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La UE y Mercosur alcanzan un "histórico" acuerdo comercial tras veinte años de negociación

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La UE y Mercosur alcanzan un acuerdo comercial tras 20 años de negociaciones

La Unión Europea y los países del Mercosur (Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay) han alcanzado este viernes un acuerdo de libre comercio tras 20 años de negociación, ha informado la secretaria de Comercio Exterior argentina, Marisa Bircher y ha confirmado el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker en sus perfiles de Twitter.

Estamos enviando una señal potente de que apoyamos el comercio basado en normas

"¡Hoy logramos un acuerdo histórico entre Mercosur y la UE! Un hito que culmina con un proceso negociador de 20 años y complementa las acciones que venimos trabajando para lograr un mayor y mejor acceso al mundo", ha escrito en la red social la política.

Los dos bloques empezaron a negociar en el 2000 y redoblaron los esfuerzos para consensuar un pacto tras la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, que enfrió las relaciones comerciales entre el club comunitario y Estados Unidos. Sin embargo, la preocupación europea sobre el encarecimiento de la importación de carne de vacuno y las dudas del Mercosur para abrir ciertos sectores, como el automovilístico, habían retrasado la unanimidad alcanzada en tras tres jornadas de intensos contactos.

La UE se ahorrará 4.000 millones de euros anuales, según la CE

Precisamente, Juncker ha destacado que "en medio de las tensiones comerciales internacionales, estamos enviando una señal potente de que apoyamos el comercio basado en normas", en referencia a los acuerdos comerciales recientemente pactados con Canadá, Japón y México.

Además, el presidente de la CE ha destacado que el texto contiene los "mayores estándares" de seguridad alimentaria y protección de los consumidores y ha asegurado que ahorrará a las empresas europeas 4.000 millones de euros al año en aranceles, lo que lo convierte en el mayor que la UE ha cerrado en su historia.

Por su parte, fuentes de Moncloa han destacado el papel del presidente español, Pedro sánchez, quien en el pasado Consejo Europeo impulsó el envío de una carta firmada por siete líderes europeos a Juncker para que se culminaran las negociaciones con el acuerdo.

Mercosur pide "compromiso" con el multiculturalismo

El Mercosur ha destacado el momento "histórico" alcanzado este viernes y ha insistido en que se debe mostrar "compromiso" con la integración y el multiculturalismo.

"Para el Mercosur, este es un momento histórico, no sólo por los momentos que estamos viviendo en el mundo en los que debemos mostrar compromiso con la integración, multilateralismo, apertura de los mercados, libre comercio, comercio con normas", ha declarado el ministro argentino de Relaciones Exteriores, Jorge Faurie, cuyo país ocupa la presidencia del Mercosur, en una rueda de prensa en Bruselas.

Faurie ha añadido que el acuerdo servirá para que los líderes que participan en el G20 vean "dos grupos de países muy capaces, primero, de superar las diferencias, de hacerse entender en lo que necesitamos y de intentar trabajar juntos en beneficio de toda la gente de ambos lados".

Por su parte, el Gobierno argentino ha celebrado el acuerdo, que ha calificado como "uno de los más importantes de la historia a nivel mundial" y que cubrirá a 780 millones de personas. El Ejecutivo liderado por Mauricio Macri ha emitido un comunicado en el que indica que se trata de un "hito para la inserción internacional" de Argentina ya que aumentará las exportaciones de las economías regionales y consolida la participación de las empresas en cadenas globales.

En la misma línea se ha expresado el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, que ha calificado el acuerdo de "histórico y uno de los más importantes de la historia" de su país en su cuenta de Twitter.

No obstante, la aprobación del acuerdo no será una fácil tarea: países como Francia temen que se encarezca el precio de las importaciones de vacuno, mientras que los grupos medioambientales, que ganaron presencia en el Parlamento Europeo tras las elecciones europeas, sostienen que el acuerdo puede acelerar la deforestación. Tanto los países de la UE como el Parlamento Europeo deben ratificar el acuerdo para que se implemente.