Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

El president Carles Puigdemont ha protagonizado un agrio choque verbal con el líder del PPC en el Parlament, Xavier García Albiol, que lo ha acusado de dar "instrucciones políticas" a los Mossos para evitar más detenciones en Gràcia, unas "órdenes políticas" a la policía que Puigdemont ve más "acostumbrado al ministro de Interior.

En la sesión de control al presidente de la Generalitat en el pleno de este miércoles en el Parlament, García Albiol ha denunciado que, tras los incidentes ocurridos en el barrio de Gràcia de Barcelona a raíz del desalojo del "banco expropiado", sólo ha habido "dos detenidos", algo que a su juicio "no es casual", ya que se debe a una voluntad de no incomodar a la CUP en pleno debate sobre los Presupuestos.

"Hay que ser muy poco responsable para mentir o sugerir una mentira", ha replicado Puigdemont, que ha dado a entender que el Gobierno central sí está "acostumbrado" a dar "órdenes políticas" a la Policía para que, por ejemplo, elabore "informes falsos" contra adversarios políticos del PP.

El candidato de CDC al 26J, Francesc Homs, se ha mostrado convendido de que la CUP cumplirá finalmente con el acuerdo con Junts pel Sí y dará estabilidad a la Generalitat, después de que haya mostrado sus reservas con los presupuestos autonómicos presentados.

Así lo ha dicho en una entrevista en Los Desayunos de TVE, en la que ha señalado que se debe abordar "de forma estructural" el encaje de Cataluña en España puesto que, en su opinión, "hoy día catalanismo es independentismo mayoritariamente".

La visita del secretario general de Sortu, Arnaldo Otegi, este lunes al Parlamento de Cataluña, invitado por la CUP, ha despertado expectación y polémica. El dirigente de la izquierda abertzale dice que Cataluña es un referente, y que su objetivo en Barcelona es escuchar y aprender del proceso independentista catalán. Otegi ha mantenido encuentros con Junts pel Sí y con Catalunya Sí que es Pot, mientras que Ciutadans, el PSC y el PP han rechazado reunirse con él. 

El Parlament aprueba una moción que apoya los objetivos de la declaración del 9-N, anulada por el Tribunal Constitucional. Los votos de Junts pel Sí y la CUP la han sacado adelante.