el número de heridos asciende a 203. El director del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, Carlos Eduardo Valdés. ha pedido "paciencia" a los familiares porque lo que se busca es no entregar cadáveres "equivocados" o que no estén plenamente identificados. En las labores de identificación participan 52 funcionarios entre médicos, odontólogos y otros funcionarios de Medicina Legal apoyados por la Policía colombiana, según Valdés. Además, ha añadido que este lunes viajarán a Mocoa otros 30 funcionarios para que las labores de identificación se puedan terminar en el menor tiempo posible.
En Mocoa, Colombia, tratan de encontrar a supervivientes de la avalancha de agua, lodo y piedras que ya ha causado al menos 234 muertos y más de 200 heridos.
Los supervivientes de la localidad colombiana de Mocoa se derrumban delante de las listas de fallecidos y desaparecidos, muchos de ellos menores, arrastrados pasadas las once de la noche por una gran tromba de agua, piedras y lodo que se llevó por delante todo lo que se encontró.
Los vecinos de Mocoa, localidad colombiana arrasada por una avalancha de agua que ha dejado más de 200 muertos, tratan de reponerse de la tragedia mientras continúan las labores de rescate. "¡Atención Putumayo, nos estamos inundando en este momento (...), ayúdennos por favor!", decía una de las víctimas en una llamada a Emergencias. "Mocoa está hecho un desastre, prácticamente está destruido, no hay agua, no hay luz", afirma otro testigo.