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Los equipos de rescate que intentan localizar a Julen, el niño que se cayó en un pozo en Totalán (Málaga), han decidido cavar un túnel horizontal que se abrirá en el lateral del cerro y desde el que se intentará acceder al niño. Para hacerlo, esperan la ayuda de una empresa de ingeniería y de una brigada de salvamento de la minería asturiana. El padre del niño se queja de la falta de medios.

Sin rastro del pequeño Julen. Los equipos de rescate llevan trabajando 48 horas sin descanso. En estos momentos intentan abrir un túnel trasversal para intentar llegar al fondo del pozo donde creen que se encuentra el niño.  El pozo tiene una profundidad de unos 100 metros y un diámetro de apenas 25 centímetros. Hay otras alternativas que los técnicos barajan para encontrarle pero de momento, ésta que la que menos riesgo de derrumbe supone.

Las tareas de rescate del niño de 2 años que este domingo cayó a un pozo de 107 metros de profundidad en la localidad malagueña de Totalán continuarán con el entubado del sondeo, de 25 centímetros de ancho y en el que ya se ha llegado a una profundidad de 73 metros sin haber dado aún con el pequeño. Con el entubado se trata de evitar desprendimientos, al tiempo que se realiza una prospección paralela, en unos trabajos que proseguirán de noche y en los que se relevan los equipos de rescate.

Más de un centenar de efectivos trabajan en el rescate de Yulen, un niño de dos años que este domingo se cayó accidentalmente a un pozo de Totalén, en Málaga. En estas tareas trabajan la Guardia Civil, Emergencias 112, Consorcio Provincial de Bomberos de Málaga, Protección Civil, el Equipo de Rescate e Intervención de Montaña (EREIM) de Álora y Granada, submarinistas del instituto armado y bomberos de Málaga capital. (Fuente: Guardia Civil/Ministerio del Interior)

El oficial Aitor Soler, responsable de la Unidad especial de emergencia y respuesta inmediata de la Comunidad de Madrid, ERICAM, ha explicado que en estos momentos el principal objetivo es conocer, a través de una cámara, el estado en el que se encuentra el pequeño. "Lo primero es ver a qué profundidad se encuentra y luego comprobar si está vivo o no", ha indicado Soler. La principal dificultad del rescate es el diámetro del pozo, seguida de la profundidad.

Un centenar de efectivos de los servicios de emergencia continúan las "complicadísimas" tareas de rescate de Julen, el niño de dos años que cayó accidentalmente este domingo a un pozo, de más de 100 metros de profundidad, en la sierra malagueña de Totalán.

Los esfuerzos se centran ahora en atravesar el tapón de tierra dura con el que se ha topado una cámara térmica a 78 metros, en este punto se ha hallado una bolsa de chucherías y un vaso de plástico. Los especialistas han conseguido perforar 30 centímetros de terreno aunque las labores son lentas.

Así lo ha confirmado el portavoz de la Guardia Civil, Bernardo Moltó, que ha señalado que ante la extrema dificultad para acceder al fondo del pozo, de tan solo 25 centímetros de diámetro, barajan tres opciones de rescate: "extraer la tierra con un camión, abrir un segundo pozo intubado o excavar a cielo abierto a través del lateral de la montaña", a la espera de que llegue la maquinaria adecuada para realizarlo.

Hablamos con Antonio Ulloa, instructor de búsqueda y salvamento y profesor colaborador de la academia gallega de seguridad, para conocer cómo se realizan rescates en lugares tan complicados como un pozo.

Han pasado 24 angustiosas horas desde que Yulen, el pequeño de dos años cayó a un pozo en Totalán, en Málaga. Un pozo de agua de poco más de un palmo de ancho y de unos 110 metros de profundidad. Un equipo de cien efectivos especialistas en rescates de la Guardia Civil, bomberos, de unidades subacuáticas, espeleólogos siguen trabajando contrarreloj, sin perder un solo minuto.

En Totalán, Málaga continuan las labores para tratar de localizar a Yulen, el niño de dos años que cayó este domingo a un pozo de más de 100 metros de profundidad. Durante toda la noche el operativo de rescate formado por un centenar de personas ha estado trabajando pero no han obtenido ningún resultado.

Un centenar de efectivos de los servicios de emergencia intentan rescatar a un niño de dos años que cayó en la tarde de este domingo a un pozo de más de cien metros de profundidad en Totalán (Málaga). 

El padre del niño y el 112 avisaron sobre las 14.00 horas de forma simultánea al instituto armado de que la familia se encontraba en la sierra de la localidad y el niño se había caído por un agujero.

Se trata de un orificio de prospección para buscar agua, de 25 centímetros de diámetro y 110 metros de largo, algo más estrecho y menos profundo de lo que se barajó en un principio (40 centímetros por 150 metros).