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IÑAKI DÍEZ (Corresponsal de RNE en Roma).- La manera en que se pone fin a la legislatura ha causado rechazo fuera de Italia. El ex primer ministro Silvio Berlusconi declaró en un principio que Europa quería acabar con la industria. Después se moderó, asegurando que era un convencido europeista. Berlusconi podría colocar un hombre de cartón a sus órdenes si las encuestas no suben del 16% que es la intención que tiene en estos momentos. El primer ministro, Mario Monti, reconoce que en Italia, como en otros países, hay riesgo de deriva populista. Beppe Grillo, el antisistema, es el segundo en intención de voto. El jueves, Berlusconi viaja a Bruselas y del recibimiento que reciba de sus colegas del Partido Popular Europeo pueden depender sus decisiones. Mientras tanto, Italia busca a Ruby: la joven no se presentó al juicio por supuesta prostitución de menores y la fiscal cree que es para retrasar la sentencia. Así que Italia se pregunta: ¿dónde está Ruby?

El primer ministro italiano, Mario Monti, ha afirmado que no está considerando en estos momentos si presentarse o no a las próximas elecciones, que se celebrarán a comienzos de 2013, y ha señalado que no se debería dramatizar sobre la reacción de los mercados al anuncio de su inminente dimisión.

La respuesta de los mercados ha hecho que en Italia aumente todavía más la preocupación por la crisis política. Las incógnitas allí son ahora el futuro de Mario Monti y la fecha de esas elecciones para elegir otro gobierno en las urnas, todo apunta a que serán en febrero. El tiempo de los técnicos ha terminado, sentenciaba anoche Silvio Berlusconi. "No hay un solo indicador económico que sea positivo", añadía para justificar la maniobra que ha forzado a Mario Monti a anunciar su dimisión en cuando se aprueben los presupuestos. Esta misma mañana se ha suspendido el juicio del llamado Caso Ruby, en el que está acusado de abuso de poder y prostitución de menores, por incomparecencia de la joven a la que presuntamente favoreció. Una maniobra para dilatarlo hasta después de las elecciones, ha acusado la fiscal.

El anuncio de dimisión del primer ministro italiano, Mario Monti ha desatado de nuevo la inquietud en los mercados de deuda. La prima de riesgo italiana ha subido esta mañana más de 40 puntos y, aunque en menor medida, también ha repuntado la española. Las bolsas de los dos países registran también pérdidas.

IÑAKI DÍEZ (Corresponsal de RNE en Roma). Pese a que Mario Monti esperó a que los mercados estuvieran cerrados para anunciar su marcha, la prima de riesgo ha llegado este lunes a los 356 puntos, cuando el viernes cerró en 323. La bolsca cae un 2,3% y la cotización de los bancos se desploma. Los mercados temen la incertidumbre de la campaña y también a Silvio Berlusconi, que durante los últimos meses ha criticado las medidas económicas y los recortes del gobierno técnico. Monti de momento calla, pero quizá su nombre en una candidatura centrista reconduzca el voto de muchos ciudadanos. Berlusconi trata de sumar y el Partido Democrático de no perder; el grupo de Beppe Grillo intenta ganar en aguas revueltas y los centristas buscan su faro. Italia ya está en campaña.

Ante la crisis política desencadenada en Italia tras el anuncio de Mario Monti de presentar su dimisión "irrevocable", hay división de opiniones entre la clase política del país. La Liga Norte saluda el fin de la anomalía democrática que supuso la designación de un Gobierno tecnócrata, mientras el centroizquierda acusa a Silvio Berlusconi de ser un irresponsable. Fuera de Italia, una de las primeras reacciones ha sido la del presidente de la Eurocámara, Martin Schulz, que ha calificado al ex primer ministro de ser una amenaza para su país y para la Unión Europea. 'Il Professore' ha preferido forzar su dimisión antes que convertirse en rehén de Berlusconi. Ello conduce a dos reflexiones: el experimento de un Ejecutivo tecnócrata termina antes de tiempo y los italianos volverán a las urnas en febrero de 2013, dos meses antes del fin de la legislatura, y lo harán con la polémica ley electoral de Berlusconi.

El primer ministro italiano está en la cuerda floja. La prueba, los escaños que ayer los senadores del partido de Silvio Berlusconi dejaron vacíos, para no apoyar dos decretos del gobierno tecnocrático. Las leyes salieron adelante, pero el desaire del Pueblo de la Libertad deja de hecho a Mario Monti sin mayoría absoluta en el parlamento. Los fieles de Berlusconi abandonaban anoche el Senado con signos de victoria, mientras el resto de las fuerzas políticas reaccionaban en bloque con indignación y rechazo ante lo que consideran la última maniobra del llamado "Cavaliere", que amaga, además, con volver a presentarse a las próximas elecciones, en primavera. Lo negaba solemnemente a finales de octubre, para desdecirse al día siguiente, tras ser condenado a cuatro años de prisión por fraude fiscal. Después de un mes deshojando la margarita, su segundo de a bordo ha asegurado hoy que el exprimer ministro encabezará las listas de su partido.

Mario Monti, en apariencia sereno, solo ha dicho que está en contacto con el presidente de la República para conocer su opinión sobre el preanunciado paso de su antecesor en el cargo.

El secretario del Pueblo De la Libertad (PDL), Angelino Alfano, se reúne este viernes con el jefe del estado italiano, Giorgio Napolitano, después de que su partido amagara con una crisis de Gobierno en el Parlamento.

Nada más conocerse que el exprimer ministro, Silvio Berlusconi, volvía a primera línea, su partido entró en campaña y se abstuvo en dos votaciones en la Cámara y el Senado. Las leyes salieron adelante pero los conservadores dejaron ver la silueta de su disconformidad. Una tensión de la que es consciente Napolitano.

La actitud mostrada el jueves por el partido de Berlusconi es, de hecho, el inicio de la campaña electoral. Alfano tratará de pactar con el presidente de la República un adelanto de los comicios, quizás a febrero.

Este movimiento ha dejado descolocado al centro izquierda, que según las encuestas es quien hoy ganaría las elecciones. Si la situación perdura, ellos se desgastan apoyando al gobierno técnico mientras Berlusconi hace campaña. Y no están por la labor.

También el centro de Casini y Montezemolo busca su sitio porque Il Cavalliere es capaz de aglutinar buena parte de su electorado.

La Liga Norte se frota las manos porque intuye que puede reverdecer viejos pactos que le llevaron al gobierno de Italia. Y Beppe Grillo sigue su cruzada aunque estos días un poco desplazado.

IÑAKI DÍEZ (Corresponsal de RNE en Roma).- Se ha escenificado el acto primero de la vuelta anunciada: por medio de una nota, el ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi anuncia que está preparado para volver a la primera línea poítica.

Lo divulgó a las 10:30 de la noche del miércoles, tras una larga reunión con su estrecho grupo de colaboradores que esperaban, sin embargo, la ratificación de que Il Cavalliere quedaba fuera definitivamente del espectro político.

"El país está al borde del precipicio... Estamos peor que hace un año... Estoy asediado por quienes me piden que vuelva a tomar las riendas", son los argumentos que aparecen en ese comunicado oficial de Berlusconi.

Tiene por delante una empresa titánica, porque su partido se ha convertido en una tribu de antropófagos, donde unos se devoran a los otros y quienes no mueren políticamente huyen.