En Jaén, la Policía está analizando las cámaras cercanas al parque donde aparecieron muertas dos adolescentes la madrugada del pasado sábado, y está rastreando también sus móviles. Buscan pistas para esclarecer qué pasó, aunque la principal hipótesis es el suicido. Este martes, los padres de las dos menores han declarado en comisaría.
Jaén sigue conmocionada por el hallazgo, este fin de semana, de dos adolescentes fallecidas en un parque de la ciudad. Dos institutos por los que había pasado una de las jóvenes tenían abierto un protocolo de autolesiones y aunque se apunta al suicidio como principal hipótesis, siguen abiertas todas las líneas de investigación.
Fede Cardelús y Laura Cuesta Cano, profesora de la UCJC y divulgadora en bienestar digital, analizan los últimos informes de UNICEF, Fundación ANAR y FAD, sobre violencia de género entre adolescentes, en los entornos digitales.
El director ejecutivo de Unicef en España, José María Vera, defiende un abordaje transversal para garantizar un uso seguro de la tecnología por parte de los jóvenes: "Se están enfrentando a una tecnología que es un tsunami y que avanza a una velocidad de vértigo". Según el estudio de Unicef sobre el impacto de la tecnología en los menores que cada vez más los jóvenes son conscientes de sus riegos, pero alerta que sigue habiendo casos de acoso o de acceso a contenidos de riesgo como la pornografía: "Hace falta regulación, leyes, también sobre el sector privado y que haya rendición de cuentas". Sobre el entorno familiar y escolar, cree que los centros educativos aún "no se han adaptado a los retos del siglo XXI". En la conversación también ha estado presente Alicia Banderas, psicóloga infanto-juvenil que avisa que los "jóvenes tienen carencias desde el punto de vista de la educación sexual y sexo-afectiva"
Fede Cardelús y Laura Cuesta Cano, profesora de la UCJC y divulgadora en bienestar digital, ponen el foco en el acoso escolar y en cómo detectar y denunciar el ciberbullying.
Detrás de un caso de bullying hay un agresor o un grupo de ellos. Cuando se intenta hablar con las familias de los acosadores, estas suelen no aceptarlo y lo niegan inicialmente, lo que dificulta todavía más la intervención.
Televisión española habla con expertas en la materia para abordar las dificultades existentes para abordar este problema, pero también las posibles soluciones al mismo. Apuntan que hace falta preparación y que detectar señales tempranas de alerta, dialogar y escuchar sin juicio ni banalización son acciones clave para frenar comportamientos de acoso escolar.
En el Día Internacional contra la violencia y el acoso escolar padres y madres se concentran a las puertas del Congreso de los Diputados para protestar contra el acoso en los colegios. En 'Mediodía en RNE' hablamos con José Manuel López, presidente de la asociación Trencats: "Pedimos una ley de acoso escolar que proteja a las víctimas y tenga la reparación del daño, porque ahora parece que los niños tienen menos protecciones que los adultos". Entrevista completa en RNE Audio.
En la semana que celebramos el Día Internacional contra la Violencia y el Acoso Escolar, Fede Cardelús y el profesor Toni García Arias analizan cómo mejorar los protocolos para detectar y gestionar los casos de bullying en los centros educativos.
Mara Peterssen yla doctora en Psicología Laura Rojas-Marcos reflexionan sobre la inteligencia artificial como herramienta para cuidar nuestra salud mental.
La Fundación MAPFRE y Siena Educación han elaborado un informe que revela que la ansiedad destaca de forma contundente como el principal problema en las aulas y que, además, las redes sociales se han convertido en el principal factor de riesgo para los menores. Es decir, seis de cada diez docentes califican hoy en día de "regular" la salud mental de sus alumnos. Además, este miércoles miles de estudiantes se han manifestado en diferentes puntos de España contra el bullying para arropar a la familia de Sandra Peña, la alumna de 14 años que se suicidó hace dos semanas en Sevilla. Sobre esta problemática social, en el 24 Horas de RNE hablamos con Coral Latorre, secretaria general del Sindicato de Estudiantes, y con Javier Urra, doctor en Psicología.
