Los combates continúan en el este de Ucrania mientras en Minsk representantes de Kiev y de los rebeldes prorrusos discuten un posible alto el fuego y todo está preparado para la cumbre en la que esta tarde participarán los presidentes de Ucrania, Rusia, Alemania y Francia. En total, casi una treintena de personas han muerto en las últimas horas, según datos de uno y otro bando.
LUÍS PÉREZ (Enviado especial a Donetsk).- Los combates continúan en el este de Ucrania, mientras en Minsk representantes de Kiev y de los rebeldes prorrusos discuten un alto el fuego. A primera hora del miércoles un cohete ha alcanzado la estación de autobuses de la ciudad de Donetsk, capital de la misma región y bastión de los secesionistas.
El proyectil ha atravesado el techo de la estación y ha calcinado dos autobuses.
Este nuevo ataque se ha producido después de una larga noche de negociaciones en la capital bielorrusia en las que se han sentado representantes del gobierno ucraniano, los rebeldes, Rusia y la OSCE.
En la misma ciudad tendrá lugar este miércoles una reunión entre el presidente ucraniano, Petró Poroshenko y el presidente de Rusia, Vladimir Putin, con la mediación de sus homólogos de Francia, François Hollande, y Alemania, Angela Merkel. Se trata de un último intento que se ha recrudecido en las últimas semanas y que ha provocado ya más de 5.000 muertos, según la ONU.
Un equipo de TVE ha visitado a familias de Donetsk que se refugian en sótanos para protegerse de los bombardeos de la guerra en el este de Ucrania.
El viceministro de Interior de la autoproclamada República Popular de Donetsk muestra a un equipo de TVE un mapa con los puntos de la ciudad que están reforzando mientras jóvenes y mayores se alistan para combatir, de momento, voluntariamente.
El presidente de EE.UU., Barack Obama, ha recibido a la canciller alemana, Angela Merkel, para abordar la crisis de Ucrania y buscar una solución diplomártica. El mandatario ha dicho "no ha decidido áún" si va a armar al Gobierno de Kiev; a lo que Berlín se opone tajantemente.
Durante una conferencia de prensa conjunta con Merkel en la Casa Blanca, Obama ha dicho que aún no ha decidido si entregará armas a los ucranianos en su lucha con los separatistas prorrusos en el este del país. "Es una de las opciones, pero aún no lo he decidido", ha dicho el presidente estadounidense.
Obama ha subrayado que los rebeldes prorrusos de Ucrania "han violado todos los compromisos" establecidos el año pasado para resolver el conflicto y ha acusado a Rusia de enviar "más tanques" en apoyo de los separatistas y de "redibujar las fronteras de Europa por la fuerza de las armas".
A pesar de las insistentes denuncias del Gobierno de Ucrania y sus aliados, Moscú niega que sus tropas estén enroladas en el conflicto desatado en la exrepública soviética tras el cambio de régimen en Kiev.
La crisis en Ucrania comenzó en noviembre de 2013, cuando miles de manifestantes salieron a la calle. El movimiento, llamado Maidán, nació para oponerse a una repentina decisión del presidente Yanukóvich, que rechazó un pacto con la Unión Europea y en su lugar firmó un acuerdo comercial con Rusia.
El ministro de defensa de la autoproclamada república de Donetsk, dice que no han podido evacuar a nadie, porque no se cumplían las medidas de seguridad necesarias.
La canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Francois Hollande, se negociaban este viernes en Moscú con el presidente ruso, Vladimir Putin, en un intento de frenar la escalada en el conflicto de Ucrania y abrir una vía para alcanzar un acuerdo de paz.
La población hace un ejercicio de resistencia entre los escombros de sus casas destrozadas, y aunque se ha abierto un corredor para evacuar a los civiles del corazón del conflicto, pocos confían en la tregua. Debáltsevo es un estratégico nudo de comunicaciones que se encuentra a medio camino entre Donetsk y Lugansk, ambas ciudades en poder de las milicias prorrusas.
Los separatistas prorrusos del este de Ucrania han anunciado la apertura de un corredor humanitario para que la población civil puedan abandonar la localidad Debáltsevo, donde se libran duros combates.
Debáltsevo es un estratégico nudo de comunicaciones que se encuentra a medio camino entre Donetsk y Lugansk, ambas ciudades en poder de las milicias prorrusas. Miles de personas han abandonado ya la ciudad, donde no hay luz ni agua ni calefacción, pero la evacuación se ha visto dificultada por los incesantes bombardeos.
En un intento por frenar el conflicto, que en las últimas semanas se ha recrudecido, la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Francois Hollande, se entrevistarán este viernes con el presidente ruso, Vladimir Putin.
Serbia y Croacia no cometieron genocidio, pero sí son responsables por no haberlo prevenido en la Guerra de los Balcanes, a principio de los 90. Los dos países quedan libres de las mutuas acusaciones porque la Corte Internacional de Justicia no ha encontrado pruebas que demuestren la intención deliberada, dice la sentencia, de acabar con los miembros de un grupo.
LUÍS PÉREZ (Corresponsal de TVE en Moscú).- Los dos bandos de la guerra de Ucrania, el Gobierno y los secesionistas prorrusos, han dejado de lado las conversaciones de paz y se centran en ganar la guerra en el campo de batalla. 9.000 soldados ucranianos intentan defender la ciudad de Debáltsevo. Los prorrusos han anunciado la movilización de 100.000 soldados.
Las consultas del Grupo de Contacto han fracasado en Minsk alejando aún más las tímidas esperanzas de la comunidad internacional sobre un arreglo pacífico del conflicto en el este ucraniano, donde los combates entre separatistas prorrusos y tropas de Kíev se han encrudecido drásticamente.
Los negociadores separatistas prorrusos han anunciado su decisión de abandonar las conversaciones en Minsk tras acusar a Kiev del bombardeo con numerosas víctimas civiles en la ciudad de Donestsk.
