La frontera colombo-venezolana lleva seis días cerrada, una medida ordenada por el presidente venezolano Nicolás Maduro tras un ataque de presuntos contrabandistas a militares, y la crisis entre los dos países se agrava, después de que Venezuela haya deportado a más de 1.000 colombianos residentes en el estado de Táchira.
El cierre de la frontera entre Venezuela y Colombia ha hecho que el número de deportados colombianos se acerca ya al millar. La decisión fue tomada por Nicolás Maduro el pasado viernes, después de un ataque a soldados venezolanos atribuido a grupos paramilitares.
La semana pasada, supimos que el opositor venezolano Daniel Ceballos pasaba a arresto domiciliario. Hoy, se ha publicado un vídeo en el que se le oye conversar con otro opositor, Leopoldo López, que sigue encarcelado.
Encontrar pañales es casi imposible, y cada vez más madres recurren al "trueque" a través de internet para intercambiarlos por otros productos.
Numerosos miembros de la oposición venezolana no han podido inscribirse como candidatos para las elecciones de diciembre. El proceso comenzó ayer y culminará el viernes. MIentras tanto, el Gobierno ha lanzado a relevantes figuras del chavismo, entre ellas Cilia Flores, esposa del presidente Nicolás Maduro.
En Venezuela el gobierno de Nicolás Maduro ha expropiado la planta de producción de la empresa de distribución de alimentos Polar, una de las más importantes del país. La planta, que ocupa toda una manzana de la capital, Caracas, será derribada y en su lugar, según ha anunciado el gobierno, se construirán viviendas populares.
En la cumbre de la ONU en Madrid contra el terrorismo yihadista, una cámara ha recogido el momento en el que el presidente del Gobierno y los ministros del Interior y Exteriores conversaban sobre los ataques del presidente de Venezuela a Rajoy, a quien Maduro ha llamado sicario.
Las relaciones diplomáticas entre Madrid y Caracas vuelven a tensarse. Todo ha sido por una nueva salida de tono de Nicolás Maduro, en la que llamaba "sicario del pueblo" a Mariano Rajoy. El Gobierno español ha convocado al embajador de Venezuela para trasladarle su rechazo y malestar por lo que considera "inaceptables insultos". Esta es la segunda vez que el Ejecutivo toma esta medida en menos de tres meses (28/07/15).
