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El papa Francisco ha vuelto a denunciar los abusos sexuales a menores, muchos cometidos por clérigos, como "una de las plagas de nuestro tiempo" y los calificó de "crimen vil", en un discurso al cuerpo diplomático acreditado ante el Vaticano en el que también criticó la violencia contra la mujer.
"No puedo callar ante una de las plagas de nuestro tiempo, que por desgracia ha visto implicados también a varios miembros del clero.

"Desde hace muchos días, 49 personas salvadas en el mar Mediterráneo están a bordo de dos naves de ONG, en busca de un puerto seguro donde desembarcar. Hago un cordial llamamiento a los líderes europeos para que demuestren solidaridad concreta hacia estas personas", ha dicho el papa durante la oración del Ángelus este domingo. El pontífice se ha referido al barco Sea Watch 3, de la ONG homónima, que rescató a 32 inmigrantes hace 15 días, y al Profesor Albrecht Penck de Sea-Eye, que rescató a otros 17 inmigrantes el 29 de diciembre.

El papaFrancisco ha dirigido su tradicional bendición 'urbi et orbi' (a la ciudad y al mundo) desde la plaza de San Pedro en el Vaticano. Ha comenzado pidiendo que reine la fraternidad que nos une como seres humanos y vinculan a todos los pueblos y en esa línea se ha referido a los países que sufren las guerras, como Yemen o Siria, origen éste último de cientos de refugiados que sufren la dramática pérdida de vidas en el Mediterráneo.

El Papa Francisco ha proclamado santos este domingo en una ceremonia en la Plaza de San Pedro del Vaticano al papa Pablo VI, que defendió la democracia y ayudó indirectamente a los obispos españoles a participar en la Transición; al arzobispo salvadoreño Oscar Romero, que luchó contra la pobreza y la justicia social hasta que fue asesinado mientras oficiaba misa; y a la monja española Nazaria Ignacia March, que conoció a Bergoglio realizando su labor en las villas miseria de Buenos Aires. En total, la Iglesia Católica tiene desde ahora siete nuevos santos.

El Sínodo de los Obispos está tratando este martes en el Vaticano temas como el de la credibilidad de la jerarquía eclesiástica ante los jóvenes debido a las turbulencias internas de la Curia o los escándalos de los abusos sexuales. La castidad prematrimonial que requiere la Iglesia católica a las parejas, y si ello puede ser motivo de un alejamiento de la juventud, fue otro de los temas que también se han tratado. En rueda de prensa, el prefecto (director) de la Secretaria de Comunicación, Paolo Rufini, ha explicado que se abrió la reflexión sobre la castidad antes del matrimonio y cómo puede crear problemas a los jóvenes.

"Para respetar la castidad muchos jóvenes se casan pronto y sin un verdadero camino y entonces se crean divisiones, mientras que otros jóvenes no logran seguir su vida de pareja sin relaciones y entonces se alejan de la Iglesia", dijo Rufini sobre la intervención de un obispo, que "invitó a reflexionar" sobre el tema.

También se habló de la necesidad de que la Iglesia cambie su lenguaje para acercarse a los jóvenes, así como también hacer más atractivas las homilías.