El dispositivo de búsqueda del cuerpo de la joven sevillana Marta del Castillo en el río ha reanudado esta mañana sus trabajos con la novedad de que se han extendido a las tuberías y colectores que dan al Guadalquivir, que van a ser rastreadas por un equipo de submarinistas de la Guardia Civil.
Más de 250 familiares, amigos y vecinos de Marta del Castillo, la joven de 17 años asesinada presuntamente por Miguel C.D., según ha confesado él mismo, y cuyo cadáver se busca en el río Guadalquivir, viajarán hoy a Madrid para participar en una manifestación para reclamar un referéndum por la cadena perpetua.
Siete días buscando en aguas y orillas del Guadalquivir el cuerpo de Marta del Castillo.(20/02/09)
Un golpe que presuntamente le dió su ex novio, Miguel Carcaño. La policía ha confirmado que tiene pruebas científicas irrefutables, como sangre de la joven en la cazadora de Miguel con la que envolvieron el cenicero, antes de tirarlo al río.
Los padres de Marta se reunirán el martes con el presidente del Gobierno, y se entrevistarán también con el líder de la oposición, aunque en esta caso será después de las elecciones del 1 de marzo. Esta mañana han rastreado pormenorizadamente una zona de Coria del Río . Ahora la búsqueda vuelve a centrarse en el Charco de la Pava.
La Policía sostiene que hay "pruebas irrefutables contra los cuatro detenidos por el asesinato de Marta del Castillo (20/02/09).
El juez ha decretado prisión incondicional para el hermanastro del presunto autor material de la muerte de Marta del Castillo.(19/02/09)
El juez ha tomado declaración al hermanastro del asesino confeso de Marta del Castillo y ha decretado para él prisión incondicional.(19/02/09)
El juez decreta prisión incondicional para el hermanastro del asesino confeso de Marta del Castillo (19/02/09).
Mientras tanto en el juzgado hoy ha prestado declaración Javier Delgado, hermanastro del asesino confeso, Miguel Carcaño.
El hermano del asesino de Marta del Castillo, Javier M.D., ingresará en prisión después de que la fiscalía que instruye le impute un delito asesinato o, en su defecto homicidio, en espera de que aparezca el cadáver.
