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El Ejército sirio mata a 15 civiles en la ciudad de Rastan, cercada desde el domingo

  • Ya hay 52 muertos y 200 secuestrados desde ese día
  • Los militares no han permitido la entrada de asistencia sanitaria

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Simpatizantes del presidente sirio, Bachar al Asad, corean consignas en contra de los opositores en Antalya (Turquía).
Simpatizantes del presidente sirio, Bachar al Asad, corean consignas en contra de los opositores en Antalya (Turquía).

El Ejército sirio ha matado este jueves a 15 civiles en Rastan, según varias organizaciones de Derechos Humanos.

Ammar Qurabi, jefe de la Organización de Derechos Humanos siria, y un abogado han dicho a la agencia Reuters que las 15 víctimas mortales han sido asesinadas con armas de fuego cuando las fuerzas de seguridad han vuelto a irrumpir en dicha ciudad, que tiene 60.000 habitantes y está situada al norte de Homs.

No entran ni medicamentos ni alimentos

El Ejército, según France Press, no ha permitido la entrada de alimentos ni medicamentos a la ciudad.

La organización Comités Locales de Coordinación ha denunciado también estas muertes en su página de Facebook.

Estos comités, que recopilan la información sobre las manifestaciones  y la actuación policial, han explicado que el Ejército sirio ha empleado  tanques y aeronaves en sus ataques que han afectado a las mezquitas de Abu  Baker y Abdul Rahman y la principal panificadora de la ciudad, situada  cerca de Homs.

Este grupo, que pudo identificar a  algunos muertos, ha informado de que algunas casas han sido bombardeadas y que familias enteras han muerto.

Otras mezquitas de la localidad también han sido blanco de los  ataques, ha dicho el grupo, que ha agregado que no es posible rescatar a los  heridos debido a la continuación de los bombardeos.

981 civiles muertos desde el 15 de marzo

52 civiles han muerto y 200 han sido secuestrados en Rastan desde que el Ejército entró en la ciudad.

Y, según el recuento del Observatorio Sirio de Derechos Humanos, un total de 981 civiles y 176 miembros del Ejército y de las fuerzas de seguridad sirias han perdido la vida desde que estallaron las protestas contra Al Asad, el pasado 15 de marzo.