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Ucrania da por finalizado el rescate de cuerpos del avión malasio y pacta su traslado a Járkov

  • El traslado se realizará en un tren refrigerado que conserva los cadáveres
  • Un equipo de forenses de Holanda ya ha revisado los cuerpos en los vagones
  • Los prorrusos entregarán las cajas negras a técnicos malasios

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Un tren traslada los cuerpos de las víctimas del avión malasio derribado en el este de Ucrania
Un soldado prorruso se cubre la nariz junto a un vagón de tren en el que se apilan los cadáveres de las víctimas, mientras inspectores y forenses revisan los cuerpos en la estación de tren de Torez.

El Gobierno de Ucrania ha dado por finalizados los trabajos para rescatar los cuerpos del avión malasio derribado por un misil. Los cadáveres, según el pacto alcanzado con los rebeldes prorrusos, se trasladarán a la ciudad de Jarkov en un tren refrigerado que ya ha partido desde la zona cero de la tragedia.

Ese tren, que permanecía bloqueado en la localidad de Torez, alberga desde este domingo los restos de las víctimas del siniestro que, según los datos ofrecidos por el viceprimer ministro ucraniano, Vladímir Groisman, ascienden a 282 cadáveres, así como 87 fragmentos de otras 16 personas.

"Los trabajos de búsqueda de los cuerpos han terminado. Se puede constatar que se han encontrado 282 cuerpos y 87 fragmentos que pertenecen a 16 cadáveres de las víctimas", ha detallado el responsable de la investigación de la catástrofe en una rueda de prensa en Kiev.

Los vagones refrigerados de ese tren han sido visitados por el equipo de investigadores forenses de Holanda, acompañados por miembros de la OSCE y escoltados por milicianos prorrusos, que controlan la región donde cayó el Boeing 777 de Malysia Airlines. France Press ha relatado que los investigadores holandeses han accedido a los vagones con mascarilla, ya que, pese a que se supone que el convoy mantiene refrigerados los cuerpos, en la zona se aprecia un fuerte olor de cuerpos en descomposición.

Por su parte, el oficial rebelde prorruso, Sergei Kavtarazde, ha confirmado a las autoridades ucranianas que entregarán las cajas negras del avión siniestrado a expertos de Malasia.

Forenses holandeses examinan por primera vez a las víctimas del avión malasio en Ucrania

El tren ha partido esta madrugada desde de Donetsk, a donde debía haber llegado este domingo, hacia la vecina región de Járkov, en el sureste de Ucrania, donde se centralizarán las investigaciones de la tragedia: allí se procedería a la identificación de los cuerpos y acudirían los familiares de las 298 víctimas de la catástrofe.

"Todos los cuerpos de las víctimas se han guardado en dos vagones refrigerados y esperamos que a este tren se le permita salir hacia Járkov, que es el lugar que hemos acordado antes con las partes”, ha comentado el viceprimer ministro ucraniano en alusión a los rebeldes prorrusos.

Dificultades en la investigación y repatriación

En cualquier caso, la repatriación de los cadáveres y la investigación está plagada de dificultades motivadas por el conflicto ucraniano, ya que la región en la que fue derribado el avión malasio se encuentra bajo el control de los rebeldes prorrusos y eso ha obligado a alcanzar acuerdos entre todas las partes, al mismo tiempo que persisten los combates: este mismo lunes ha habido intercambio de disparos de artillería en la propia ciudad de Donetsk.

Esos obstáculos han motivado las protestas de las potencias occidentales, encabezadas por el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, quien ha acusado a los rebeldes prorrusos de ocultar pruebas y cadáveres y ha exigido que los investigadores internacionales tengan "inmediatamente pleno acceso".

También Alemania, que ha enviado a Ucrania a dos expertos para investigar el siniestro, ha calificado de "indignante" el trato dado a las víctimas por boca del portavoz del ministerio de Asuntos Exteriores, Martin Schäfer. Y el primer ministro holandés, Mark Rutte, ha exigido facilidades para poder repatriar los cadáveres, amenazando incluso con aplicar represalias a Rusia.

Casi dos tercios de las 298 víctimas del siniestro, 193 personas, eran ciudadanos holandeses, el país más afectado por la tragedia aérea, por lo que su Gobierno se ha implicado desde el primer momento en la investigación de los hechos.