La familia de Sandra, la menor que se suicidó por haber sufrido acoso escolar, han salido este martes a la calle en Sevilla arropada por miles de personas para decir basta al acoso escolar.
En varias ciudades de todo el país, los estudiantes han tomado las calles para que la muerte de Sandra no quede en el olvido. Reivindican más concienciación para dejar de trivializar un problema que puede tener consecuencias irreversibles. Según un estudio de la Fundación Mapfre, solo un 5% de los docentes ha recibido formación en protocolos de acoso.
Las manifestaciones de norte a sur pueden ser un acelerador no solo para visibilizar el problema, sino también para luchar desde toda la sociedad y con medidas más efectivas contra el sufrimiento que provoca el acoso.
Quienes logran sobrevivir al acoso dicen que las heridas no desaparecen, pero enseñan. Nidia Represa lo sufrió en los años de Instituto, y ahora vuelve a las aulas para intentar que otros no pasen por lo mismo.
Represa sabe perfectamente lo que siente alguien que quiere quitarse de en medio. Lo pensó muchas veces durante su adolescencia cuando sufrió el acoso y ciberacoso de sus compañeros. Denuncia que "los centros educativos no tienen la formación y si las familias están perdidas, los menores también porque no saben detectar cuando algo es una broma y cuando no".
Un caso como el de Sandra, con el peor de los finales, le genera frustración. Represa decidió estudiar Psicología y ayudar desde dentro de las aulas. Muchas familias acuden a ella cuando encuentran que el centro escolar no abre el protocolo. "Por mucho que los centros digan que tienen programas, medidas, la mayor parte actúa como ha actuado este centro de Sevilla", admite Represa, que trata que los centros tengan información sobre cómo actuar cuando alguien lo está pasando mal.
La familia de Sandra, la niña de 14 años que se suicidó en Sevilla, va a denunciar al colegio por no tomar medidas ante el acoso escolar que sufría. La dirección, denuncian, ni siquiera comunicó a algunos profesores lo que ocurría y la niña llevaba en tratamiento psicológico desde el verano.
"Hubo un cambio de clase antes de empezar el curso, en el mes de septiembre, pero más que una medida fue una petición de mi hermana", cuenta su tío Isaac.
Este viernes se ha celebrado una concentración en homenaje a la menor. Allí se ha visto la indignación de otros padres que se plantean sacar a sus hijos de ese centro.
La ley obliga a que los centros tengan un protocolo contra el acoso. No existe uno a nivel nacional, sino que cada comunidad autónoma aplica el suyo, pero son similares. Cuando el director activa el protocolo, se inicia una investigación en la que tienen un papel clave los profesores.
La presidenta de la Federación española de asociación contra el acoso escolar, Carmen Guillén, explica que hay que "tener en cuenta la percepción de los docentes para verificar si es acoso escolar o no, porque cuando no hay una neutralidad es un error".
Además, los protocolos establecen que hay que garantizar la seguridad de la víctima, actuar sobre el agresor y hacer un seguimiento. Sin embargo, las asociaciones contra el acoso denuncian que hay poca concreción. Algunos centros se limitan a separar de aula a víctima y acosadores, si bien el acoso puede darse en baños o en el patio. "El acoso está oculto a ojos del adulto", expresa el presidente de la Asociación nacional contra el acoso escolar, Enrique Pérez,
Demostrar el acoso es difícil y casi la mitad de los casos se archivan sin sanción. Debe probarse la desigualdad, el abuso de poder y la indefensión de la víctima. "Si la víctima se defiende, ya no es acoso escolar", ilustra Guillén. La clave, aseguran los expertos, está en la prevención; por ello, piden que se actualicen y que haya un plan nacional contra el acoso escolar, protocolo único.
Varios centenares de familiares de menores escolarizados en el colegio Irlandesas Loreto de Sevilla se han concentrado este viernes en una plaza cercana a la vivienda de la joven de 14 años que este miércoles se precipitó desde un balcón en la calle Rafael Laffón, en la que han rendido homenaje a la menor y han denunciado presuntos casos de acoso escolar en el centro.
