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La junta militar de Tailandia levanta el toque de queda en todo el país

  • Permanecía impuesto desde que el Ejército tomó el poder en mayo
  • Decidió empezar a relajar las restricciones tras las quejas de los empresarios
  • El general indicó que se creará una asamblea legislativa y habrá reformas

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El jefe de la junta militar de Tailandia, el general Prayuth Chan-ocha.
El jefe de la junta militar de Tailandia, el general Prayuth Chan-ocha.

La junta militar que gobierna Tailandia ha levantado el toque de queda en todo el país tras permanecer impuesto desde que el Ejército tomó el poder en un golpe de estado el pasado 22 de mayo.

"Como la situación ha mejorado y no se han reportado incidentes que puedan llevar a la violencia (...) y con el fin de mejorar el turismo, el toque de queda es levantado en todas las provincias donde permanecía", ha señalado un comunicado del Consejo Nacional para la Paz y el Orden, como se conoce formalmente a la junta militar.

No se han reportado incidentes que puedan llevar a la violencia

El anuncio del fin de la medida fue emitido justo después de que el jefe del Ejército, el general Prayuth Chan-ocha, anunciara que los militares estaban "considerando" terminar con el toque de queda durante el discurso semanal en el que militar se dirige a sus conciudadanos.

La prohibición de circular en las calles -entre medianoche y las cuatro de la madrugada- había sido levantada previamente en más de una veintena de provincias, pero seguía vigente en el resto del país, incluida la capital, Bangkok.

El toque de queda causa daños al turismo

La junta militar decidió empezar a relajar las restricciones hace más de una semana tras las quejas de los empresarios por los daños que el toque de queda causa al turismo, que supone el 7,3% del PIB del país.

Según la Asociación de Agencias de Viajes de Asia Pacífico hubo unas 5.000 cancelaciones de visitas a Tailandia al día siguiente del golpe de Estado, que ha llevado a 62 países a emitir alertas a sus turistas, 19 de ellas -incluida España- desaconsejando el viaje.

Por su parte, Prayuth pidió este viernes a los tailandeses, en una intervención de casi una hora de duración, "más tiempo" para acometer las reformas necesarias que solventen "los muchos problemas" que tiene el país.

Crearán una asamblea legislativa

El general indicó que antes del mes de septiembre se creará una asamblea legislativa y para octubre debería estar conformado el futuro Gabinete que acometa un proceso de reformas políticas, económicas y sociales en Tailandia.

Prayuth reiteró el plan en tres fases previsto por los militares, que prevé unos primeros tres meses para la "reconciliación" y la redacción de una constitución provisional, y un período de reformas políticas de al menos un año antes de concluir con la convocatoria de elecciones.

Los militares justifican el golpe como necesario para "defender" la democracia de la corrupción y la "dictadura parlamentaria" del Gobierno.

Los manifestantes reclaman la reforma del sistema político

El plan de los militares, que no han fijado ninguna fecha para la convocatoria de elecciones, coincide con las demandas de los manifestantes que desde octubre y durante seis meses asediaron al Gobierno depuesto con unas protestas callejeras que causaron 28 muertos.

Esos manifestantes, que cuentan con el apoyo de la elite burocrática y círculos monárquicos de Bangkok, reclamaban una reforma del sistema político que consideraban al servicio del ex primer ministro, Thaksin Shinawatra, depuesto en el anterior golpe militar en 2006.

Thaksin y sus plataformas políticas han ganado todas las elecciones desde 2001 gracias al apoyo de la población rural del norte del país y clases pobres de la capital que se beneficiaron de sus políticas populistas.

Los militares tailandeses han protagonizado 19 intentonas golpistas, de las que consumaron 12 con éxito, desde el fin de la monarquía absoluta en 1932.

La grave crisis política que vive el país comenzó en noviembre de 2013, cuando la oposición se lanzó a la calle para pedir la destitución de la primera ministra, Yingluck Shinawatra.