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Un 'perro de chabola' con éxito, pero no en la India

  • Las críticas de la India se han cebado en la exhibición de la pobreza del país
  • Han llegado a demandar por titularla como "perro de chabola"
  • También se denuncia el sueldo cobrado por los actores indios de los suburbios
  • Varias ONGs indias han salido en defensa de la película y de sus fines
  • Más información en el Especial Oscar 2009

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Jamal (Dev Patel) y Prem Kumar (Anil Kapoor) durante un momento de la película '¿Quién quiere ser millonario?'.
Jamal (Dev Patel) y Prem Kumar (Anil Kapoor) durante un momento de la película '¿Quién quiere ser millonario?'.

Es la gran favorita para los Oscar después de haber arrasado a su paso por los Globos de Oro -cuatro premios, entre ellos mejor película y mejor director- y en los Bafta británicos -siete premios, también el de película y director-. Slumdog Millionarie (¿Quién quiere ser millonario?) ha arrasado también en la taquilla, con más de 100 millones de dólares (78 millones de euros) recaudados al poco de su estreno y amortizando con creces su presupuesto de 15 millones (11 millones de euros).

Pero el 'perro de chabola millonario' (en su traducción literal del inglés) no ha tenido el mismo éxito en el país en el que está rodada e inspirada, la India. Con 2,2 millones de dólares recaudados en su primer fin de semana en cartel -muy lejos de los multimillonarios ingresos de la meca de Bollywood-, con duras críticas e, incluso, sabotajes a cines. Así ha sido recibida la película de Danny Boyle.

No. La historia del chico pobre de los suburbios de Bombay que gana 20 millones de rupias -unos 300.000 euros- en el concurso "¿Quién quiere ser millonario?" no ha sido bien recibida en la India, donde las críticas se han cebado en el 'exhibicionismo' de la extrema pobreza que brinda la película. Exhibicionismo que para muchos, incluso dentro de la India, no es más que la muestra de la cruda realidad de un país con dos caras: la de un crecimiento económico impresionante que contrasta con los más tozudos datos de la ONU, que dicen que es el país con mayor número de niños menores de cinco años desnutridos del mundo, con 57 millones, además de tener los mayores campamentos de chabolas.

El título, ¿acertado?

Irremediablemente unida con la anterior, otra de las controversias que ha generado Slumdog Millonaire en la India ha sido su título, por llamar al protagonista 'perro de chabola'.

El propio Boyle se ha defendido explicando que se trata de una mezcla de palabras entre 'underdog' (desamparado en castellano) y 'slum' (suburbio), ya que es de allí de donde proviene el protagonista, Jamal Malik.

Precisamente por este título y por esa forma de mostrar los suburbios de Bombay, el Comité de Defensa de los Chabolistas presentó una querella por difamación en la India contra el compositor de la banda sonora, A.R. Rahman, y el actor Anil Kapoor -que hace el papel en el film de nuestro Carlos Sobera-, ambos indios. La demanda critica que se llama "perros de barriada" a los indios y a los chabolistas y reclama que se proteja el honor y el respeto de los millones de chabolistas de la India.

También hubo quejas, vía blog de internet, del popular actor indio Amitabh Bachchan -del que el pequeño Jamal es fan en el film-, que lamentaba que se proyectara una imagen de la India "como una nación del Tercer Mundo sucia". No obstante, Bachchan dijo días después que sus palabras estaban sacadas de contexto y que, incluso, lo había aclarado con Boyle.

Toda esta polémica, ampliamente difundida en los medios indios -aunque muchos se han posicionado a favor de la película- ha acabado por encender los ánimos y en el estreno en la India se han producido protestas de chabolistas, con insultos al elenco de la película y golpes a sus fotografías. No obstante, las protestas no han sido multitudinarias.

Apoyo de ONGs

Pero estas críticas y denuncias también han sido rebatidas desde la propia India, donde varias ONGs han aplaudido la cinta. Como Plan India, que considera "maravillosa" la película por mostrar "asuntos relacionados con la protección de los niños de la calle"; o de otras tan poco sospechosas como Save The Children, que espera que con los Oscars "el mundo se entere de la realidad fría de los 120 millones de niños que viven en la pobreza en la India y colaboren en luchar contra esta injusticia".

Según declaraciones de Boyle en diversas entrevistas, aunque aclara que Slumdog Millonarie es una película y no un documental, trató de captar "lo máximo" de Bombay, una ciudad en la que conviven puerta con puerta los mayores lujos del mundo desarrollado con los mayores campos de chabolas.

Esta visión es aplaudida desde las páginas de medios indios como Business Standard, que alaba que se muestre sin censura lo que a un director indio -también ha habido duras críticas a la nacionalidad británica de Boyle- de Bollywood no le habría interesado mostrar. O desde el Hindustan Times, que pone de relieve el cambio de política del propio Gobierno indio que, lejos de censurar el film -como ha hecho históricamente con Steven Spielberg o Richard Attenborough-, lo ha tolerado tal cual; lo que entiende el diario, como una forma de nueva madurez de la India, "que sabe que en Bombay hay más cosas que la mugre de las chabolas; pero no negamos que esa suciedad y esa pobreza existen".

El sueldo de los actores

Otro de los puntos de polémica en el país asiático se ha centrado en el supuesto escaso salario que habrían cobrado los pequeños actores que interpretan a los protagonistas en su niñez, que son realmente, en el caso de dos de ellos, niños del suburbio de Dharavi, en el que está ambientado la película y que es uno de los mayores del mundo.

Según los críticos, los niños no habrían recibido más de tres veces el salario medio de la India. Según el británico Daily Telegraph, 730 dólares (566 euros) en el caso de Rubina Ali -la niña que interpreta el personaje de Latika con 8 años- y de 2.475 dólares (1.900 euros) en el caso de Azharuddin Ismail -el niño que interpreta al Salim de 8 años-, mientras que el sueldo medio de una familia al mes es de unas 15.000 rupias (unos 90 euros). El supuesto sueldo de Ayush Mahesh Khedekar, que interpreta al niño Jamal y procede de una familia media india, no ha trascendido.

El propio Boyle y los productores de la película niegan estas acusaciones y aseguran que fueron bien pagados, aunque se niegan a revelar la cantidad para evitar problemas a los niños. Añaden que han asegurado a los niños una buena educación y recibirán más dinero al acabar los estudios.

Para Rubina y Azharuddin, que han empezado a ir al colegio gracias a esto, todo son palabras de elogio para el "tío Danny" (Boyle). Éste, ante las acusaciones de "ser los vendedores ambulantes de la pobreza del país", ha querido dejar claro que se sienten bien ayudando a los dos niños, pero que "finalmente, la India deberá tomar nota de sus propios problemas".

Además, parte de la taquilla de la película será donada al Fondo para el Bienestar de los barrios de chabolas de Bombay, según el productor, Christian Colson.

En esta línea, otro asunto para la polémica ha sido la presencia de Rubina Ali y Azharuddin Ismail en la gala de los Oscar. Ambos volarán finalmente a Los Ángeles para asistir a la ceremonia, aunque han estado a punto de no ir porque los padres se oponían al viaje y pedían al productor de la cinta que les entregara el dinero de los billetes de avión para aliviar su pobreza.