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Bruselas amenaza a Dinamarca con abrirle un expediente si recupera las fronteras interiores

  • Barroso adelanta al primer ministro danés las posibles violaciones de Schengen
  • Dinamarca asegura que seguirá con la medida y que todo es un "malentendido"
  • Rubalcaba ve como una "hipocresía intolerable" la actitud de algunos países

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La Comisión Europea ha endurecido este viernes el lenguaje contra Dinamarca después de estudiar su decisión de restablecer las fronteras interiores en su territorio pese a formar parte del espacio Schengen de libre circulación de personas y ha amenazado con abrir un proceso de infracción por este motivo.

"La decisión de Dinamarca de restablecer los controle aduaneros permanentes en sus fronteras nacionales es un problema y la Comisión está dispuesta, si es necesario, a utilizar los medios a su disposición para hacer respetar las leyes europeas", ha advertido la comisaria de Interior, Cecilia Malmstrom.

El proceso de infracción y la denuncia ante el Tribunal Europeo de Justicia son las dos armas que puede utilizar la Comisión en su papel de guardián de los tratados de la UE.

Dinarmarca habla de malentendido

Malmstrom ha pedido específicamente al gobierno danés que evite "tomar medidas unilaterales".

Por su parte, Dinamarca ha respondido que restablecerá el control de fronteras, según ha subrayado el ministro de Impuestos, Peter Christensen, quien considera que las críticas de la Comisión Europea (CE) por esa medida unilateral de un país firmante del Tratado de Schengen se deben a un "malentendido".

"Haremos un control de aduanas como los suecos han tenido durante años, y eso está permitido dentro de las reglas de Schengen", ha declarado Christensen, defendiendo el derecho de los estados nacionales a asegurarse de que se respetan sus reglas fiscales y tributarias.

Barroso habla con Rasmussen

Este intercambio llega después de el presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, mostrase"dudas importantes" en una conversación telefónica con el primer ministro danés, Lars Lokke Rasmussen, sobre la legalidad de la medida.

Barroso le ha transmitido su preocupación y le ha adelantado que le enviará una carta explicando las dudas de Bruselas respecto a la compatibilidad de las medidas con el mercado interior y los beneficios inherentes de un mercado interior sin fronteras, así como con la libre circulación de personas dentro de la UE.

En una evaluación jurídica preliminar, los servicios de la Comisión apuntan que los controles que prevé Dinamarca "parecen poner en cuestión" las normas comunitarias y de ser aplicados de manera permanente -tal y como se ha anunciado-"violarían las obligaciones" danesas para con el derecho comunitario, según ha explicado en rueda de prensa una portavoz comunitaria, Pía Ahrenkilde.

El Ejecutivo comunitario ha sido informado por las propias autoridades danesas del acuerdo político entre Gobierno y la ultraderecha para reintroducir los controles aduaneros en sus fronteras.

La Comisión toma nota

Dinamarca argumenta que estos controles son necesarios para luchar contra la criminalidad y la evasión fiscal, entre otras razones, y la Comisión "ha tomado nota" de estos argumentos, pero continuará su análisis para verificar "en los próximos días" si son compatibles con el Tratado de Schengen para una Europa sin fronteras y con el derecho comunitario, ha explicado Ahrenkilde.

Otros portavoces comunitarios han precisado que el acuerdo Schengen prevé la introducción "temporal" de las fronteras en sólo dos casos excepcionales, esto es, por razones de orden público o por seguridad nacional.

En cuanto a la libertad de bienes, sin embargo, la legislación comunitaria y los principios del mercado interior no prevén esta situación y "sólo sería posible" realizar controles "dentro del propio país" y "no pueden centrarse en la frontera".

En la conversación telefónica, el primer ministro Rasmussen ha asegurado a Barroso que las medidas son acordes con lo que marca la Unión Europea y que cualquier medida adicional que se tomara estará en línea con la legislación comunitaria, según ha señalado Ahrenkilde.

El jueves, el ministro de Integración danés, Soren Pind, ya defendió en una reunión en Bruselas con sus colegas europeos que el refuerzo de los controles se ajusta plenamente a las normas de la UE y se aplica ya en otros Estados miembros, como Suecia.

Preguntado por el caso sueco, el portavoz comunitario de Aduanas, David Boubli, ha dicho que "no consta" tales controles sistemáticos.

Los ministros de Interior de la UE aceptaron el jueves las explicaciones de Dinamarca y evitaron criticar su decisión de reintroducir los controles fronterizos permanentes con Alemania y Suecia, atribuyendo la polémica a un "malentendido".

Rubalcaba: La reforma de Schengen, "hipocresía intolerable"

En esa reunión la mayoría de países de la UE apoyó la propuesta de revisión del Tratado de Schengen para reinstaurar las fronteras interiores en casos excepcionales enviada por la comisión a petición de Francia e Italia, a la que España ha mostrado sus reticencias.

El ministro del Interior español, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha verbalizado la posición española sobre la reforma del espacio Schengen al insistir en que es un "ejercicio de hipocresía intolerable" el que algunos gobierno "aplaudan por la mañana las reformas decmoracticas en el norte de África y por las tardes se olviden de las consencuencias".

En rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, Rubalcaba ha asegurado que España "no está dispuesta a renunciar de ninguna manera al espacio Schengen para restringir a la libertad de los extranjeros" y ha advertido de que ésta es la "posición mayoritaria de los miembros de la UE".

"Somos partidarios de que Italia y Grecias, dos de los países que más flujo de inmigrantes del norte de África, tengan ayudas para asistir, porque Europa siempre ha sido una tierra de asilio y refugio", ha defendido el titular de Interior.