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La Fiscalía rumana ve indicios de que Istvan Horvath, el amigo de Sergio Morate, ayudó al presunto asesino de las dos jóvenes de Cuenca a ocultarse en su huída de España. Ambos se han visto este lunes en la ciudad de Timisoara en un careo destinado a esclarecer el crimen, y se han declarado inocentes. Pero el juez no cree sus versiones (18/08/15).

Sergio Morate, sospechoso del doble asesinato de las jóvenes Marina Okarynska y Laura del Pozo, ha sido interrogado este lunes por la Fiscalía de Lugoj, en Rumanía, sobre la supuesta complicidad del ciudadano rumano que le refugió en su casa y con quien ha sido sometido a un careo. Durante el interrogatorio ha reconocido que su amigo no sabía nada de lo que pasó en Cuenca. Horvath asegura que no sabía que a quien acogía en su casa era un presunto asesino.

Sergio Morate, sospechoso del doble asesinato de las jóvenes Marina y Laura en Cuenca, ha sido sometido a un careo con Istvan Horvath, acusado de complicidad por alojarle en un apartamento en la localidad rumana de Lugoj, donde Morate fue detenido.

En el cuartel general de la policía en Timisoara nos recibe el Comisario Stoicanescu Dan,que  coordinó la detención de Sergio Morate con la policía española. El jueves , a la una de la tarde, le comunicaron que Morate estaba en Lúgos. Y le dijeron quién era. La operación la realizó este grupo de operaciones especiales. Estos hombres siguieron a Morate y a los dos rumanos pero no contaban con que al entrar al apartamento se encontrarían con la mujer de Istvan Hortvat, y con su hijo. Si se hubiesen resistido, habría sido  muy complicado, porque al haber otras personas no podíamos utilizar armas de fuego, confirma Shirvilinko Daniel, el jefe del grupo. Morate está custodiado en un barracón que está detrás de este complejo de la policía. Si todo va bien, Morate podría estar en España antes de que se cumplan los 15 días de prisión preventiva que dictó el juez.

Consternación y dolor en Cuenca tras aparecer en la noche del pasado miércoles los cuerpos sin vida de Marina y Laura, de 24 y 26 años, desaparecidas desde el 6 de agosto cuando se dirigían a casa del exnovio de una de ellas, Sergio Morate, que ha sido detenido en Rumanía como presunto autor del doble crimen. Un equipo de 'Informe Semanal' ha estado en Cuenca, donde ha seguido, junto a compañeros de trabajo y allegados de las víctimas, este suceso que ha acabado en tragedia. También analiza los hechos con Jorge Ramiro Pérez Suárez, profesor de criminología de la Universidad Europea de Madrid.

El amigo rumano de Sergio Morate ha hablado y ha dicho que el sospechoso de los asesinatos le confesó que había matado a su ex novia pero que él no le creyó y que por eso no advirtió a la policía. Un dato que podría corroborar la autoría de los asesinatos. Mientras en Cuenca intentan volver a la normalidad tras los días de conmoción que han vivido. Hoy la ciudad está en su tercer día de luto oficial.  

Sergio Morate, el presunto asesino de dos jóvenes de Cuenca, su exnovia Marina y su amiga Laura, se ha declarado 'no culpable' ante el juez de Timisoara, en Rumanía, que se encarga de tramitar la orden de traslado que solicita España. Estas son las imágenes de su salida tras declarar en los juzgados.

El 016 es el teléfono gratuito de atención a víctimas de violencia de género, no deja rastro en la factura.

Segundo día de luto oficial en Cuenca por la muerte de Marina y Laura. El funeral de Laura del Hoyo ha empezado a las 11:15 en la Iglesia de San Fernando y quince minutos más tarde comenzaba en la Parroquia de San Esteban, el de Marina Okarynska, la expareja de su presunto asesino. Los funerales se han celebrado en iglesias distintas aunque el dolor es para todos el mismo. El apoyo a las familias ha estado presente en todo momento. Entre los asistentes, tristeza e indignación. Los cuerpos de las dos jóvenes reposan ya en el cementerio de Cuenca. 

Sergio Morate, el presunto asesino de las dos jóvenes de Cuenca, estaba oculto en estos apartamentos de la localidad de Lugos en Rumanía en casa de un amigo al que conoció en la cárcel de Cuencas. Fuentes próximas a la investigación han confirmado a Televisión Española que los agentes pudieron rastrear su teléfono móvil, en el momento que lo encendió  seguían también la pista de sus contactos con presos rumanos. Todo conducía a Lugós en la frontera con Hungría. Para llegar hasta allí Morate tuvo que recorrer casi 3 mil kilómetros en un seat ibiza verde, también clave en la investigación, se dirigió por el sur de Europa hacia Rumanía donde ahora espera la extradición.