Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

El narcotraficante colombiano Pablo Escobar está en el centro de una polémica suscitada casi dos décadas después de su muerte. Su hijo ha empezado a vender camisetas con su imagen, lo que ha provocado la indignación de muchas víctimas.

LUÍS PÉREZ (Corresponsal de TVE en Bogotá).- A mitad de su jornada laboral, 10 campesinos fueron sorprendidos por hombres fuertemente armados y recluidos en un edificio. Les preguntaron si pagaban "la vacuna", una extorsión que las bandas criminales obligan a pagar. El Gobierno asegura que estas bandas, herederas de los ejércitos paramilitares desmovilizados en 2006, son una gran amenaza para el Estado. Tienen miles de hombres armados por todo el país, controlan las rutas del narcotráfico y son la ley en la sombra en los territorios que dominan.

El Gobierno de Colombia y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) se reunirán este martes en la capital de Cuba para tratar detalles logísticos de cara al inicio de las conversaciones de paz el próximo 15 de noviembre. Una agenda que el pasado 18 de octubre se concretó con la mesa de diálogo en Oslo (Noruega), tras seis meses de conversaciones secretas en Cuba.

Según han informado fuentes del grupo insurgente a Efe, esta reunión servirá para acercar posiciones en torno al lugar de las conversaciones y asuntos relacionados con necesidades tecnológicas.

Estas conversaciones tienen lugar sin que haya habido un alto el fuego, por lo que ni Gobierno ni las FARC han cesado sus actividades. Desde la constitución de la mesa de diálogo han muerto seis policías y medio centenar de guerrilleros y un comunicado reciente de las FARC advertía de que estas conversaciones no es una "capitulación" de la insurgencia a partir de "promesas insustanciales" del Gobierno.

De hecho, varios comunicados públicos de la guerrilla colombiana insistían en que el ¿punto de arranque¿ de la negociación de paz implica referirse a "la concepción" de "lo que es la tierra".

Nos vamos ahora hasta Colombia para conocer una historia de buscadores de oro. Mineros que excavan la tierra de manera artesanal, como hace 200 años, en busca de este preciado metal.

LUÍS PÉREZ (Corresponsal de TVE en Bogotá). Aparecen los primeros problemas antes incluso de que las FARC y el gobierno colombiano se sienten a negociar, en Cuba, en un encuentro previsto para el 15 de noviembre. La guerrilla ha pedido al gobierno el "levantamiento pleno" de las órdenes de captura que pesan sobre los 29 delegados que van a participar en las negociaciones de paz. Con eso pretenden que se puedan mover con libertad por otros países. Eso choca con lo que explicó el fiscal general, Eduardo Montealegre: la suspensión de las órdenes de captura tiene una "limitación espacial" y solo se aplica en Oslo y La Habana. Si los guerrilleros pisan cualquier otro lugar, serán detenidos.

La Fiscalía colombiana ha levantado las 191 órdenes de captura emitidas contra los 29 miembros de las FARC que integran el equipo negociador en el proceso de paz con el Gobierno. La mayoría de ellas, 132, pesaban sobre "Iván Márquez", alias de Luciano Marín, el jefe negociador por los rebeles, y las menos, dos, sobre la holandesa Tania Nijmeijer ("Alexandra" o "Eillen"), enrolada en las FARC desde hace diez años. Se facilitan así las reuniones en Noruega y Cuba.

El Gobierno de Colombia y las FARC volverán a reunirse el 15 de noviembre en La Habana para continuar las conversaciones del proceso de paz iniciadas ayer en Oslo. Una negociación muy complicada en puntos como la reparación de las víctimas y la participación política de la guerrilla. Dos asuntos en los que las dos partes mantienen serias diferencias.

El gobierno colombiano y la guerrilla de las FARC volverán a sentarse a la mesa el próximo 15 de noviembre en La Habana con la intención de poner fin a un conflicto que dura ya casi medio siglo. Así lo han decidido ambas partes en su primer encuentro oficial en Oslo. El director del Centro Noruego de Recursos para la Construcción de la Paz, Mariano Aguirre, prevé una negociación muy larga, aunque cree que existe un punto de unión: "Las FARC básicamente lo que piden para integrarse en una mesa de negociación es que se discuta un cambio político, social y económico en Colombia, y el Gobierno ha abierto esa perspectiva; ha reconocido que hay problemas con la tierra, con la tenencia de la tierra, que hay problemas con la exclusión, la pobreza y la desigualdad" (19/10/12).

El Gobierno de Colombia y las FARC han iniciado allí un nuevo proceso de paz, aunque sin alto el fuego. El negociador de la guerrilla ha alertado contra una paz Express y desde el gobierno matizan que si las conversaciones fracasan no serán rehenes de este proceso.