El Banco de España rebaja las previsiones de crecimiento español para este año y para 2022. La crisis de abastecimiento de algunos productos, la elevada inflación y el deterioro de la pandemia están detrás de este frenazo de la actividad. En el empleo, sin embargo, la autoridad monetaria destaca un mayor dinamismo.
FOTO: Sede del Banco de España, en Madrid. GETTYIMAGES
Tanto el Banco de España como la Autoridad Fiscal Independiente han anunciado que rebajan sus previsiones de crecimiento. Marcan así distancias con las estimaciones del Gobierno y advierten de la amenaza que suponen los altos precios de la energía.
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El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, ha anunciado en el Congreso que el organismo va a rebajar "significativamente" en diciembre sus previsiones para la economía española por tres motivos: la subida de los precios de la energía, los cuellos de botella en el comercio internacional y el menor crecimiento apuntado por el INE en el segundo semestre. Además, ha asegurado que los números sobre los que el Gobierno ha construido los Presupuestos están lejos de la mayoría de previsiones internacionales y ha recomendado no aplicar subidas de impuestos.
El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, ha valorado "positivamente" la reforma laboral de 2012 "en términos de crear empleo en un momento complejo". En la comisión presupuestaria del Congreso, ha indicado que ese cambio normativo "no resolvió algunos problemas que subsisten en el mercado de trabajo español, como la dualidad y la temporalidad, que sigue siendo muy elevada".
El Banco de España y la OCDE han mejorado sus previsiones económicas para España, en especial el club de países industrializados. Estima que la economía española crecerá un 6,8% este año y un 6,3% el próximo. Esto es casi un punto y tres décimas más que lo que vaticinaba en junio. Sería la que más crecería de entre las 'grandes' de nuestro entorno tras ser la que más retrocedió en 2020.
Esto se debe en parte a que la actividad en el segundo trimestre se recuperó mejor de lo esperado y ha seguido haciéndolo a ritmo similar durante el verano, del 2,7%, según el Banco de España. De ahí que el supervisor también haya revisado al alza sus previsiones aunque bastante menos que la OCDE. Una décima este año y el próximo de forma que el crecimiento de nuestro país rondaría el 6% y en 2023 se desinflaría al 2%.
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La OCDE mejora casi un punto nuestro crecimiento para este año, hasta el 6,8 %, y lo sitúa a la cabeza de las grandes economías. El regulador apunta a que se han relajado las restricciones, ha aumentado el consumo y se sigue recuperando empleo. También el Banco de España cree que la economía española crecerá ligeramente por encima de lo previsto en junio.
La economía en el tercer trimestre crece un 2,7 %, consolida la recuperación y empuja unas décimas el crecimiento total para este y los próximos años. Una mejora que también se refleja en la tasa de paro: casi medio punto menos por año, respecto a lo previsto en junio, hasta el 13,3 % en 2023, ya por debajo de la tasa prepandémica.
Más de un millón de personas no puede sacar dinero porque sus bancos ya no tienen sucursales en sus localidades. Los vecinos de pueblos de Castilla y León y Galicia son los más afectados. El Banco de España propone que se pueda sacar dinero en efectivo en Correos.
Informa Yolanda Rodríguez
