La Fiscalía alerta del incremento del número de adolescentes que maltratan a sus padres

• En este tipo de infracciones no hay distinción de clases sociales
• Los fiscales creen que el internamiento no es la mejor solución
• Abogan por la mediación intergeneracional y la reeducación
• 9.382 jóvenes estuvieron en libertad vigilada en 2008

Aumentan las agresiones de los hijos adolescentes a sus padres

La Fiscalía General del Estado alerta de un "preocupante" incremento de casos de violencia doméstica ejercida por los hijos adolescentes sobre sus padres, asegurando que en estas infracciones no hay distinción de clases sociales y, en su mayoría, los jóvenes que las cometen son reincidentes.

Así se desprende del Informe Anual de 2008 de la Fiscalía, dado a conocer con motivo de la apertura del Año Judicial, que indica que en muchos de estos casos de violencia doméstica protagonizada por jóvenes se reacciona con la "máxima urgencia", promoviendo la adopción de medidas cautelares.

Se subraya una subida en 2008 de las diligencias preliminares totales de delitos cometidos por menores (114.776), casi un 6% respecto al año anterior  (108.720) aunque una parte puede achacarse al endurecimiento de las sanciones de tráfico.

Indican que en las agresiones a los progenitores no siempre es posible ni estaría justificado el internamiento, ya que esta medida puede acabar deteriorando, "de manera irreversible", la relación de afecto paternofilial, "contaminar" la personalidad del menor y agravar el problema que padece de fondo.

La mayoría de las Secciones de Menores coinciden en que el recurso más adecuado para estos supuestos es la convivencia con grupo educativo, así como de la mediación interfamiliar e intergeneracional.

Un ejemplo es el de la Sección de Menores de la Fiscalía Provincial de Valencia, que, con su 'escuela de padres' ha contribuido, según los fiscales, a la reeducación y reinserción de los menores y a su retorno pacífico a la convivencia familiar.

Más jóvenes en prisión

  

En cuanto a las medidas de internamiento convertidas en prisión, una vez que el infractor cumple la mayoría de edad, los fiscales alertan de que se confirma la tendencia al alza, pues durante 2008 han pasado a cumplirse 12 medidas transformadas, frente a las 10 de  2007 y las 11 de 2006.

La libertad vigilada es la medida más impuesta y con "tendencia en alza" contra los menores delincuentes en 2008, en un total de 9.382 ocasiones, frente a las 8.218 del año anterior.

Le siguen las prestaciones en beneficio de la comunidad (5.371), que descienden con respecto a 2007 (7.012).

A internamiento en régimen semiabierto estuvieron condenados 2.891 menores en 2008 frente a los 3.200 de 2007.

Se impuso la permanencia de fines de semana en centros en 1.462 ocasiones, un 33% menos que el año anterior; y se amonestaron a 1.306 menores en 2008, 300 menos que en 2007.

También se impuso el internamiento en régimen cerrado en 853 ocasiones, cien menos que en 2007; y el internamiento terapéutico fue  impuesto en 299 casos en 2008, una cifra similar a la del año anterior.

Faltan centros de menores

Otro aspecto que preocupa a los fiscales es la falta de centros adecuados y de una normativa precisa para atender a los niños con enfermedades psíquicas y con problemas conductuales, que hace que su tratamiento sea "particularmente problemático y complejo".

Denuncian deficiencias en centros tanto de protección de menores como de acogida de menores extranjeros no acompañados, que obligan a una "alerta constante" y a la "exigencia de un esfuerzo" en la mejora tanto del personal como de los medios, siendo éste uno de los objetivos para el ejercicio 2009.

Sobre el acoso escolar entre menores o bullying, el informe señala que las secciones de Menores autonómicas no han detectado a lo largo de 2008 un incremento del número de casos de agresiones físicas y psíquicas entre el alumnado, apuntando a la sensibilización de la opinión pública como una de las causas de contención de este tipo de  infracciones.

Trabajos en favor de la comunidad

Los fiscales, creen que, en la medida de lo posible, los jóvenes menores de edad que cometan incidentes o infracciones graves, deberán prestar un servicio que tenga conexión con el bien jurídico lesionado, para "fomentar durante la ejecución el proceso reflexivo del menor".

Así, ponen como ejemplo el de la Sección de Menores de la Fiscalía Provincial de Lérida que "no ha cesado en la búsqueda de recursos", con el objetivo de que se pueda disponer del mayor número posible.

La Fiscalía de Lérida colabora con entidades públicas y privadas sin ánimo de lucro como la Cruz Roja, Caritas, el Ayuntamiento de Lérida o la Generalitat de Cataluña que disponen de programas adecuados y que "se implican de manera positiva" en la 'reeducación' del menor.