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Ante la saturación de la atención primaria en la Comunidad de Madrid los responsables políticos hablan de falta de médicos para contratar. Los profesionales sanitarios aseguran que las plazas de especialistas no son suficientes y que las condiciones de contratación de los facultativos son muchas veces precarias.

Esto último ha forzado a muchos médicos y enfermeros a abandonar el sistema nacional de salud en busca de una nueva oportunidad fuera.

La portavoz del Gobierno, la socialista María Jesús Montero, ha confirmado este martes que el PSOE "no será convocante" de las manifestaciones contra las restricciones del Ejecutivo de la Comunidad de Madrid para frenar la pandemia de coronavirus.

En este sentido, ha explicado que el Gobierno "no va a entrar en esa cuestión" y que sigue apostando por el "llamamiento a la unidad" que hizo el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, tras su reunión con la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.

Montero se ha alejado de la postura de su socio de Gobierno, Unidas Podemos, que sí que ha llamado a la movilización.

Mucha gente se pregunta estos días si faltan médicos y enfermeras para reforzar las plantillas de los hospitales y centros de salud, ante el debate abierto por la presidenta de la Comunidad de Madrid Isabel Díaz Ayuso. Los sanitarios denuncian que los recortes de los últimos años y la precariedad laboral han obligado a muchos a buscar oportunidades fuera de nuestro país. Además insisten en que hacen falta plazas MIR para formar a más profesionales.

España es el séptimo país en número de médicos por cada mil habitantes de la OCDE, pero hay un insuficiente número de puestos de trabajo para ellos. Desde la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública, denuncian que se ofrecen contratos cortos y precarios, que obligan a los médicos a emigrar. En 2019 el consejo general de Colegios de Médicos emitió 4.100 certificados de idioneidad, un 19% más que el año anterior.

También faltan enfermeras y enfermeros, principalmente en Atención Primaria. Si miramos las listas del paro de agosto, 141.400 sanitarios buscan empleo.

El nuevo proyecto de Elon Musk, fundador de Tesla, que pretende conectar el cerebro a una computadora ha puesto sobre la mesa de la opinión pública, a ojos de Rafael Yuste, neurobiólogo español afincado en Nueva York e ideólogo de proyecto BRAIN, la necesidad de establecer reglas éticas para que cuando llegue esta revolución “nos pille preparados”. Este tipo de tecnologías puede suponer una revolución para tratar enfermedades mentales, pero también conlleva grandes riesgos y revela un debate ético que debe afrontarse. Es necesario regular lo que Yuste llama los neuroderechos, “para proteger a la ciudadanía de los abusos potenciales de estas tecnologías, es decir, la lectura y escritura de nuestra propia mente”. Explica Yuste que su equipo de científicos ya ha hecho experimentos importantes relacionados con la conexión de la mente con la tecnología. En Las Mañanas de RNE con Íñigo Alfonso ha detallado que su equipo introdujo una imagen en el cerebro de un ratón y luego éste se comportó como si la hubiese visto antes. “Nos queda muchísimo por conocer del cerebro. Entenderlo es uno de los desafíos de la medicina y la ciencia llegará a hacerlo”, ha resumido.

Laboratorios de todo el mundo trabajan para encontraruna vacuna contra la COVID-19 y frenar la pandemia. El desarrollo de vacunas se caracteriza por un alto nivel de fracaso, aunque nunca antes la comunidad científica internacional había actuado de forma tan coordinada. La frenética carrera tiene ante sí untriple desafío: acortar al máximo los plazos de desarrollo de forma segura, el abastecimiento en todo el planeta y asegurar campañas de vacunación a nivel mundial. De los 150 proyectos reconocidos por la Organización Mundial de la Salud, 40 están ya en fase clínica, con ensayos humanos. En el caso de España, la decena de vacunas en desarrollo están todavía en fase preclínica. [Coronavirus: última hora en directo]

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, reivindica una "normativa clara y concisa" y "una ley orgánica para pandemias", porque asegura que no hay ordenanzas para hacer cumplir las cuarentenas por el coronavirus. En este sentido, explica que puede pasar que dos pueblos tengan leyes diferentes, por lo que considera necesario "leyes claras" para todos los ciudadanos.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha reconocido que por la "propia idiosincrasia" de la Comunidad de Madrid necesita un "plan especial" para hacer frente a la pandemia de coronavirus. Para ello, ha ofrecido a la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso,  "medios de rastreo adicionales, medios de desinfección, medios logísticos, medios sanitarios, medios de reforzamiento de la capacidad hospitalaria", así como apoyo legal y medios policiales, para la lucha contra el coronavirus, y en definitiva "todo lo que considere que necesita la Comunidad de Madrid para doblegar la curva".

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la presidenta de la Comunidad de Madrid han coincidido este lunes en reforzar su colaboración ante la lucha contra la pandemia de coronavirus.

Para ello, Sánchez ha explicado en rueda de prensa que se ha acordado la creación de un "Grupo COVID-19" integrado por ambas administraciones que se reunirá semanalmente con el objetivo coordinar y planificar las respuestas contra la pandemia y que contará con un portavoz técnico sanitario para atender las demandas informativas de los medios de comunicación y la ciudadanía y contará con el asesoramiento del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias y de los técnicos sanitarios de la Comunidad de Madrid.

Sánchez ha explicado que este grupo contará con dos unidades: una unidad territorial, en la que estará presente los ayuntamientos, y luna unidad técnica, con los Cuerpos y Fuerzas de seguridad del Estado y la UME. "Para revertir la situación, tenemos que reforzar el esfuerzo sanitario, reforzar los efectivos de rastreo y robustecer la atención primaria, que debe ser el primer dique de contención", ha afirmado.

El director del laboratorio de coronavirus del Centro Nacional de Biotecnología del CSIC, Luis Enjuanes, ha asegurado que la vacuna contra la COVID-19 en la que trabajan en su departamento será de administración intranasal, de una gran respuesta inmune y de larga duración, pero que no estará lista hasta finales del año que viene.

En declaraciones al Canal 24 Horas, ha explicado que es una vacuna "de nuevo diseño" y "que sigue los cánones tradicionales de las vacunas" y que estará derivada del propio virus. Por eso, ha afirmado que el desarrollo será más lento que en otras vacunas, por lo que no estará lista hasta finales del año que viene. Sin embargo, ha asegurado que al estar basada en el virus será "muy segura" y que desarrollará "una respuesta inmune de alto nivel y larga duración".