El Lisboa, cientos de personas han desfilado por la capilla ardiente de José Saramago, instalada en el Ayuntamiento de la capital lusa. El escritor portugués falleció el viernes en Lanzarote y sus restos serán incinerados este domingo tras un funeral de Estado al que asistirá la vicepresidenta primera del Gobierno español, María Teresa Fernández de la Vega.
Ver también: Especial Muere José Saramago
Los restos del premio Nobel José Saramago han llegado este sábado a Lisboa, donde se ha instalado su capilla ardiente. Saramago será incinerado este domingo y sus cenizas se esparcirán entre su país natal y Lanzarote. A su llegada a Lisboa ha sido recibido con honores de dignatario de Estado.
El féretro con los restos mortales del escritor José Saramago, fallecido el viernes en Lanzarote, ha abandonado este sábado la isla con destino a su país natal, Portugal, donde será incinerado. La viudad del autor, Pilar del Río, familiares y amigos han sacado el ataúd del interior de la biblioteca de Tías, donde ha estado instalada la capilla ardiente. Decenas de personas han aplaudido a la salida del féretro (19/06/10).
El jurado del segundo concurso de relatos de mayores convocado por RNE y la obra social de la Fundación la Caixaha estado formado por Soledad Puértolas, Fernando Schwartz, Javier Zuloaga y Juan Carlos Soriano (19/06/10).
Esta obra es apocalíptica, su historia se desarrolla en la ciudad de Buenos Aires tomada por la vegetación en la que la sociedad evoluciona de una forma inversa (19/06/10).
Es ese pueblo portugués nació hace 87 años y, aunque se fue con su familia a Lisboa a los tres años, siempre mantuvo la vinculación con su aldea.
Perseguido durante la dictadura de Salazar fue miembro del Partido Comunista Portugués desde los años 60.
El escritor portugués ha muerto en la isla de Lanzarote, donde fijó su residencia en los años noventa.
El escritor portugués recibió en 1988, a los 66 años, el Premio Nobel de Literatura.
Pilar Trenas entrevista al escritor portugués José Saramago en dos de los lugares de su vida: Sevilla y Lisboa.
Juan Ramón Lucas entrevista al escritor portugués José Saramago tras la publicación de la que sería su última novela, Caín, en diciembre de 2009.
Discurso de José Saramago en el Círculo de Bellas Artes de Madrid con motivo de la presentación de su obra 'El hombre duplicado' el 14 de enero de 2003. En esta novela, más austera, trata la peripecia de un hombre que descubre a su doble en una película y relata el problema de la identidad a través de la intriga. Saramago lanza una pregunta: "¿quiénes somos? Eso no tendrá respuesta nunca".
Entrevista realizada a José Saramago el 24 de enero de 2007. Los oyentes podrán encontrarla desde el 17:20 hasta el 42:00. 'Las pequeñas memorias' es una novela autobiográfica, breve y amena. La historia se cuenta desde la perspectiva del Saramago joven, un niño pobre de una aldea de Portugal. El propio Saramago ha explicado que, con este texto, buscó conocer su relación con "ese niño que fui".
Entrevista realizada a José Saramago el 24 de diciembre de 2005. En ella, el escritor portugués recuerda que la idea de escribir esta novela surgió el Día de Todos los Santos. Narra los conflictos resultantes de la decisión de la muerte de abandonar su actividad. Explica que en el libro, el alborozo que supone la jubilación de la muerte se convierte luego en motivo de preocupación en el país en el que tiene lugar debido al impacto político, económico social y religioso de esa situación. Saramago considera que la sociedad no debería temer tanto la muerte porque la inmortalidad sería infinitamente peor.
Entrevista realizada a José Saramago el 4 de febrero de 1998 pocas horas antes de presentar 'Todos los nombres'. El portugués explica que no le parece de recibo el ser optimista en un mundo como éste en el que vivimos: rodeados, por un lado, de problemas como la droga o la delincuencia organizada, y por otro, del interés personal y el egoísmo. Por eso reclama la indignación necesaria en la sociedad para expresar una rebeldía contra el sistema, no para hacer una revolución, pero sí para tener una exigencia de ciudadanía en relación con el cumplimiento de la ley, el respeto humano y la distribución equitativa de la riqueza.
