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Una coproducción de 2015 de Canadá, Francia, Armenia y Bélgica, dirigida por Fabienne Lips-Dumas y producida por Seppia Films/Arte/ Domino Production/ RTBF. A través de los testimonios de inspectores de armas, funcionarios de gobierno y de los que han sufrido el horror del ataque de las armas químicas, vemos los esfuerzos por controlar su utilización y por destruir las armas tóxicas que fueron abandonadas en los campos de batalla.

Documental canadiense de 2012, dirigido por Rob King y producido por 4 Square Entertainment. Las armas biológicas tienen una larga historia. Desde el lanzamiento en la II Guerra Mundial de bombas con bacterias infecciosas hasta la guerra del Golfo, en la que Irak estaba listo para disparar misiles con ojivas germinales, son una amenaza por su posible uso tanto por los Estados en guerra como por grupos terroristas o individuos en solitario.

La Organización para la Prohibición de las Armas Químicas inicia, este lunes en La Haya, su reunión anual, en la que debate sobre el uso en la guerra de Siria. Año y medio después de que el régimen de Bachar Al Assda culminara la entrega de su arsenal químico declarado, lo cierto es que en ese conflicto se sigue utilizando gas tóxico como arma. Hablamos con Roberto Martínez Álvarez, director del departamento de Química Orgánica en la Universidad Complutense y miembro del Comité Científico Consultor de la Organización para la Prohibición de Armas Químicas.

El Estado Islámico habría usado gas mostaza contra grupos rivales en Alepo en el norte de Siria. Un informe de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas que será entregado a la ONU constata por primera vez el disparo de armas químicas desde posiciones del grupo terrorista. Entre tanto el gobierno sirio sigue masacrando a 15 kilómetros de Damasco y ha sufrido reveses en el centro del país.

Un equipo de TVE ha entrado en el Cape Ray, un carguero acorazado de la marina de Estados Unidos que espera en Rota (Cádiz) la orden de zarpar para recibir y destruir los materiales más peligrosos del arsenal de armas químicas del régimen sirio. Se hará en alta mar en una localización no revelada del Mediterráneo.

Los gases tóxicos se emplearon por primera vez de forma masiva en la primera guerra mundial, hace casi un siglo. Ypres, en Bélgica, ha quedado para la historia como el símbolo de ese horror.