Holanda, conmocionada por las víctimas del avión siniestrado

En este sentido, el primer ministro ucraniano, Arseni Yatseniuk, se ha mostrado dispuesto a entregar a Holanda los cuerpos para que se hagan las autopsias en ese país. Rutte considera que señalar a los autores del desastre podría retrasar el regreso de los restos e incluso reducir las posibilidades de que haya una investigación internacional exhaustiva e independiente, tal como Holanda quiere y está presionando para conseguir de la comunidad internacional.

Poroshenko ordena un alto el fuego

Por ello, el presidente de Ucrania, Petró Poroshenko, ha ordenado un alto el fuego en un radio de 40 kilómetros alrededor del lugar donde cayó el avión, el pequeño pueblo de Gravobo. "He dado la orden: los militares ucranianos no deben emprender operaciones ni abrir fuego en un radio de 40 kilómetros alrededor del lugar de la tragedia", ha dicho el mandatario ucraniano a los periodistas, tras visitar la embajada de Malasia en Kiev.

Sin embargo, no lejos de la zona cero de la tragedia, en Donetsk, las fuerzas gubernamentales y los rebeldes reanudaban este lunes las hostilidades intercambiando fuego de artillería, pese a las llamadas de ambas partes a establecer un alto el fuego para facilitar la investigación y la repatriación de los cuerpos.

Hay decenas de muertos en la ciudad, sobre todo civiles

"Hay decenas de muertos en la ciudad, sobre todo civiles. Los combates tienen lugar en todo el perímetro de la ciudad. La situación es muy complicada. La aviación bombardea también sobre la estación ferroviaria", ha dicho uno de los líderes de los sublevados, Andréi Purguín, en Donetsk.

Decenas de muertos en Donetsk

Las explosiones se oyen prácticamente en toda la ciudad desde primera hora de la mañana, según ha podido constatar la agencia Efe. "Las balas silbaban por encima de nuestras cabezas", relataba una mujer en la sede del Gobierno de la autoproclamada república popular de Donetsk.

Al parecer, los combates han estallado cuando varios tanques de las fuerzas gubernamentales han intentado acceder a la ciudad, lo que ha suscitado la respuesta de los milicianos prorrusos.

Los combates, en los que el Ejército ucraniano emplea tanques y piezas de artillería, han obligado a muchos de sus inquilinos de la zona a resguardarse en los refugios subterráneos habilitados por las autoridades locales.

La tensión es patente en las inmediaciones del edificio, que es vigilado por varias decenas de milicianos, mientras en la ciudad apenas se ve gente por las calles desde que los insurgentes impusieran el toque de queda.

El alcalde de Donetsk: "Tienen lugar acciones militares"

El alcalde de Donetsk, Alexandr Lukianchenko, ha recomendado a los ciudadanos residentes en las zonas afectadas por los bombardeos que no abandonen sus hogares bajo ninguna condición. "Tienen lugar acciones militares. También se ha cerrado la estación de autobuses Zapadni", señala la nota.

Además, informa de que se ha restringido el acceso por carretera en la zona y también el transporte por tren. "Según datos no confirmados, en la estación se ha declarado un incendio. Lo estamos comprobando", añade. El aeropuerto es desde hace semanas el frente bélico más cercano a Donetsk, donde los rebeldes han tenido que rendir varios bastiones desde el fin del alto el fuego el pasado 28 de junio.

Los hoteles de la ciudad están casi vacíos y sus únicos clientes son los reporteros que han viajado a la zona para informar sobre la catástrofe del avión malasio, con los cuerpos recuperados a la espera de ser trasladados, precisamente, a Donetsk.

Los prorrusos entregan tres ciudades

Mientras los combates siguen en Donetsk, los separatistas no han resistido la ofensiva del Ejército ucraniano y han rendido tres ciudades en el este de Ucrania que hasta ahora estaban en su poder: Rubézhnoe y Latúguino, en la región de Lugansk, y Dzerzhinsk, a unos 55 kilómetros al norte de Donetsk, capital de la región homónima.

La toma de Dzerzhinsk abre la puerta para una ofensiva sobre Górlovka, punto estratégico para cercar Donetsk desde el norte. Uno de los líderes de los insurgentes, Miroslav Rudenko, ha denunciado bombardeos de la aviación ucraniana sobre esa ciudad de más de 250.000 habitantes, a poco más de 40 kilómetros al norte de Donetsk.

"Górlovka está en manos de los milicianos, pero las fuerzas ucranianas no dejan de atacar desde el aire. Hay 30 tanques en los accesos a la ciudad y se combate junto a la estación ferroviaria", ha asegurado Rudenko a medios rusos.