A la concentración han acudido los padres, el hermano y el abuelo de la adolescente, además de numerosos vecinos y allegados. La madre, visiblemente emocionada, ha acudido vestida con la camiseta del equipo de fútbol en el que jugaba su hija.
Los asistentes, reunidos en torno a un altar que se ha establecido hace varios días con flores y velas en memoria de la joven, han expresado su indignación por lo sucedido y han pedido responsabilidades al centro educativo. "El colegio solía decir que la niña tenía problemas en casa, pero eso no era cierto. No le hicieron caso. Le decían a la madre que la vigilarían en el recreo, pero era mentira", ha afirmado una de las asistentes durante el acto.
La Junta de Andalucía llevará ante la Fiscalía al Colegio Las Irlandesas de Sevilla, el centro al que acudía la niña que se suicidó este martes, por no activar el protocolo. En el informativo '24 Horas de RNE' hablamos con José Manuel López Viñuela es padre de Kira López, y presidente de Trencats/Rotos: una asociación contra las violencias en las escuelas. López Viñuela ha afirmado contundentemente: "Tiene que haber alguna ley que condene al centro educativo sin necesidad de ir al juzgado. Los responsables son los padres de los acosadores, la dirección y los docentes del centro". Insiste en aplicar los protocolos "que correspondan según ley" y cuenta que en el caso de su hija "no se activó ningún protocolo".
La niña, de 14 años, se suicidó el martes al volver del colegio. Los padres habían avisado de que sufría acoso y de que se autolesionaba. Aún así, el centro no activó los protocolos según ha constado la inspección educativa.
Sí se tomaron algunas medidas en clase como separar a la alumna de sus acosadores. Pero no se siguió la normativa que le habría dado más protección. La Junta de Andalucía no es la única que lo investiga. El Defensor del Pueblo Andaluz también lo hace de oficio.
El centro asegura que está trabajando con las administraciones correspondientes. La Policía Nacional también intenta esclarecer las causas que están detrás del suicidio de la adolescente. FOTO: EUROPA PRESS / ROCÍO RUIZ
La Junta de Andalucía está investigando la muerte de una niña de 14 años que este martes, al volver del colegio, se suicidó. La Consejería de Educación pretende conocer si la menor sufría acoso en el centro escolar en el que estudiaba y si habían activado el protocolo existente en estos casos. En el programa 'Mediodía en RNE' hablamos con Carmen Cabestany, presidenta de la AsociaciónNACE, No Al Acoso Escolar: "Es verdad que cada vez hay más conciencia, pero nosotros creemos que esto va en ascenso. Un estudio habla de que un 35% de los alumnos ha sufrido acoso, cuando en 2006 estábamos en un 25% aproximadamente".
Sobre qué señales pueden ver los padres para identificar que sus hijos sufren acoso escolar, nos explica la regla de "las tres C": "El cuerpo del niño acosado se hunde, observamos cambios en el carácter e intenta hacer campana, o novillos, ya que no quiere ir al colegio porque sabe que el que le van a maltratar". La presidenta advierte que, aunque en la adolescencia hay más ejecuciones de la ideación suicida, "lo grave es que hay niños muy pequeños, nosotros hemos visto de 6 años, que ya tienen esa idea". Cabestany insiste en la importancia de la prevención, ya que la inmensa mayoría no saben detectarlo o no saben que se están enfrentando a eso. "Hay que actuar desde casa, educando bien. No puede ser que tengamos niños acosadores". Entrevista completa en RNE Audio.
El acoso escolar va a más. Solo en un curso ha crecido casi un 3%. Del 9 ha pasado al 12%, según una encuesta de la Fundación Anar, hecha a 9.000 estudiantes. Unos datos que tienen en cuenta el acoso en las aulas o el patio, pero también el que se sufre en las redes, aupado por la inteligencia artificial que se usa ya, en más del 14% de los casos de ciberacoso.