Tras la oleada de conciertos cancelados debido al coronavirus, han sugido varias iniciativas que harán algo más luminoso el ‘encierro’ a los melómanos. Una de ellas ha sido bautizada como ‘Cuarentena Fest’ y tiene como objetivo que los artistas puedan repartir música a domicilio.
Muchos trabajadores temen que la epidemia del coronavirus se acabe llevando su empleo, como los 90.000 trabajadores de las empresas encargadas de los comedores en residencias o colegios, cerrados estos días en toda España. Tampoco se libra del coronavirus el trabajo de los riders, que llevan comida a los que no salen de casa. Los repartidores dicen que el miedo al contagio, el acopio masivo en supermercados y el cierre de bares y restaurantes han reducido los pedidos.
Madrid ha echado el cierre. Por toda la ciudad se han visto persianas bajadas y terrazas recogidas. La orden de cierre afecta a todos los establecimientos y comercios, excepto a los de primera necesidad. Los restaurantes y bares estarán cerrados pero podrán entregar a domicilio. Mientras que pueden abrir los estancos, fruterías, gasolineras y supermercados.
Muchos hacen caso de la recomendación de permanecer en casa, aunque otros tantos vuelven a llenar, más de lo habitual, el carro de la compra. Por su parte, la asociación local de comerciantes anima a subir estos días la persiana, a pesar de la excepcionalidad.
La corresponsal de TVE en Asia-Pacífico, Mavi Doñate, junto a compañeros de otros medios españoles desplazados en China, ha contado su experiencia durante la dura cuarentena decretada por el Gobierno chino para combatir la propagación del coronavirus. Todos han subrayado la importancia de respetar la recomendación del Gobierno de España de quedarse en casa para evitar la propagación exponencial del coronavirus. Además, nos han enviado "ánimos" para superar esta crisis.
Cerca de un centenar de Mossos trabajan en el operativo de control de los accesos a Igualada, uno de los cuatro municipios de Barcelona confinados como medida preventiva para tratar de frenar el brote de coronavirus. La localidad de Igualada se mueve a medio gas, con menos actividad de la habitual. Solo se permite la entrada de los camiones de reparto de mercancías, de alimentación y de farmacia. La población afronta el confinamiento con incertidumbre porque no sabe cuándo va a terminar esta medida.
La presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, no convence a los inversores y a los mercados, que cerraron ayer en mínimos históricos. En Las Mañanas de RNE con Íñigo Alfonso hablamos con Santiago Carbó, catedrático de economíca y director de Estudios Financieros de Funcas. Señala que todos esperaban de la presidenta del BCE una bajada al menos, simbólica de los tipos de interés. Critica que haya dejado la pelota en el lado de los gobiernos cuando son ambos, tanto el banco europeo como los gobiernos, además de los ciudadanos, los que tienen que dar el do de pecho en esta crisis. Es "vital la cooperación internacional" sobre todo desde los países más ricos económicamente, hacia los más afectados.
Quince comunidades autónomas, País Vasco, Galicia, Cataluña, Murcia, Navarra, Canarias, Aragón, Extremadura, Castilla-La Mancha, Cantabria, Asturias, Comunidad Valenciana, Baleares, Castilla y León y Andalucía, y la ciudad autónoma de Melilla han decidido este jueves cerrar todos sus centros educativos en todos los niveles ante el avance del coronavirus, sumándose así a la Comunidad de Madrid y La Rioja.
