Todo lo que no sabías sobre la nobleza española

• Así otorgaba títulos Isabel II
• ¿Qué privilegios tienen los nobles en la actualidad?

Los aristócratas practicaban los "cuadros vivos" en sus fiestas. EFE

A lo largo del tiempo hemos ido conociendo, y estudiando, la historia de España y de la familia real. A grandes rasgos sabemos cómo vivían pero, ¿qué hay de todos aquellos que orbitaban alrededor de los reyes? ¿Qué hay de los que se aprovechaban de su cercanía para recoger poder? Estamos hablando de la nobleza y en El gallo que no cesa conoceremos las curiosidades de este grupo de personas que, para bien o para mal, han marcado la historia de nuestro país.

El gallo que no cesa - Curiosidades de la nobleza española con Ana Fernández Pardo - Escuchar ahora

Ana Fernández Pardo escribió Eso no estaba en mi libro de historia de la nobleza española, un libro en el que explica la importancia de la nobleza a lo largo de la historia deteniéndose también en lo llamativo de su estilo de vida. Todos hemos oído hablar de duques, marqueses o condes pero, ¿cómo consiguieron esos títulos? ¿Qué privilegios tenían? ¿Aún los tienen?

¿Qué nos dice cada título?

En un principio, cada título responde a la posesión de un territorio y dependiendo de sus características se empleaba uno u otro. "Marqués viene de marca, conde de los condados, duque de los ducados. Es decir, cada territorio está asociado a un título concreto y además tienen distinta categoría. Duque es más que marqués, marqués es más que conde. Y el rey decidía si ampliaban, si un Conde era ascendido a Duque o si se le otorgaba la grandeza", explica la escritora.

Ana también explica que no siempre ha sido así, ya que Isabel II impuso sus propias reglas del juego. "Me parece muy graciosa a la hora de otorgar títulos. No daba títulos asociados a un territorio sino que era de repente, Marqués del Real Acierto. Te nombro marqués porque has acertado el sexo de mi hijo, el título al ginecólogo".

Carlos I y su elevación de la nobleza

La nobleza española, tal y como cuenta Ana, cobra fuerza a partir de la Reconquista pero sufre su gran cambio en el siglo XV, con la creación de la grandeza inmemorial bajo el reinado de Carlos I. "Decide premiar a los 25 grandes que han estado más cerca del rey y les da esa categoría de primera clase, que quiere decir que prácticamente, por resumir, es como si se convirtieran en familia del reino. Es decir, no tenéis que estar cubiertos delante de mí, os puedo llamar como parientes, tenéis acceso constante a la corona y además esos títulos son totalmente intocables". Esto incluía, por ejemplo, que ningún monarca posterior podría quitar el título.

Costumbres e historias muy nobles

Ana cuenta que le parece más interesante en cierta manera la nobleza que la realeza porque "la realeza es acotada pero el concepto de la nobleza es infinito". Hay historias realmente curiosas e interesantes en todo lo que refiere a la nobleza. La aristocracia solía posicionarse e intentaba hacerlo "en el lado bueno de la historia" y ante cualquier conflicto elegían bando pero si se posicionaban del lado perdedor, habría consecuencias. Este ejercicio, define Ana, "parece de telenovela".

La historia del Conde de Ribadeo, Rodrigo de Villandrando, es digna de contar. «Él ayudó a Juan II de Castilla y entonces le dijo el rey: "¿Qué quieres a cambio?" Yo quiero todos los días de la Epifanía de todos los años, comer en la mesa de su majestad y quedarme de recuerdo la ropa que lleve su majestad. Entonces dice el rey: "¡Por los siglos de los siglos!". Y se mantiene durante muchos años», cuenta Ana y añade que la casa de Alba posee el Condado de Ribadeo actualmente y Juan Carlos I cedió la vestimenta de una epifanía al Palacio de Liria.

Alfonso XIII también tiene su historia y no solo como rey, también como noble ya que era el duque de Toledo. Utilizaba el título como seudónimo, «él decía al menos que el rey no tenía amantes, pero que el duque de Toledo pues igual sí. Y de hecho muchas veces Victoria Eugenia, su mujer, consciente de la situación, decía: "la duquesa de Toledo" hablando de sí misma».

Las costumbres de los nobles estaban muy ligadas a su estatus y a su nivel económico. Una de las cosas que más les gustaba era organizar bailes o fiestas de disfraces en las que poder recrear cuadros. «Lo llamaban cuadros vivos, entonces se vestían como los cuadros de época. De repente representaban "La rendición de Breda". Representaban cuadros antiguos y vestidos como sus antepasados. Y además con la ropa real, porque estamos hablando de que los nobles, efectivamente, tienen las armaduras originales y las joyas originales. Y luego se retrataba entonces era el pasatiempo de la fiesta».

Así es la nobleza actual

Con motivo de la celebración de sus dos bodas, Carlos II sacó a la venta varios títulos nobiliarios que lo ayudaron a costear la celebración. Así fue la manera en que muchas familias llegaron a la nobleza, a base de talonario. A día de hoy es algo simbólico pero se trata de una propiedad que sigue honrando a los antepasados y se puede heredar. La pregunta es: ¿qué privilegios tienen los nobles en la actualidad?

Lo cierto es que ninguno. Ya no hay acercamiento a la corona y en el año 1984 también se eliminó el pasaporte diplomático del que gozaban.