Alejandro Prieto es un español que lleva seis años viviendo en Hawái, en la zona del incendio. Ahora mismo está sufriendo las consecuencias de los fuegos devastadores que afectan a la isla de Maui.
Ahora mismo se encuentra evacuado en la otra parte de la isla donde sí que cuenta con luz y agua, pero insiste en la necesidad de ayuda urgente a través de una cuenta segura como la del surfista profesional Slater Trout. "Cualquier ayuda, por pequeña que sea, es mucho aquí", insiste el español. "Maui necesita ayuda", insiste.
Prieto recuerda cómo se encontraron el fuego cuando no funcionaban los teléfonos y les sorprendió viéndolo por la ventana. Huyó en un coche junto con sus amigos en dirección contraria. Actualmente se encuentra en casa de unos amigos al otro lado de la isla.
"Están sacando a los turistas de la isla y no sé qué planes tienen para los cientos y miles de personas que se han quedado sin casa", narra desde Maui este español.
La combinación del fuego y el viento de un huracán ha arrasado una de las islas del archipiélago hawaiano. 53 personas han muerto en los incendios que han arrasado Maui, la antigua capital. Las llamas han atrapado a vecinos y turistas, por lo que muchos de ellos han tenido que huir lanzándose al mar.
Desde el helicóptero se ve una ciudad devastada, envuelta en humo. Poco queda en pie en la antigua capital de Hawai, una ciudad de unos 13.000 habitantes. "Es como si la hubieran bombardeado, parece una zona de guerra", describe el piloto. Desde el coche ya no se distinguen los restaurantes y negocios. Uno de sus mayores tesoros, su famoso árbol, la enorme higuera de bengala de maui "también la devoró el fuego", cuenta el último hombre que huyó del muelle.
"Hay cadáveres flotando"
El incendio los sorprendió. Las llamas, alentadas por el viento de un huracán, se propagaron rápido y algunos, atrapados, saltaron al mar. La Guardia Costera ha rescatado a varias personas nadando en el Pacífico. "Hay cadaveres flotando y en el dique, estamos sacando gente desde anoche, tratando de salvar vidas, necesitamos mas ayuda", se desespera un vecino ante las cámaras.
Los turistas de los que depende la ciudad también han sido evacuados. Cada año dos millones de personas visitan la isla; ahora esperan en el aeropuerto donde algunos todavía continúan asustados.
El miércoles sacaron a 11.000 viajeros de la isla. Las compañías aéreas están enviando más aviones, y allí temen que les cueste años recuperarse de esta catástrofe.
La Casa Blanca sigue muy de cerca los fuegos sin precedentes que están afectando varias zonas turísticas de Hawái, ya hay 36 muertos. Varias personas se han echado, literalmente, al mar para huir de las llamas.
Ya son 36 los muertos por el incendio y miles las personas evacuadas. La ciudad de Lahaina está arrasada por las llamas y hay otros dos focos en esa isla, con miles de turistas estos días. Algunas personas han saltado al mar para escapar de las llamas. Los vientos provocados por el paso de un huracán han propagado sin control unos incendios que ya se consideran "apocalípticos". Los fuegos siguen fuera de control y las autoridades temen que el número de víctimas mortales pueda aumentar y el presidente Joe Biden ha enviado sus condolencias y pide a los hawaianos que sigan las instrucciones de evacuación.
El gran incendio en la isla de Maui, en Hawái, ha dejado hasta el momento 36 personas muertas y varios desaparecidos. Además muchas zonas se han quedado sin electricidad y sin poder llamar al teléfono de emergencias. Los hospitales están cerca del colapso. La gente ha llegado a saltar al mar para huir de las llamas. Un huracán, que no va a tocar tierra en Hawái, ha sido el responsable de avivar el fuego. Ya lo han definido en las islas como "uno de los días más desafiantes de su historia".
Los incendios activos en Hawái devoran la isla de Maui. Algunos vecinos, atrapados, se han lanzado al mar para escapar. Hay casas envueltas en llamas y miles de hawaianos han sido evacuados. Además, ha dejado sin electricidad a cerca de 14.000 hogares y negocios.
En Ciudad Juárez, al norte de México, cientos de personas se han concentrado ante los rumores que habían circulado por las redes sociales de que EE.UU. iba a abrir las fronteras. Sin embargo, dicha información era falsa y al llegar a los pasos fronterizos se encontraron con las puertas cerradas y con alambres de espino desplegado en la parte de las vías de tren.
Las autoridades fronterizas de la ciudad texana de El Paso, han avisado que la legislación estadounidense con respecto a la migración irregular no ha cambiado y que podrán devolver a sus países de origen a cualquier persona que cruce la frontera de forma ilegal. Además, se les prohibirá la entrada a EE.UU. durante cinco años. Le han pedido que solo se informen a través de los canales oficiales y no hagan caso a los rumores que difunden los contrabandistas a través de las redes sociales.